V I V I R ┃Bakugo y tú

III: "Pradera"

Cinco meses, pasaron volando mas rápido de lo que habías podido creer

Faltaban ahora unas dos semanas para el examen de ingreso a la UA. Y habían pasado tantas cosas alrededor de todo este tiempo. Especialmente porque creías que habías cambiado mucho a comparación de antes. La conversación de hace meses, donde gritaste, lloraste, te enojaste porque te negaban el permiso de irte termino siendo una oportunidad que te otorgo Hiroshi para dejarte ir por tus sueños

Una oportunidad...

Los primeros meses habían sido un calvario para ti. Aparte de los entrenamientos que su nivel de rudeza aumentaron drásticamente, su maestro les habia dado la radical orden de "no meterse en asuntos del pueblo"

O en simples palabras "No metan la nariz donde no les incumbe"

Quedarse sentados a esperar que algún héroe se apareciera en medio de un caos, siendo ustedes futuros héroes... simplemente aquello era impotente. Era lo que Hiroshi les dijo cuando semanas después de la conversación se encontraron con un villano arrasando con algunos puestos del mercado. Ustedes bonitos y sentaditos se quedaron un poco lejos del lugar mientras el mayor derribaba al villano de unos simples golpes. Claro, claro, toda la diversión se la estaba quedando el anciano. Pensaste diferente cuando poco después por la televisión, salió la noticia del accidente de un estudiante de campo en medio de una pelea uno contra uno con un villano en una ciudad no muy lejana a la suya

Hiroshi aprovechó aquello y les comentó que esa situación se pudo haber prevenido si el chico hubiera estado mejor preparado, que quizás le hubiera dado mejor pelea o en caso contrario solamente debió saber que no debía meterse. Algo en eso te molesto, pero en el fondo sabias que era cierto. Fuera de la ciudad, los entrenamientos para héroes no eran tan efusivos como quizás lo eran en la capital

Agradeciste enormemente haberte establecido entrenar desde temprana edad. Fue suerte, mucha suerte el haber llegado ahí, aunque no sabias como habías llegado a vivir en ese lugar, lo agradecías enormemente. Dejando aquellas cosas al lado, en estos momentos tenias que empezar a preocuparte de otra cosa

Como lo era el enfrentar a Hiroshi frente a frente junto a Endo

¿El reto? Solo tenían la misión de atrapar al anciano, de cualquier manera . Menudo lió en el que estaban metidos ustedes. Estaba por pasar una hora y los únicos que estaban cansados eran ustedes. Con sus respiraciones agitadas y con el sudor recorriendo sus frentes, tratando de enfrentarse al ex-héroe que estaba frente a ellos, buscando pelea

—Pensé que estaban listos para regresar —alardeó Hiroshi, secando su frente con un pañuelo que saco de sus mangas—. ¿Ya se rindieron?

Sobaste tu brazo izquierdo con malestar, tratando de ver alguna oportunidad para atacar. Unos minutos de reposo y Endo fue esta vez el primero en encaminarse a pelear, lanzando un muro de tierra que lanzó en dirección al anciano. Aunque este logró esquivarlo y derribarlo a tiempo, casi no prevenía cuando te aproximaste rápidamente a él

Trataste de lanzarle una esfera de energía pero lo único que lograste fue que rodeara tu cuerpo con su brazo y te lanzara hacia atrás con fuerza, alejándolo de tu ataque

Endo te atrapo a tiempo, realmente a tiempo, ya que saltaron del suelo cuando el mayor había corrido sin darles tiempo a ustedes para volver a golpearlos. Logrando solamente romper el suelo que impactó con anterioridad, a la vez que caían detrás de él con más ganas de atacar

Una cosa era ser entrenados por el anciano y otra muy diferente era enfrentarlo cara a cara. Sabiendo él de colmo las debilidades que poseían ambos

Retuviste el aire cuando decidiste lanzarte nuevamente, decidiendo ir esta vez por un golpe que dirigías a su rostro mientras preparabas otro ataque, para tu mala suerte él llego a esquivar nuevamente aquello cuando tomó con fuerza tu extremidad y te giró por el aire hasta lanzarte hacia el gran árbol que yacía detrás de Endo