Familia Bang ||Chanlix

De presentaciones y alfas

El la casa de los Bang-Lee sólo se escuchaba el llanto de un pequeño cachorro.

Ese día se habían levantado para ir a su respectivos trabajos, escuela y kinder. Cuándo el segundo más grande de la casa se levantó diciendo que su estómago dolía, todos sabían que Changbin hacía eso para faltar a clases pero cuándo el niño empezó a llorar y sobar su pancita, la preocupación subió al tope.

Él que estaba a cargo del bebé era Chris, puesto que Felix tenía que llevar a Seungmin a su presentación en clases sobre el sistema solar y todos saben que Chan lo hubiera olvidado. Ambos padres se encargaron de llamar a sus trabajos para avisar que su cachorro estaba enfermo y ahora el rubio sólo estaba esperando a su esposo para poder llevar a Changbin al doctor.

Le habían dado un poco de medicina para curar su dolor pero nada.

-Y si te hago un té, mi niño?.- El alfa lo tomó en brazos y se dirigieron a la cocina para hacerle el té, no tenían de manzanilla entonces se decidió por uno de menta quizás y si servía.

Calentó el agua y puso la bolsita de té en la taza, cuándo todo estuvo listo, se lo ofreció al cachorro.

-Papá, esto parece el pipí de Dori. -Se quejó el niño.

-Podrá parecerlo, pero no es, anda bébelo.

-IUGH! Sabe a pipí.- Escupió todo el té encima de su papá, pero Christopher lo único que podía preguntarse era que cómo su hijo sabía a qué sabe la pipí de Dori.

En estos momentos, el rubio agradecía que Jeongin tuviera el sueño pesado y que nada lo despertara, no quería el llanto de dos de sus bebés. Con uno era suficiente.

Un despeinado omega entró por la puerta, en todo el camino a casa Felix fue jalando su cabello tratando de calmar a su omega y su preocupación.

-Está todo listo? He llamado a Mingi y dijo que fuéramos ya mismo.

-Si, cariño. Déjame voy por Jeongin y nos vamos.- El alfa puso a Changbin en el sofá y cuándo iba a caminar a las escaleras, el pequeño corrió hacía su padre omega. Felix lo recibió en sus brazos y justo en ese momento una explosión de aromas inundó el lugar, olía a mantequilla con canela y vainilla. Chan quiso golpearse contra el marco de las escaleras, Changbin tenía ya sus siete años, por ende ya se tenía que ir presentando cómo omega o en este caso alfa con un aroma muy diferente.

Minho había pasado por eso también pero antes de tiempo, le pasó teniendo apenas cinco años pero el doctor les dijo que era normal.

-Sólo te hizo falta un poco del olor de papá Lix, no?.- Bromeó el pelirrojo y lo abrazó más fuerte.

Si sus hijos eran celosos con él sin tener una naturaleza definida, imagínense ahora que tenía un alfa más en la casa.