CAPÍTULO 4

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Note como Aidan me miraba como si recordara algo o alguien por lo que deje de reír y me enrojecí un poco ya que me ponía nerviosa el que alguien me mirara por mucho tiempo.

Por suerte, en ese momento tocaron la campanilla y ambos nos dirigimos al salón sin decir nada. La clase paso y se me hizo un poco aburrida hasta que por fin llegó la hora de la salida, estaba buscando a Nathan pero no lo encontré por ningún lado así que decidí irme sola hacia la casa.

Iba caminando por  la banqueta cuando mi teléfono comenzó a sonar, revise quien me llamaba pero era un número desconocido así que colgué, seguí caminando pero mi teléfono no dejaba de sonar así que decidí contestar.

En la llamada
-bueno, quien habla- pregunte
- hola chica linda- me dijo la voz, pero esa voz se me hacía conocida, aunque no recordaba en donde la había escuchado.

-¿no te acuerdas de mí?- dijo aquella voz, en verdad por más que trataba de recordar de quien es esa voz no lo lograba.

- discúlpeme pero no se quien habla- dije y escuche como aquella voz soltó una leve risa.

- Es enserio T/n, tan rápido te olvidaste de mí, soy yo Liam… Liam Dagger, el chico que conociste en la fiesta.- ¡Oh por dios! Era Liam, en verdad no me acordaba de él.

-Diablos Liam eres tú, no te recordaba- dije con un poco de emoción, en verdad me emocionaba saber de él, aunque solo le hable una vez me callo súper bien – pero se puede  saber cómo es que conseguiste mi numero- .

-Ah bueno, tu número me lo pasó tu amiga Katherine, le dije que me lo pasara y me lo paso- ahora comprendía como es que Liam tenía mi número.

-¡Oh! Ya veo, y cuéntame ¿Cómo has estado?- pregunte

- Pues yo muy bien T/n, ¿y tú? ¿Qué tal es por halla en los ángeles?- pregunto curioso

- Pues es muy bonito, aunque no eh salido a explorar muy bien-.

-Ya veo, y que tal tu familia- pregunto, este chico sí que es muy preguntón.

- pues bien, creo… no eh hablado con mis padres y mi hermano ya casi no me habla, la verdad es que no sé porque- dije un poco decepcionada.

-Rayos, que mal T/n-

-Lo sé, pero bueno, ni modo. Te llamo luego Liam, ando en la calle y no quiero ser atropellada- dije sarcásticamente y el cedió.

Fin de la llamada.

Cuando finalice la llamada seguí caminando hacia mi casa, y como lo suponía mi hermano ya había llegado. Subí a mi habitación y me cambie de ropa, e hice mis deberes.

A la mañana siguiente me aliste para irme a la Universidad, ¡Rayos! Otra vez se me hacía tarde, iba corriendo por las calles con demasiada prisa hasta que por fin llegue, aunque no me salve de que me pusieran un reporte por retardo.

Me senté en mi butaca y justo al lado estaba Aidan, tan divino como siempre, diablos a este chico apenas lo conozco y ya me gusta, que loco.

Comenzamos a trabajar en los ejercicios y cada que miraba a Aidan no evitaba sonreír al verlo tan concentrado, pero en ese momento sentí la mirada de alguien, voltee a mirar para ver quién era esa persona que me miraba y me di cuenta que era una chica, esa chica era rubia, cabello largo y liso, piel blanca y ojos azules, y tenía una muy buena figura. Esta chica me miraba con coraje pero ¿Por qué?

La maestra salió a la dirección y aquella chica seguía mirándome con una mirada amenazadora, así que decidí acercarme hacia ella.

-Soy T/n ¿y tú eres?- pregunte amablemente, note como los demás alumnos solo miraban lo que hacía mientras guardaban silencio.

-Soy Ana- dijo con una mirada retadora mientras se levantaba de su asiento.

-mucho gusto Ana, pero se puede saber ¿porque me miras con esa cara tan amargada?- al decir eso vi como sus ojos se abrieron como platos de coraje, mientras los demás alumnos hicieron un leve “uhh”

-que graciosa niñita, pero no te quieras pasar de lista con migo eh, Aidan jamás se fijaría en alguien como tú, se nota que te trae cacheteando las banquetas. Pero Aidan es mío que te quede claro- dijo mientras me aventó hacia atrás haciéndome caer al suelo.

Me levante rápidamente e iba dispuesta a jalarle las greñas a esta chica pero en ese momento entro la profesora por lo que solo me fui a mi lugar llena de coraje y mirando desafinadamente a Ana mientras ella solo se burlaba junto a otra chica.

Cuando termino la clase para ir a receso salí rumbo a la cafetería para pedir un jugo y olvidar lo de hace rato pero sentí cono alguien tomo mi brazo evitando que avanzara, mire hacia atrás para ver y era Aidan.

-No le agás caso a Ana, ella desde pequeña está enamorada de mi pero yo de ella no, aparte ella necesita mucho cariño de sus padres ya que siempre la dejan sola- dijo mirándome fijamente a los ojos.

-Está bien Aidan, no te preocupes, pero ¿Cómo que Ana está enamorada de ti desde pequeña?- pregunte curiosa

-Ana y yo nos conocemos desde niños y siempre fuimos muy unidos pero yo la quiero solo como una hermana, ella siempre fu una chica muy dulce pero todo cambio desde que…- Guardo silencio y vi como sus ojos se cristalizaron –hasta que yo me enamore de alguien y desde ese entonces Ana se volvió diferente- dijo con la voz entre cortada.

- y que paso con la chica de la que te enamoraste- pregunte
-nos dejamos de hablar por una tontería, por un error- en ese momento se le escurrió una lágrima por su rostro, se veía que de verdad la amaba.  Yo solo limpie su lágrima y le di un fuerte abrazo.

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Hasta aquí otro capítulo neni 🙈. Espero les guste, y no olviden votar preciosas, las quiero mil ocho mil 🍋✨💗.

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⏰ Última actualización: May 05, 2021 ⏰

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