Mi padre se fue hace una hora dejándonos solos a mi madre, mi hermano y yo. Cameron está sentado con las rodillas apretadas sobre su pecho a un lado del gran cajón con las cosas que nos brindó el Gobierno antes de la guerra.
Mi madre y yo seguimos debajo de la mesa porque creemos que así será más seguro y más fácil protegernos. Hemos insistido a Cam a que entre aquí pero él no soporta estar si quiera a unos centímetros de mi madre.
Aún no supera que nos haya dejado para luego volver.
Papá había ido a usar el teléfono de la vecina para ver si podía tener un poco de suerte para poder llamar a Luke, mi otro hermano. Estaba en la armada desde que cumplió los 18 años y desde ese entonces han pasado ya 3 años. Cuando se declaró la guerra, no pudo escapar del campo de la armada, de modo que ahora es solo un títere del Gobierno.
Sin embargo, la casa de la vecina está solo a unos pasos y una llamada no dura tanto ni en empezar. Sé que no debo pensar mal, que debo ser optimista, pero ¿cómo se puede ser eso en esta situación? He sido positiva durante tanto tiempo que ya no sé qué esperar. El vestido raído que traigo no está siendo de muy buena ayuda. Aquí dentro, no hace tanto frío como afuera donde nieva desde hace días. Las botas que tengo me hacen daño en el borde que roza a unos centímetros de mis rodillas, generando que la piel que la rodea se enrojezca.
-No vendrá. -susurra Cameron. Su pelo liso negro y opaco está un poco desordenado. Tiene puesta la camisa blanca pálida que mi madre le hizo para su cumpleaños número 18 y que solo usa porque las otras que tenía se las dio a Luke cuando llegó el día en el que debió marchar a la capital. Se supone que tendría que haberse ido a la armada con él, ya que son mellizos, pero Cam se negó a dejarme aquí con mi madre. Sigue diciendo que si se fue una vez, puede hacerlo otra vez.
Quizá dejarme aquí.
-Sigamos esperando un poco más, ha pasado mucho desde que hemos escuchado el ruido de los camiones entrar. -responde mi madre. Sus ojos pardos brillan en la oscuridad de la tarde. El cielo está gris y no sale el sol hace un tiempo. Las bolsas y ojeras decoran sus ojos hace tanto que sin ellas se vería irreconocible.
-Yo... -comienzo a decir pero un ruido me interrumpe.
Algo así como gente corriendo fuera por las calles de bloques de cemento, gritos de un niño y de una madre que lo llama retumban en las paredes de esta habitación. Me aferro a la mano de mi madre y siento que Cameron se acerca a mí con rapidez. Las puertas de las calles comienzan a ser golpeadas y abiertas fuertemente en contra de la voluntad de los habitantes allá afuera, y con eso, los reproches, llantos y gritos de sus dueños comienzan a sonar.
La mesa en la que estamos los tres está solo a unos pasos de la puerta de entrada.
Escucho pasos mucho más cerca y no cabe duda de que ya están en la casa de al lado, y un grito que me hace reconocer la voz de Jenna, mi vecina, me lo confirma. Los del Gobierno visten con un traje de militar con un parche amarillo que indica su nombre y justo alcanzo a ver que por frente la ventana de nuestra casa, pasa uno. Pero va hacia la dirección contraria a la puerta.
Suelto un suspiro de alivio y Cam toma mi mano fuertemente. Pero un ruido de la puerta de la entrada abrirse hace que mi corazón vuelva a tensarse. Las lágrimas caen por mis ojos rápidamente al igual que las de mi madre y hermano. Unas botas negras y pesadas pueden verse por el espacio que sobra entre el mantel y el piso de madera. Me llevo una mano a la boca soltando la mano de mi madre en el acto cuando siento el piso crujir indicándonos que la persona que entró se está agachando.
Un traje de militar aparece envolviendo las piernas de un hombre. Una mano con unos anillos se apoya en el suelo frente a nosotros y con la otra levanta el mantel que cubre la mesa.
Cam suelta mi mano y pasa un brazo enfrente de nosotras protegiéndonos en un acto totalmente instintivo. Un sollozo de mi madre brota en el silencio que reinaba y no fue hasta que un rostro, con unos ojos verdes que brillan de miedo y pelo castaño con algunos rizos que aparece frente a nosotros que este silencio cesó.
-Mi nombre es Harry Styles. Soy amigo de su hijo Luke, señora. No voy a hacerles daño, pero deben venir conmigo, de lo contrario... morirán.
NOTA DE LA AUTORA: Holaaaa! aquí estoy de nuevo con una nueva propuesta que quedará en manos de ustedes. Si les ha gustado, por favor, coménteme que les ha parecido y voten por ella. Solo de esa manera, podré seguir :(
Hace mucho tiempo que he querido hacer algo que tenga que ver con una guerra. Me encanta todo ese tema y quise probar cómo sería en una fic con el maravilloso Styles. Así que aquí va In War. Les prometo mucho con esta propuesta y sé que no los decepcionaré porque es basicamente todo lo que imagino siempre.
Subiré el primer capítulo en unos días más, y de ahí cuenta lo de ustedes, ¿está bien?
Nos vemos ahí!!!!! Gracias de antemano,
Monse.
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In war (h.s)
FanfictionEmma cree que su vida acabará en cuanto abren la puerta de su casa en plena intervención del gobierno a su pueblo, pero lo que no sabe, es que lo único que hará, será empezar.