Los ojos de él parecían agrandarse en su hermoso rostro, ahora preocupado por algo que había visto en mi piel. Algo de lo que jamás me había sentido orgullosa de haber hecho, pero eso formaba parte del pasado.
Miles quiso hacerme miles de preguntas con solo esa mirada, ahora asustada. No hacía falta ser un genio para saber que significaba, pero tampoco iba a darle explicaciones a alguien a quien a penas conocía. Y eso él debía comprenderlo. Por eso me asusté, tapé aquella cicatriz y di 2 pasos atrás, pero la mano cálida de Miles me había sujetado mi muñeca con dulzura para que no me fuera de su lado.
El arrebol estaba ya aquí, con aquellas nubes rosadas y violetas significado de que el sol se estaba escondiendo para aparecer la noche. La luna se podía ver a un lado del lugar, tímidamente mientras que nosotros 2 no dejábamos de mirarnos.
—Leire... ¿Esa cicatriz es lo que yo creo? —preguntó temeroso, con las pupilas dilatadas por el momento.
Negué con la cabeza, intentando alejarme de él. Pero Miles volvió a tomarme de la muñeca, esta vez sin soltarme por temor a perderme.
—No es nada —dije, mirando hacia otro lado.
Y la voz de él me hizo enfadar, porque no quería recordar aquello. Y no debí enfadarme con él, porque no se lo merecía.
—Pero...
—Miles, no es nada, ¿vale? —alcé la voz mientras él no dejaba de mirarme y, sin poder decir nada más, aceptando a regañadientes lo que decía, asintió.
Nos quedamos en medio de aquel lugar, mientras todos los que estaban en las gradas salían a la calle, pasando cerca de nosotros e ignorándonos.
Parecía que estábamos metidos en una burbuja, sin saber que nadie más podía hacernos nada dentro de aquí.
—Vale... Déjame llevarte a tu casa —trató de decir, pero yo solo podía ver el daño que podría hacerle a Miles si fuese su amiga.
Por esto, por esta razón no servía para tener amigos. Jamás tuve y me fue medianamente bien, seguramente era por esto por lo que no tenía amigos en mi vida. Y seguramente debía seguir siendo así.
—No —negué. —Voy sola.
Quería poder dejar todos estos miedos, todos mis temores y todas esas sombras que me seguirían por siempre. Pero cuando miraba al ángel que tenía frente a mí, me hacía olvidar todas esas cosas... Todo lo vivido... Todos mis problemas.
Pero ese miedo a que me hicieran daño, a que volvieran a traicionarme... Simplemente estaba ahí. ¿Qué más podía hacer? Cuando alguien te hacía algo, terminabas con temor a que te volviera a ocurrir. Muchos simplemente seguían adelante y no se acobardaban. Pero había que admitir que yo era una cobardica.
—Lo comprendo... —susurró, mientras me soltaba la mano con delicadeza, como si le costase separarse de mí. —Al menos, llámame cuando llegues y mañana nos vemos en la universidad, ¿verdad? —cuestionó con pregunta, temiendo que mi respuesta fuese otra.
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In The Afterglow [+18] ✔️ (COMPLETA)
RomanceLeire es una chica con un pasado trágico y Miles es el hombre más guapo y simpático que ella haya podido conocer. Ella hará todo lo posible porque él no se acerque a ella, pero Miles hará todo lo contrario para conocerla. Cuando sus caminos se cruc...