Pity Party

Party Favor

Decir que le fue como esperaba en sus horas de clase, seria mentira, pero finalmente sentía que podía respirar alejado de todas sus fans. 

Se estaba cambiando emocionadamente mientras pensaba que adentro del gimnasio sus compañeros de equipo le tendrían algo para regalarle por su cumpleaños, o por lo menos que lo feliciten. 

También estaba feliz de poder hablar con su mejor amigo sin que su novio este hostigándolo o viéndolo mal. 

-Hey, como así tan feliz Oikawa- lo saludo Mattsun, uno de sus compañeros de equipo y amigo. 

-Es mi cumpleaños Mattsun, ¿No me digas que lo olvidaste?

-Claro que no, estupidokawa, te traje un regalo, feliz cumpleaños- abrió su maleta y de ella saco un caja de chocolates, los favoritos de Oikawa. 

Oikawa no dijo nada y fue a abrazarlo, realmente se sentía triste porque ese chico que había conocido el año pasado lo dio un regalo y le deseo feliz cumpleaños antes que su mejor amigo, a quien conocía desde que tenia memoria. 

Mattsun lo iba a separar pero sintió húmedo su hombro, solo le devolvió el abrazo y sobo su espalda, se sentía algo incomodo pero no dejaría que alguien llore en su día especial. 

Tooru se separo de el y seco sus lagrimas. 

-Perdón si te incomode, las lagrimas simplemente comenzaron a salir y no pude evitarlo. 

-No te preocupes. 

-Oh cierto, te invito a mi casa esta tarde, dile a Makki también por favor. 

-Si señor, se lo hare saber a penas lo vea. 

Sin más que decir ambos salieron de los vestidores, nadie los vio, nadie les hablo, nadie le deseo feliz cumpleaños a Oikawa, ni siquiera  Iwaizumi, quien estaba saliendo del gimnasio apuradamente 

-¡Iwa-chan! ¿A donde vas?

-Tooru lo lamento pero tengo que irme, me voy a saltar el entrenamiento porque Riku me llamo y quiere que vaya a su casa, nos vemos mañana.

-No te puedes ir, yo aun no he......- fue interrumpido. 

-Mira, Oikawa, no tengo tiempo para nada de esto ¿entiendes que existen otras personas?

-¿No recuerdas que día es hoy?

-¿Debería?- pregunto con molestia ya que el castaño no lo dejaba avanzar.

-No, no te preocupes- las lagrimas se estaban acumulando en sus ojos.

Iwaizumi no respondió nada y salió rápido del lugar, Tooru no se permitiría llorar, se restregó los ojos con su camiseta y respiro profundamente. 

-Oye, ¿Estas bien?- Mattsun preguntó detrás de el. 

-Sip, no te preocupes, sigamos con el entrenamiento.