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-"Hum.... Dónde se habrán metido..." ibas caminando por la casa buscando por todos lados

-"Qué buscas?" Fushiguro se acercó a ti a preguntarte

-"No he visto a los gemelos desde hace una hora, me están preocupando, los has visto?" le preguntaste

-"Uhm... Itadori dijo que quería asegurarse de que las flores de adelante no tuvieran sed y arrastró a Sukuna con él para ayudarle a regar... Que raro que aún no hayan regresado..." Fushiguro se quedó pensando

-"Okay- voy a llamar a Gojo-" dijiste rápido para marcar su número

-"Crees que están perdidos?"

-"Eso temo... Maldita sea Satoru responde el teléfono! Ugh!" te quejaste y le diste tu celular a Fushiguro "Si llama responde y dile la situación, si? Voy a salir a buscarlos, intenta si puedes hablar con alguien para que venga a cuidarlos, okay?"

-"Okay" asintió buscando en tus contactos a ver a quien podía llamar

Tomaste una chaqueta y saliste de aquel lugar.

Entre unos arbustos dejaste unos objetos clavados, estos haciendo una barrera para la casa.

-"Ah... Así al menos me aseguró de que no entraran maldiciones mientras estén solos... Ahg odio dejarlos..."

Respiraste profundo e intentaste calmarte.

-"Sagasu" llamaste y un zorro rojo apareció a tu lado, un Shikigami "Itadori, Sukuna" agregaste y en ese instante el zorro comenzó a correr en dirección donde detectó su aroma

No tardaste en empezar a seguirlo.

-"Hum... Tus ojos Sagasu!" exigiste

El shikigami desapareció en ese momento, y tu vista cambió.

Notando distinto el mundo, veías incluso fragancias.

-"Ahí están las de Sukuna e Itadori... Pero hay una tercera... De una maldición" suspiraste y apresuraste tu paso

-"Oh! (T/n)-san!"

Te detuviste al oír la voz de Itadori.

-"Pequeño!" lo cargaste rápidamente y lo abrazaste "Dónde está Sukuna??? Qué pasó???"

-"Estábamos regando las flores! Y derrepente Sukuna ya no estaba a mi lado! Vi que una maldición se lo había llevado y lo empecé a perseguir! Pero perdí su rastro en aquella casa!" apuntó a un lugar abandonado

-"Okay! Vamos allí, no te voy a dejar sólo" lo mantuviste apegado a ti para entrar a aquel lugar "Se va a enterar ese maldito" apretaste el puño "Si alguien toca a mis niños, esta muerto"

Empezaste a buscar hasta que en subiste al segundo piso viendo a Sukuna en el suelo abrazando sus rodillas, pequeñas lágrimas en sus ojos.

-"Sukuna!" ibas a acercarte pero una ola de calor te lo impidió

-"Tu eres la niñera, no es así?"

Escuchaste una voz y alzaste una ceja al ver la maldición.

-"No podías ser más feo, verdad? Un ciclope con cabeza de volcán!"

-"Para que sepas tengo nombre! Y es Jogou!" se quejó

-"(T/n)-San... Soy malo?..." Sukuna preguntó alzando su mirada y mirandote con un rostro preocupado

-"Ah... Yuuji cariño, quédate aquí" bajaste a Itadori de tus brazos y te remangaste las mangas

-"Oh oh" Itadori dijo mirandote

-"No sé que le has dicho... Ni me interesa saber pero..." te fuiste acercando sin importar el calor "Si lo haces llorar" uniste ambas manos tuyas "Te vuelves mi enemigo"

De un movimiento con fuerza lo golpeaste con ambas manos literalmente mandandolo a volar, rompiendo una parte de la pared de la casa abandonada.

-"Ah! Quema! Eso te va a mantener lejos un rato!" te quejaste moviendo tus manos de lado a lado

-"Ya, ya, ya no llores, todo esta bien" Itadori mencionaba acariciando el cabello de Sukuna

-"Él me llamó... La maldición más temida y despiadada... Como esos hombres..."

Ibas a decir algo pero Itadori lo interrumpió.

-"Eso fuiste en otra vida, verdad? Y qué más da?" le sonrió "Ahora eres mi hermano! Y por muy gruñón que seas a veces! Eres el mejor amigo que tengo!" lo abrazo sonriendo

Una sonrisa se te escapó al ver esa escena, repleta de ternura.

-"Vamos a casa antes de que ese tipo Jogou regresé" cargaste a ambos y sonreiste cuando se apegaron a ti

-"Podemos regresar sobre Kyojin?" Itadori sugirió

-"Jeje saben que invocar a Kyojin me gasta mucha energía, pero... Kogeki nos puede ayudar"

-"Siii! Kogeki me gusta!" Itadori dijo sonriendo

-"Bien" te concentraste un momento "Kogeki" lo mencionaste

Y en unos momentos tenían delante un shikigami, un tigre de bengala blanco.

-"Nos llevas Kogeki?" Sonreiste mimandolo y este solo gruño leve

No tardaron en subirse a su lomo, se aferraron con fuerza y comenzaron el pequeño viaje.

En unos momentos estaban de regreso en casa.

-"Oooh han regresado!" Gojo mencionó al verlos entrar junto con el tigre

-"Kogeki!" Fushiguro mencionó acercándose al tigre para acariciarlo gustoso

Algunos otros niños se le unieron y Kogeki sólo se quedó en su lugar.

-"Tu! Por qué demonios siempre que te llamó no respondes?!" te estabas sacando el zapato para tirarselo a la cara

-"Estaba ocupado en una misión! Qué querías que haga?"

Viste como tu zapato solo chocó contra una pared invisible antes de golperlo y cayó.

-"Una maldición se había llevado a Sukuna..." mencionaste

-"Oh? Lo están buscando?"

-"Es muy probable..." lo viste aferrado a ti junto con su hermano

-"Ah... Tendré que comunicar esto a Masamichi... Crees poder seguir sola?"

-"Por ahora? Si" le sonreiste "Después de todo, soy la más fuerte"

-"Esa es mi frase!!" se quejó

-"Pudrete" reiste

Sabías que era posible que eso ocurriera en cualquier momento, pero no esperaste que pase ahora.

Sukuna al ser ahora un niño vulnerable, era mayor blanco de maldiciones, queriendo ponerlo de su lado.

Pero no ibas a dejar que eso pase.

Lo ibas a proteger, como a todos los demás de cualquier daño posible. 

Jujutsu Guardería! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora