Thousand Years War: Cursed Flower

Strange Feeling

Toji llevó a Renka con él a la casa donde solía vivir junto con la madre de Megumi. Le prometió al maldito hablar sobre los lirios araña rojos, pero debido al reciente evento, Toji ignoró todo y simplemente entró a su casa sin siquiera prestar atención si Renka lo estaba siguiendo o no. Renka se dio cuenta de que Toji se sentía deprimido, tal vez extraña a Megumi o podría ser su esposa.

Cualquiera sea el caso, el maldito planeaba dejar solo a Toji por un tiempo, porque no sabe cómo consolar a una persona triste. Entonces, entrar a la casa no es una opción, por lo que Renka decidió quedarse afuera de la puerta. Se sentó y miró el cielo azul, preguntándose si las flores se sentían bien. Mientras Renka estaba perdido en sus pensamientos, no escuchó ni notó que alguien se acercaba a él, no hasta que el individuo le habló.

"¿Qué haces aquí sentado? ¿Vives en esta casa?" La voz del hombre llamó la atención de Renka.

El maldito miró a quien le hablaba, dándose cuenta de que había cometido un error. Se suponía que debía mantener los ojos cerrados, pero terminó olvidándose y ese hombre probablemente vio el color rojo en sus ojos. Preso del pánico, Renka corrió hacia el interior de la residencia, con la esperanza de encontrar a Toji para hablar sobre el error que cometió. Como no estaba prestando mucha atención, no se dio cuenta de que Toji estaba parado frente al fusuma, por lo que terminó chocando contra él.

Renka se golpeó la nariz con bastante fuerza con el pecho musculoso expuesto de Toji, esta vez realmente sintió dolor, y la razón podría estar relacionada con por qué los lirios araña rojos de repente se quedaron en silencio. Dolorosamente, el maldito se tocó la nariz y luego levantó la vista para encontrarse con la mirada de Toji.

"Siento como si hubiera chocado contra una roca, ¿cómo puedes tener el pecho tan duro?" Renka no pudo evitar quejarse, especialmente porque nunca sintió ningún tipo de dolor en toda su vida.

"Deberías prestar más atención a dónde vas, después de todo, ahora eres un adulto". Toji tocó la cabeza de Renka.

"Cometí un error, había un hombre parado en la puerta principal, accidentalmente hice contacto visual con él. Estoy bastante seguro de que vio el color de mis ojos". Renka normalmente no muestra muchas de sus emociones, pero esta vez estaba expresando más sentimientos.

"¿Un hombre? ¿Cómo era ese hombre?" Toji tenía una vaga idea de quién podría ser esa persona, pero aun así quería estar cien por ciento seguro.

"El color de su cabello era amarillo". Esto fue lo único que Renka vio con claridad, ya que no le prestó mucha atención al hombre.

Al escuchar las palabras de Renka, las sospechas de Toji se confirmaron; Zenin Naoya, que vivía en la aldea oriental pero se mudó. El hombre detestable que siempre venía a visitar a Megumi, pero eso era sólo un pretexto para ver a Toji.

"Entra a la casa, yo me encargo de todo lo demás". El rostro de Toji se oscureció cuando dijo esas palabras, haciendo que Renka se sintiera preocupado.

El maldito nunca había visto a Toji poner esa cara antes, era como si fuera un hombre completamente diferente. Todo el tiempo, solo vio el rostro amable y el comportamiento de Toji, lo que hizo que Renka creyera que solo se comporta de esa manera con él y Megumi. Que el verdadero él probablemente sea una persona muy diferente de ese hombre amable que parece ser, o al menos eso pensaba. Pero aunque Renka se sentía así, decidió no obedecer a Toji y lo siguió sin que lo atraparan.

Se acercó a la puerta, tratando de escuchar la conversación al otro lado. Renka tenía curiosidad sobre de qué iba a hablar Toji con este hombre y, afortunadamente, pudo escuchar la conversación.

"¿No era tu plan vender al maldito al clan Zenin?" Naoya no pudo evitar preguntar, ya que Toji le contó una historia diferente a la que él hizo.

"¿De verdad viniste aquí para hablar del pasado? Si lo hiciste, regresa al lugar de donde viniste". Toji no estaba interesado en hablar de ese tema, especialmente ahora que Renka se encuentra actualmente en su casa.