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27:꒰Descubierto꒱

Seo ChangBin

Una historia corriente dice que las personas temen expresar sus sentimientos, pero yo creo que no es así, expresarte es fácil, lo puedes hacer escribiendo, pintando, bailando, lo que realmente es difícil es expresarte ante una persona que logra provocar un huracán con tus sentimientos, mostrarte débil ante el y desnudarte ante la persona que amas. Eso es lo difícil, saber que alguien conocerá tu debilidad, que desde hoy no serás el mismo y cuando te mirará, tal vez no lo hará con la misma mirada de antes.

—Que hermoso es mi papi—escuché la voz de mi hijo detrás de mi y sonreí justo antes de girarme.

—Gracias, Innie—le acaricié la mejilla con amor, viéndolo sonriéndome con todos los dientes.

Sus ojos mostraban un brillo especial, y en ese momento me sentí el chico mas hermoso del mundo, ver que tu hijo te mira con admiración es un sentimiento único y definitivamente su mirada quedará grabada en mi mente para siempre.

Ojalá este día hubiera sido para pasarla con él y no a lado de quién sabe quién.

Intente mantener la sonrisa, fingí nuevamente. Giré la cabeza hacia la parte derecha donde había un espejo enorme y me miré por una vez más. El Outfit que tenía puesto se me veía hermoso, la señora Chaewon creo que escogió lo mejor de todo.

—ChangBin, ¿podemos hablar?—habló Jihyo apareciendo de repente y usando un tono serio. La miré sospechoso mientras asentí con la cabeza ligeramente.

—JeongIn, ve por favor al baño a cepillarte los dientes—le dije a mi hijo—. Dime—añadí una vez que vi la puerta del baño cerrándose.

La habitación central del departamento donde se encontraba Jihyo y JeongIn me
daba una buena vista acerca de cada rincón, así que fue muy fácil saber cuál era el momento adecuado para empezar a hablar.

—¿Hablaste con HyunJin?—preguntó directamente.

—No, hablaré con él después de la fiesta del Jardín de JeongIn—suspiré—¡Ah! Ahora que lo recuerdo, por favor pon ese vestido en esa caja que lleve conmigo hoy—señale el vestido que había sobre una silla, el primer vestido de niña que hice. El que le prometí a la compañera de mi hijo.

—Tú pasado no importa más que tu futuro—habló Jihyo más seria que nunca—. MinHo es pasado, no conviertes a este nuevo hombre también en una parte de tu pasado.

—Te dije que hablaré con HyunJin en cuanto acabe con la fiesta de mañana—repliqué molesto ante su regaño.

—Tuviste tres días para hacerlo, ChangBin—levantó la voz—. Sabe su madre y él no. ¿Pensaste que tal vez está preocupado por no saber nada de ti?—intenté interrumpirla pero me calló de golpe—. Ahora habló yo—alzó la voz más fuerte que antes—. Espero que te das cuenta que hoy acompañarás a un hombre mientras llevas por dentro el hijo de otro.

—Solo lo acompañaré, Jihyo—repliqué pero en el fondo ya empezaba sentirme culpable.

—La felicidad no espera por nadie, llega y si estás allá te vas con ella por el mismo tren, si no, esperas hasta que la felicidad regrese... si regresa algún día—añadió molesta pasando por mi lado y empezando a ignorarme.

—Fuiste tú quien me dijo que HyunJin no me convenía y no se cuantas cosas más y ahora... —negué con la cabeza, pero ella volvió a interrumpirme.

—Ahora entiendo que eres tú quien no le conviene a Hwang. Estas echando a perder una oportunidad de cambiar tu vida, de amar y ser feliz solo por un desgraciado que hace tiempo te está haciendo llorar.