27 de abril

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No sé cómo comenzar, me quede 5 minutos mirando la pantalla pensando en una buena introducción pero la verdad es que ninguna me convenció.

Cené tanto que mi cerebro no carbura bien, solo estoy lamentando haberme servido pasta y chuleta una segunda vez. Para empezar, ni siquiera debí de haber cenado, pues ni hambre tenia.

Siempre digo que ya fue suficiente y que quiero un cambio, pero es un ciclo que no puedo romper. Digo que ya fue suficiente, no duermo por planear mis comidas, al día siguiente no tengo motivación y digo "bueno, mañana si comeré bien".

De verdad estoy harta, harta de sentirme así, de verme así, de compararme constantemente y de llorar viéndome al espejo. A veces no tengo idea de cómo luce mi cuerpo, pero las fotos que los demás me toman me dejan bastante traumada. No se como pedir ayuda sin que los demás sientan lastima o que crean que soy una persona débil. De verdad no creo que alguien tenga idea de cómo me siento. A veces quisiera que alguien me prestara atención o de verdad se preocupara por mi.

Apenas y puedo con mi existencia, me siento muy agotada. Me estresa no saber nada de la escuela ni de lo que estoy haciendo o aprendiendo. Me estresa el trabajo dónde tampoco sé muchas cosas, la mayoría del tiempo me siento inútil.  Me estresa que cada día mi mamá se queja de los vecinos y que no dejan de hacer ruido. De verdad, por cualquier ruido ella piensa que es porque la traen en contra de ella y no se como decírselo sin que se sienta mal o se moleste conmigo. Me estresa que mi hermano esté todo el día sentando en la computadora y no haga nada por su salud (qué hipócrita salí). Me estresa que mi papá todo el tiempo este enojado y no diga lo que siente o el motivo por el cuál está así (nuevamente, hipócrita).

Bueno, esas son cosas que no puedo controlar y trato de que no me afecte tanto pero la verdad es que mi me molesta.

Pero de todo, lo que más me estresa soy yo. Que no puedo dejar el teléfono ni 10 minutos, que no hago los deberes a tiempo, que no soy ordenada, que no me visto bien, que no me peino o maquillo bien, que no soy más delicada o limpia con mis cosas y mi aspecto, que no puedo ordenar mi vida, que no puedo hacer dieta porque no puedo dejar de comer, que no hago ejercicio, que no leo más, que no practico algún deporte o toco algún instrumento, que no canto ni bailo bien, que no practico pintar, que no tengo ningún talento ni tema de conversación, pero lo que más me estresa es lo mucho que me exijo y que de todas formas no sirve porque no hago nada. Realmente lo único que hago es robarle el oxígeno a los demás.

Esta bien, ya leí y suena muy deprimente el asunto. Que necesito urgentemente que me canalicen con un psiquiatra, y quizá es verdad pero no cuento con tantos recursos para hacerlo.

Pero la verdad es que no todo es malo.

Está él.

Siento que es un rayito de sol en mi vida, me hace querer aspirar a más y me motiva para que no eche todo por la borda, pero que si algo no me gusta lo deje porque no me hace bien. Ojalá y tuviera el valor de hablarle de todo que escribí aquí. O me ayuda o se aleja porque se daría cuenta de lo dañada que estoy.

La verdad no quiero depender de nadie y mucho menos de él porque estoy segurísima que en cuanto se aburra se irá y que no siente nada por mi.

En realidad yo tampoco sé si siento algo por él.

No quiero confundir las cosas, no porque nunca alguien me haya tratado así significa que le gusto. Sólo es buena persona y a mi nunca me había tocado conocer a alguien tan bueno como él.

Me gusta que puedo ser yo cuando hablamos y no me siento tan juzgada que cuando hablo con todos los demás.

Hablando de los demás, últimamente los he evitado porque no me siento bien hablando con ellos. Siento que no les intereso y que hablan conmigo por compromiso o porque necesitan algo. En realidad así es.

Creo que ya mejor me voy a dormir o nop.

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