Rosas One-Shot Wigetta

Rosas

"Enfermedad terminal" dos palabras que a nadie le gustaría escuchar, para Guillermo aquello fue un golpe bajo con tan solo 21 años, a su vida ya poco le quedaba y no lograba entender el porqué. Él era un chico sin vicios,agradecido por todo y con todos y jamas habia mirado en menos a nadie pero no sacaba nada lamentandose,tenía los días contados y pretendía aprovecharlos al máximo aunque eso solo le duró unos meses hasta que tuvo que ser internado en el hospital en el que sigue hasta el día de hoy.

Este es un día en los cuales Guillermo espera con ansias que aquel chico que le robo el corazón y a la vez el que lo rompio vuelva a cruzar por esa puerta con un bello ramo de rosas...las preferidas de Guillermo

*Un año y medio atras*

Luego de casi cinco meses bien aprovechados por Guillermo hoy empezaria lo que él denominaba "encierro" y es que no le parecia nada el hecho de tener que quedarse lo que quedara de su vida en una habitación de hospital, pero su enfermadad habia avanzado tan rapido que sorprendio a todos incluyendo a los doctores.

Guillermo se sentia fatal, pero no por que estuviera enfermo, sino que ya no podria estar con sus padres y su pequeña hermana el tiempo que el quisiera, ahora de pasar a estar 24/7 con ellos solo los podria ver durante el tiempo de visitas el cual duraba unas cuatro horas y el resto del día se lo debia pasar encerrado en aquella habitación...aunque con unas cuantas súplicas y algunas caritas de perro podria lograr que la enfermera lo dejara pasear por el resto del hospital.

Así fueron pasando los días hasta cumplirse un mes en ese lugar, Guillermo estaba completamente agradecido con las enfermeras ya que le habian permitido poder pasear por el hospital, claro que, llevando consigo un tubo con rueditas el cual cargaba con la tipica bolsa de suero mezclado con algunos medicamentos.

Fue durante una de esas salidas en la que lo conocio. Aquel chico se encontraba de espaldas, a simple vista se podia notar que hacia ejercicio.Guillermo se habia quedado embobado mirando a el chico de espalda ancha que para cuando este se dio la vuelta un notorio color rojo lleno la cara de Guillermo. El chico de espalda ancha sonrio sutilmente antes de que Guillermo retirara la mirada totalmente avergonzado.

Ese fue el primer contacto entre ambos y es que Guillermo juraria haber sentido una corriente electrica recorrer por toda su columna vertebral.

Habían pasado unos cuantos días y las miradas entre Guillermo y aquel chico eran cada vez más duraderas y menos sutiles, hasta que un día Guillermo se sorprendio a si mismo buscando a aquel chico con la mirada y es que ya para que negarlo, el chico de espalda ancha lo tenía en las nubes. Fue ese mismo día en el que Guillermo no veía por ninguna parte al chico que le quitaba el sueño, se sintio algo decepcionado pero no sorprendido estaba claro que este día llegaría, era más que obvio que aquel chico iba a visitar a algun familiar y al parecer ya lo habian dado de alta o algo por el estilo pero los pensamientos de Guillermo fueron interrumpidos cuando sintio a alguien tocarle el hombro, en el momento en que se dio vuelta se encontró con aquel chico con un ramo de rosas en las manos, se sentia a desfallecer, el auto-control se habia ido a tomar por saco y los nervios comenzaron a atacarlo, mientras,él trataba de convencerse que simplemente se habia equivocado de persona o que necesitaba indicaciones para llegar a algun lugar pero el simple hecho de que el chico siguiera de pie frente a él sin hablar le ponia los pelos de punta.

-Hola- Fue en ese momento en que su cerebro olvido lo que era respirar. Le estaba hablando a él...a ÉL.

Guillermo observaba como aquel chico movia los labios pero no escuchaba ninguna palabra salir de su boca empezo a ver todo borroso y luego se fue a negro, lo ultimo que pudo ver fue la mirada preocupada de aquel chico. Despertó en la habitación del hospital, se encontraba algo desorientado, ¿acaso lo habia soñado todo? ¿en realidad su mente habia sido tan cruel para crear esa escena?, diversas preguntas cruzaban por su cabeza pero todad fueron calladas cuando se dio cuenta del ramo de rosas que se encontraba en una mesita al lado de la camilla y ahi lo supo, nada habia sido un sueño, el chico en verdad habia llevado aquellas rosas para el.
Esto fue el comienzo de todo.