V. Adamo

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Disclaimer: Moriarty the Patriot pertenece a Ryosuke Takeuchi y a Hikaru Miyoshi.

Pairing: SherLiam (Sherlock Holmes x William J. Moriarty)

Advertencias: AU | Yaoi / BL | Spoilers | Fluff | ShortFic | Songfic

N/A: Supongo que, después de lo que hemos visto en el capítulo 59, se suspende la "Luna de Miel en París" para mudarnos a New York jajaja. No pasa nada, tenemos más material para fanfics, así que todo worth :"D (todavía estoy llorando por Liam, aiuda, #Takeuchipáganoslaterapia)

Título: Adamo significa «enamorarse» en latín.

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No se consideraba una persona que le gustara hacer sufrir a los más pequeños, aunque pertenecieran a la alta sociedad, y se sentía algo mal al ver las expresiones que hacía una gran parte de sus alumnos. Como el buen observador que era, pudo ver lo que transmitían aquellos jóvenes universitarios durante el examen: unos pocos parecían dispuestos a tirar la toalla, otros terminaron rápidamente y satisfechos con ellos mismos, y otros todavía dedicaban algo de tiempo a las ecuaciones para asegurarse de que el resultado era el bueno. Sacó su dorado reloj de bolsillo y, consciente de que les había dejado algo de tiempo extra para que terminaran a tiempo, sonrió y dio un par de palmadas para llamar la atención de sus estudiantes.

–Bien, se acabó el tiempo. Revisad que habéis puesto vuestros nombres e id pasándolos hacia delante para que los recoja.

Los presentes hicieron lo que les dijo su profesor y, una vez estuvieron todas las hojas de los exámenes apilados, los guardó en la carpeta color café que llevaba consigo. Se despidió con una sonrisa y les agradeció por haber hecho su mejor esfuerzo para después retirarse del aula. Mientras caminaba por el pasillo podía escuchar a sus alumnos hablar: algunos quejándose por lo complejo que había sido, otros festejando porque les había ido bien. Pero la última palabra era del profesor de matemáticas, del profesor Moriarty.

Esa era la última clase que tenía en la universidad de Durham, de modo que recogió las cosas de su despacho y se dispuso a marcharse para regresar a Londres. Sin embargo, una vez en la estación, le ocurrió algo inesperado: el tren había sufrido un pequeño accidente que lo retrasaría una hora como mínimo. El rubio suspiró y se sentó en un banco no muy lejos de allí. Pensó en aprovechar ese momento para echar un vistazo rápido a los exámenes que tenía recogidos, y eso hizo: sacó el montón de la carpeta y comenzó a echarles una ojeada. No obstante, pudo reconocer una voz familiar proveniente de la estación.

–¡¿Cómo que el tren va a tardar una hora?! —gritaba el dueño de esa grave voz que podía reconocer William desde kilómetros de distancia.

–Ha habido un pequeño problema con el motor. No podemos decirle cuánto tardará exactamente en ser arreglado...

–Maldición. Encima que hago el viaje y no me sirve para nada, tengo que quedarme más tiempo aquí...

William no pudo contener una carcajada al ver a ese hombre tan apurado y estresado por la tardanza del transporte. El azabache apretaba con fuerza su mandíbula, intentando contener una sucesión de maldiciones que el encargado de la estación no merecía. Se sobó las sienes, pensando qué debería hacer durante esa hora de "tiempo perdido". El tic nervioso de su pierna se iba intensificando y el rubio pudo concluir que estaba a punto de perder la paciencia. Cuando vio que sacaba un cigarro suspiró, comenzando a recoger las hojas de los exámenes, y, una vez lo tuvo todo guardado, se acercó a su némesis.

–Parece que ahora está atrapado en mi ciudad, Mr. Holmes.

Al escuchar aquella aterciopelada y elegante voz cerca de él, el detective abrió los ojos de golpe y buscó con la mirada a su dueño. William estaba detrás de él, con sus manos apoyadas sobre el bastón en el que ocultaba su arma. Le estaba dedicando una sonrisa sincera, cosa que hacía que Sherlock se sintiera afortunado por ser el único que las veía, y su cabello dorado era acariciado por una ligera brisa que parecía bailar con los mechones rubios. Ante tal imagen, el detective dejó caer su cigarro, anonadado por la belleza que irradiaba el noble. ¿William siempre había sido tan hermoso ante sus ojos?

Twisted Hearts {YnM | MtP}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora