✨ Demo Inversor ✨ • 🌙 Nathaniel x Marc 🌙

• Session 1 •

Inverso y Demo Ilustrador hacían un dúo impresionante, ni los propios Lady Bug y Chat Noir podían frenarlos, trabajan tan bien como villanos como Lady Bug y Chat Noir lo hacían de héroes; los tenían acorralados sin escape alguno puesto que Demo Ilustrador había dibujado una enorme jaula mientras que Inversor estaba atento a cualquier movimiento de la pareja de superhéroes, sin duda Hawk Moth tendría por fin sus miraculous y por fin podría realizar el deseo que su corazón tanto anhelaba.

Faltaba tan poco hasta que...

—¡Hey Marc!— Marc se sobresaltó al escuchar la voz de Nathaniel, había llegado más temprano que de costumbre, puesto que quería escribir un capítulo más del dueto que tanto le gustaba, por desgracia Nathaniel también tuvo la misma idea al parecer, el susto fue tan grande que dejó caer el bolígrafo con que el que estaba escribiendo. —ouh...lo siento, no quería asustarte— Nathaniel se apresuró para llegar a su lado y levantar el bolígrafo, Marc estaba en completo silencio, solo observando como el pelirrojo se acomodaba a su lado. —¿qué escribes?— preguntó emocionado devolviéndole el bolígrafo y tratando de leer algo de lo que su mejor amigo había escrito; sin embargo Marc hizo todo lo posible porque no leyera nada.

—N-no es nada, es solo...— bajó la mirada aún tratando de ocultar su libreta, el pelirrojo hizo un gesto gracioso y con agilidad le arrebató la libreta. Y allí comenzó el forcejeo entre Nathaniel y Marc. —no es gracioso Nathaniel, devuélveme mi libreta— la voz de Marc se escuchaba muy alterada.

—¡Ay, por favor, déjame leerlo!— dijo Nathaniel justo cuando abrió la libreta.

—¡No!— Marc se abalanzó sobre Nathan, quien trato de no caer cogiendo de la muñeca al pelinegro, pero en su lugar ambos cayeron al piso. —augh...— se quejó puesto que había golpeado su cabeza en la caída, algo aturdido abrió sus ojos y al hacerlo su rostro se pintó de colores, Nathaniel estaba encima suyo, muy cerca de su rostro, tanto que podía sentir su cálida respiración.

—Agh...¡Marc! ¡¿te encuentras bien?!— dijo preocupado pero sin alejarse ni un poco de Marc, éste tenía su rostro ruborizado por la posición tan vergonzosa y de la nada su timidez apareció. —¿Marc?

—E-estoy b-bien, solo fue un golpe— no quería ver a Nathan a los ojos, tenía miedo de hacer una estupidez, porque la oportunidad estaba a la vista.

—Mmh...aún así, déjame ayudarte— se levantó y tomó la mano de Marc quien aún no hacía contacto visual con el pelirrojo. —¿te sientes bien? ¿o sientes mareos?— Marc solo negó con la cabeza, su rostro ardía y su pulso estaba acelerado.

—No, tranquilo, estoy bien— retomó su postura luego de unos segundos de silencio, por fin pudo verle, Nathaniel se veía preocupado y avergonzado por haber tomado su libreta sin autorización, Marc soltó un pequeño suspiro. —de acuerdo, puedes leerlo, pero agh, no te burles de mí— esa no era la libreta dónde tenía todas aquellas historias dónde plasmaba todo lo que su cerebro imaginaba y sentía realmente por Nathaniel o como le solía llamar, Demo Ilustrador.

—Nunca me burlaría de tí— sonrió y de la nada un ligero pero bastante notorio rubor se presentó en sus pálidas mejillas, eso bastó para que Marc desviara su rostro a un costado.

Ambos se sentaron en su lugar y el silencio reino, Marc veía al frente mientras que Nathaniel estaba muy atento leyendo los escritos de su amigo, su tiempo de lectura fue interrumpida por el inicio de las clases dando así comienzo al día escolar.

Marc se sentía más tímido de lo normal, Nathaniel ocasionaba que sus nervios crecieran a gran medida, justo como le pasaba a Marinette cuando estaba cerca de Adrien, con la diferencia de que él no sé comportaba de esa manera tan rara con lo hacía ella.

Trataba de no ser tan obvio, pero cada vez se volvía más difícil, no solo porque Nathaniel no paraba de elogiar su gran creación, como él solía decirle a lo que había escrito, lo que no sabía era que aquella pequeña narrativa llevaba más que solo “imaginación” el amor hacia Nathaniel crecía cada vez más al punto de sentirse enfermo, anhelaba por algo más, anhelaba estar a su lado más que solo una linda amistad, por desgracia aquello era descabellado y surrealista, jamás iba a pasar y eso lo sabía a la perfección.

Mientras caminaban por la acera, Marc miraba de reojo la mano de Nathaniel quien no dejaba de hablar, no lo escuchaba, solo estaba concentrado en algo y eso era tomarle de la mano, entrelazar sus dedos con los del chico que tanto le gusta, aquellos pensamientos tan cursis le aceleraron el corazón.

—¿Marc?

—¡Ah! ¡sí!— su mirada se posó sobre Nathan quien desde hace mucho lo notaba raro, distante.

—¿Algo te está molesta?— Marc aún con gesto asombro negó repetidas veces con la cabeza, su rostro estaba sonrojado. —yo...bueno, siento que te estoy incómodando y que ya no te sientes a gusto conmigo, ¿es eso? porque si es así yo entenderé— Marc actuó rápido y abrazó con fuerza a Nathaniel, éste recibió el abrazo ocultando su rostro en la sudadera del pelinegro.

—No digas estupideces— Marc sentía el corazón latir a mil, estar así de cerca lo alteraba, Nathaniel no tenía idea, pero un abrazo suyo lograba animarle aún si la situación que fuese mal. —no eres tú, agh...no te alejes ¿sí?— Nathaniel sonrió aún sin alejarse de Marc quien soltaba ligeros suspiros, estaba tan enamorado que tenía miedo de ser dañado por ello.

—Aúnque hubieras afirmado la interrogante, jamás te hubiera dejado ir— escuchar aquello le hizo flaquear, su rostro se volvía cada vez más cálido y se sujetaba con mucha fuerza de su amado Nathaniel. —eres mi mejor amigo y te necesito para estar bien— esas palabras le hicieron aterrizar “Eres mi mejor amigo” que doloroso es que la realidad te golpeé. —no quiero perder a mi mejor amigo

—Yo...tampoco quiero perderte— susurró muy bajito, aguantando esas inmensas ganas de llorar y el gran nudo que se había formado en su garganta.