Bajo su mirada

Capitulo 4

Espero que este sea el único capitulo corto que subiré de esta historia.  Sin más espero que disfruten el capitulo. 

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- Pero ¿Qué estás diciendo mamá? Yo nunca he entrado en celo. – Mirando a los ojos a la Omega mayor la cual solo soltó un suspiro antes de continuar. – Desde que eras pequeño nos dimos cuenta que eras un Alfa... Algo especial, tratabas de controlar a todos en cualquier momento y eras demasiado agresivo. Por suerte mientras crecías esos comportamientos cesaron hasta que llego tu primer celo. – Apretando un poco la mano de su esposo que se había posado sobre su hombro, dirigiéndole una corta mirada al Omega que la veía con interrogación en su rostro.

– Mamá, no creo que eso sea algo de lo que Katsuki tenga que enterarse. – Levantándose de su asiento mientras se aproximaba a la Omega algo alterado por la información que acababa de recibir. – Sera mejor que no te acerques más a Inko, al menos no en tu condición. – Rodeando el sofá para ponerse frente a su esposa. – Esta bien, Toshinori. Izuku nunca me haría daño. – Sonriendo un poco mientras jalaba la mano del Alfa rubio para que se sentara a un lado de ella. – Es importante que Katsuki lo escuche ya que estará contigo todo este tiempo y tu celo está muy cerca. – Mirando al Omega el cual se encontraba con su mirada fija en el suelo, sintiendo como todas las miradas de los presentes se posaban en él.

– No me importa una mierda que le pase al inútil en su celo, ni tampoco su vida. Yo solo estoy aquí por trabajo. – Levantándose de su asiento para caminar hacia la puerta de la habitación siendo detenido por el Alfa mayor. – Por favor Katsuki, es por tu bien esta platica. – Sujetando con un poco de fuerza el brazo del menor ganado un quejido de su parte. – Basta abuelo, lo lastimaras. – Caminando hacia donde se encontraba el Omega soltando pequeños gruñidos que iban en aumento conforme se acercaba. – Dije que lo sueltes. –

Apretando con fuerza el brazo que sujetaba al menor logrando que lo soltara a los pocos segundos, abrazando el cuerpo del Omega comenzando a restregar su rostro por el cuello del mismo, bajo la mirada sorprendida de todos los presentes. – Realmente me encanta tu olor. – Sujetando las manos del menor antes de que este tratara de golpearlo. – Maldita sea, ya te dije que no me toques asqueroso. – Moviendo sus brazos tratando de soltarse del agarre del Alfa, rindiéndose cuando este apretó con más fuerza su agarre llegando a lastimarlo un poco. – Izuku, lastimaras a Bakugou si no lo sueltas. –

Acercándose lentamente la Omega mayor a los menores sin recibir ninguna amenaza de su hijo, tomando la mano que este le ofrecía para acercarla más a ellos. – Madre, es él. Lo quiero solo para mí. – Mirando a la mujer que se encontraba frente a él con una mirada algo triste. Volviendo a soltar un gruñido al notar como otro de los Alfas presentes se comenzaba a acercar más. – No se acerquen más. – Soltando al menor para ocultarlo detrás suyo sin dejar de mirar a todos los que estaban en esa habitación, escuchando el ruido de la puerta siendo abierta para después cerrarse dándose cuenta que el menor había aprovechado la oportunidad para salir de la habitación.

–Mierda, iré por él. – Siendo detenido por una mano en su hombro perteneciente a su abuelo. – Por el momento es mejor que lo dejes solo, ha estado mucho tiempo expuesto a tus feromonas y aun no dejas de liberarlas. – Frunciendo su ceño al escuchar el gruñido que el menor le dedico. – Te recuerdo que solo eres un mocoso en comparación conmigo, no me faltes al respeto de esa manera y no tendrás problemas. Ahora toma asiento que tenemos que hablar seriamente contigo. – Soltando el hombro del menor para dirigirse de nueva cuenta a su asiento detrás del escritorio, esperando a que el contrario lo obedeciera.