La fuga del Sol y la Luna

Escondámonos en la torre aterradora

—Mírense, tan frágiles como brotes —comenzó a cantar Gothel—, dos retoños nuevos de una flor. ¿Saben por qué estamos en la torre? —Rapunzel intentó hablar, pero Gothel siguió cantando— ¡Así es! es por su bien queridos —La mujer acarició con cariño la larga cabellera.

—Este día tan triste ya esperaba —cerró la cortina, oscureciendo más la habitación—, dejarán el nido ¡Así será!

—Pero- shh —Gothel posó un dedo en los labios de Varian, quien quiso decir algo— aún no. Créeme, amor: sabia es mamá. 

Madre golpeó la viga con su cadera, lo que provocó que el interior de la torre quedara completamente a oscuras, ambos hermanos se abrazaron con miedo. Rapunzel prendió una vela, Varian aferrándose a ella para no separarse.

—Sabia es mamá, óiganme atentos, el mundo exterior es cruel —Gothel se apareció de entre las sombras mientras hacía una cara aterradora, asustando a ambos niños, luego desapareció. Algo tiró del cabello de Rapunzel, quien botó la vela, asustando a Varian por quedarse en penumbra—. Sabia es mamá, de alguna manera algo saldrá mal ¡Lo sé!

Rapunzel tropezó, Varian ya no estaba a la vista, la rubia fue atormentada por sombras.

—¡Sucios rufianes! ¡Hiedra venenosa!

—Comer niños o... —Varian trató de buscar a Rapunzel, pero fue asustado por el rostro de Gothel iluminado en un verde siniestro— el mal.

—¡No!

—¡Sí!

—Hombres también —Gothel empujó a Rapunzel para verse cara a cara con una pintura aterradora— de largos colmillos ¡No, no más, que me atormentas!

Ahora Rapunzel y Varian se encontraban acurrucados entre los largos cabellos rubio, nerviosos por el siguiente movimiento de madre.

—Madre está aquí, madre los protege —Llegó Gothel, y los levantó del piso—, ¡Mi consejo escuchen ya!

Ambos niños se apresuraron a abrazarla, sólo para toparse con un maniquí.

—No hagan drama, mami los ama... ¡Sabia es mamá!

Gothel volvió a acercarse a ellos, pasó sus brazos alrededor de los hombros de cada hermano.

—Ahí está el feroz rinoceronte —Comenzó vagamente—, allá hay asaltos y agresión. Sólo soy su madre ¿Qué sabría? Tan sólo los he cuidado siempre...

Gothel se alejó de los chicos, haciendo gestos dramáticos.

—¡Váyanse, que yo me lo merezco! Y que muera sola ¡Suerte cruel!

—Tarde será, y lo verán —Rapunzel y Varian comenzaron a sentir culpa, se miraron heridos y angustiados— ¡Sabia es mamá!

Rapunzel trató de encender algunas velas ante la oscuridad del interminable sermón, Varian ayudándole, pero Gothel apagaba su progreso.

—Sabia es mamá, mami es su soporte, solos no subsistirán —Les mostró un espejo y apuntó a sus pies—. Simples, sin calzar, inmaduros, torpes —Ella los empujó y los envolvió en el cabello de Rapunzel— ¡Vivos los comerán!

—Crédulos, infantiles, y sin duda lentos —De un tirón, ambos niños dieron vueltas y vueltas, todo era tan confuso y aterrador—, parlanchines, ingenuos. Hum ¿Ven? Creo que también, algo regordetes —Gothel hizo un gesto a la delgada figura de Varian—. Se los digo ¡Pues los "queyo"!