7

1.4K 104 0
                                    

Dormia plácidamente en brazos de 178 cuando unos sonidos son alertaron de que algo estaba cerca, desperté alterada, unos guardias habían entrado a la jaula donde estaba y comenzaron a golpearnos mientras se llevaban a 178, que al parecer habían sedado
- NOO- traté de llegar a el pero un dardo fue disparado así mi, dejándome inmóvil, viendo como 178 era llevado por aquellos guardia.
Las horas pasaban y no podía dejar de pensar en él, que había pasado, porque no lo traían, mi histeria comenzó a brotar,  me golpeaba contra las rejas y rugía por 178, no podía vivir sin el, es mío, porque me lo quitaban? .
  Los demás chicos quisieron tranquilizarme pero su aroma me ponían peor, 139 y 136 me consolaban mientras me decían cosas lindas
- tranquila todo estará bien, nadie le hará daño, solo es un castigo.-
  Las horas pasaban y el no volvía., hasta que de la habitación roja salió mi padre.
-DONDE ESTA 178?- mi grito hizo que se percatara de mi y se acercó a la jaula haciendo que cada nueva especie se pusiera en guardia.
- mi querida hija- lo odiaba y como me llamaba me daba asco- te cuido con devoción, acaso no te doy lo que querés?
- acaso te pedí algo ,padre- lo mire sin miedo y segura de mi misma.
- te volviste una puta, hija-
- lo que haga no te incumbe padre o acaso yo te impido que te cojas a la enfermera que esta detrás de ti- mi comentario lo sorprendió y voltio viendo a la enfermera que mencione, Teresa era su nombre si no mal recuerdo.
- como...-
- que como lo se ? , o padre la próxima vez que te la cojas apaga las bocinas así nadie te oiga.- me miró enojado y luego a Teresa. El sabía, teresa lo hizo, para ganar respeto.
- es diferente hija-
- encerio, yo que sepa, me castigas todos las semanas porque mate mi madre- aquello lo dejo estático en su lugar y el ambiente se volvió tan tenso que se podía contar con un cuchillo, el aroma que desprendía mi padre era de enojo, estaba realmente furioso- al parecer tu amor sobre mi madre era pura palabras- me reía
- CALLATE MALTITA PERRA, ERES UNA PUTA QUE SE ACOSTO CON UN MOUSTRO- como sabia que 178 y yo...- eres estupida crees que no sabría eso, jajjajaj en tu último castigo nos dimos cuenta de algo hija? -
que demonios?? Que me hizo?
-mi querida hija me hará abuelo-
-QUE?!!!!-  la cara de mi padre estaba radiante y los demás estaban asombrados por lo que dijo mi padre.
- felicidades hija, ya tengo planes para el bastardo que llevas en tu vientre- automáticamente lleve mis manos al vientre tratando de protejer a mi hijo- sin embargo aunque es linda la noticia yo no te di permiso para acostarte con ese maldito gato-  mi cara se volvió como el papel sabia a que iva todo esto- el pagara el precio, hija-
-NOOOO, DEVUELVEMELO- trate de agarrarlo por el cuello pero ya se había alejado de la jaula, sonriendo caminando devuelta a la habitación roja.
  los demás me miraron con tristeza y me abrazaron, estaba desesperada, mi compañero , ¿que le pasaria a mi compañero?.

Lia ( Nueva Especie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora