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Off no podía dormir. Necesitaba algo, bueno, alguien a su lado. Una persona específica con el nombre de Gun Atthaphan.

Las ganas de estar con el chico se volvieron demasiado fuertes y, antes de darse cuenta, estaba bajando de puntillas las escaleras de su casa para no despertar a su madre dormida. Dejó una nota en el mostrador de la casa para que ella no se preocupara cuando llegara el día. 

Estaba loco, ¿verdad? Tenía que estarlo, era la mitad de la noche y aquí estaba conduciendo hasta la casa de Gun ni siquiera para tener sexo sino sólo para estar con él. No podía entender lo que significaba este sentimiento, pero si Gun no estaba en sus brazos en la siguiente hora, se volvería loco. Era como si Gun fuera una droga de la que no podía saciarse.

Fue al pasar por la pequeña tienda junto al apartamento de Gun cuando vio a los dos. 

La oscuridad de la noche ocultaba sus rasgos, por lo que sólo se veían sus figuras, y Off estuvo a punto de ignorar a las dos personas en medio de la noche, pero, por una razón desconocida, redujo la velocidad. Tal vez fuera la curiosidad, tal vez el destino, pero mientras el coche desaceleraba, Off no pudo evitar ver a Gun siendo presionado contra la pared... por Nawat. 

El coche se detuvo. 

Off no estaba seguro de lo que estaba sucediendo, pero estaba viendo rojo.

¿Cómo se atreve Nawat a tocar a su esposa? Una vez que el coche estuvo en un parque, Off ni siquiera se molestó en recuperar las llaves antes de salir del coche, trotando hasta ese lado.

— ¿Qué demonios estás haciendo?—Sus manos se cerraron en puños y el hombre de arriba tuvo 1 segundo para explicarse antes de empezar a lanzar puñetazos. 

Off escuchó a Gun suspirar y decir su nombre en voz baja. 

—Dios mío, ¿tú otra vez?— El bastardo tuvo la audacia de decir. 

—Te he preguntado que qué demonios estás haciendo.— volvió a decir Off, esta vez un poco más alto.

—No es así como se supone que debes hablarle a tu superior.— Nawat finalmente retiró sus manos de Gun y se volvió para mirar a Off.—Si necesitas saberlo, estoy planeando salir con Gun.

—¡Por encima de mi maldito cadáver!

Nawat se rió. — No debería ser un gran problema ya que dijo que ustedes dos no eran nada

Los ojos de Off se abrieron de par en par. ¿Gun realmente dijo eso? Las palabras le dolían más de lo que debían, concedido que no eran pareja, pero ¿llamarles nada?  Nawat se equivocaba, y Off iba a demostrarlo. No sólo al estúpido de enfrente de él, sino también al sorprendido chico que estaba detrás de él. 

Sin previo aviso, el puño de Off se estrelló contra la cara de Nawat. Se estremeció ante el dolor que le recorrió la mano, pero valió la pena ver a Nawat tambalearse. Sin embargo, Off no había terminado. Apuntó al estómago del hombre, le dio dos, tres, cuatro puñetazos y sonrió cuando cayó al suelo con un gemido. 

—No vuelvas a acercarte a Gun.— Off le dio una patada. 

—¡Off para!— Gun finalmente dijo.— Ya puedes parar. 

—Oh, ni siquiera me hagas empezar contigo.— El primero agarró a Gun por las muñecas y lo arrastró hasta su coche. — ¿Estás bien?— Preguntó cuando estuvieron dentro y se alejaron con seguridad. 

—Estoy bien.— La respuesta de Gun fue retraída. No estaba bien, estaba sorprendido a más no poder. Nawat no iba a hacerle daño, ¿verdad? Al final se habría detenido. Se abrazó a sí mismo con fuerza.— Gracias por rescatarme. 

TEMPTATION +18 [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora