𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 𝚅𝙸𝙶𝙴𝚂𝙸𝙼𝙾 𝙾𝙲𝚃𝙰𝚅𝙾

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Joohyun no ha salido del auditorio, todos se han ido menos ella, casi todos. Aprecia el momento de soledad y silencio para poner su mente en orden, para tomar la decisión de seguir buscando un tal vez o asegurarse un definitivo.

¿Por qué tuvo que enamorarse de alguien tan despistado como Seulgi?

Mejor dicho, ¿Por qué no se enamoraría de alguien como Seulgi?

Ha aprendido a leer entre líneas y la esperanza de que Seulgi sienta lo mismo que ella es vivaz, pero Joohyun cada vez que intenta dar un paso al frente Seulgi consigue la manera de que no lo haga; ya sea cuando entra en pánico por la proximidad qué hay entre ellas y comienza a hablar de más, o cuando se queda congelada en su lugar cada que Joohyun besa sus mejillas, ni decir cuando Seulgi se da cuenta que está sosteniendo la mano de la mayor y la suelta.

Son señales tan ambiguas que hacen del corazón de Joohyun un desastre.

¿Me quiere o no? ¿Le gustó o solo son ilusiones? ¿Por qué Jisoo y Jennie creen que están solas en el auditorio?

La última pregunta deja de tener que ser respondida al momento que Jennie y Jisoo se esconden detrás del escenario y la menor comienza a quejarse como gata en celo.

ㅡ¿Que haré contigo, Kang? ㅡla castaña susurra para si misma buscando dentro de su cabeza una razón que sea suficiente para detener su enamoramiento.

O para darle valor.

Solo queda una semana antes de que sea la presentación de la obra, dos semanas antes de que termine el año universitario y finalmente sus momentos con Seulgi se vean más escasos desde que ya no tendrán más materias en común.

Ni siquiera la aburrida clase de metodología de la investigación con la profesora Seo.

Es su última oportunidad por muy exagerado que suene. Sin embargo, una idea ilumina su genia mente de repente.

Si por tener las agallas de coquetearle estúpidamente a la idiota más grande del campus fue que logró incluir a Seulgi en su vida como amiga, teniendo las agallas de declarar estúpidamente su amor debe ser suficiente para al menos tener la respuesta que necesita.

Ya sea afirmativa o negativa, Joohyun no puede seguir dando vueltas alrededor de Seulgi hasta que algo pueda pasar.

ㅡ¿Unnie, que cree que estén haciendo Jisoo y Jennie en los vestidores?

La pequeña voz de Dahyun asusta hasta la más mínima fibra de Joohyun. Y ni hablar de cómo luce ahora mismo, la extremadamente pálida piel de la menor parece mezclar con su blanco vestido y cabello oscuro solo le dan una apariencia de que ha venido a reclamar la vida de Joohyun hacia el más allá.

Un grito ensordecedor por parte de la mayor y aún así Dahyun mantiene su calma y paz.

ㅡ¡¿Desde cuando estás sentada aquí?! ㅡJoohyun señala a la inocente chica a su lado en la última fila de asientos del auditorio.

ㅡHe estado aquí desde que todos se fueron y la vi solita, quise acompañarla mientras hablaba con usted misma y veía fijamente a la nada.

Joohyun se calma y mira a la chica con adoración. Dahyun puede ser realmente adorable.

ㅡEres demasiado dulce, Dubu. Pero no vuelvas a hacer eso o irás a prisión por homicidio involuntario. ㅡla castaña palmea suavemente el brazo de la menor quién recibe el aviso con una sonrisa. ㅡY sobre Jisoo y Jennie... Bueno... ㅡJoohyun intenta buscar las palabras indicadas para no corromper al angelito que es Dahyun, cuando sabe perfectamente lo que están haciendo las otras dos. ㅡJisoo está ayudando a Jennie con unas cosas.

❝𝐑𝐎𝐌𝐄𝐎 𝐘 𝐉𝐎𝐎𝐇𝐘𝐔𝐍❞ ─ seulrene [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora