De día del super y bebés enfermos

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-Channie, es miércoles. Ya sabes lo que significa.-Dijo Felix mientras pasaba a la cocina a preparar un biberón.

El nombrado dejó a hacer saltar a su primogénito Minho, de apenas ocho meses de edad. El bebé estaba sentado sobre las piernas de su papá con una mordedera en la boquita, ya que al parecer querían salir sus primeros dientitos.

El alfa estuvo pensando en porque ese miércoles era tan importante, no recordaba de hacer algo importante ese día. ¿Sería el cumpleaños de su omega? No, eso era en Septiembre. ¿Su aniversario? El sólo pensar en que había olvidado algo de gran índole hizo que su alma dejara su cuerpo cómo en esos animes que Felix suele ver.

-Te puedo jurar que no quise olvidar algo tan importante, Lix.-El rubio se levantó del sofá, asegurando al bebé en sus brazos. No quería que volviera a caer del sofá.-Sabes que Honnie ha estado muy enfermo y el pensar en que algo puede sucederle no me deja dormir.

El pequeño cachorro al escuchar el apodo cariñoso que usaban sus padres para él, pegó un gritito.

-Lo sé, pobres de mis amores, pero, ¿por qué te preocupas tanto por olvidar que hoy es día de ir al super?.-Escuchó decir a Felix desde la cocina.

Ah, eso era, pensó Chan mientras sentía su alma volver a su cuerpo y su corazón volver a latir con normalidad.

-Es la vejez-Respondió volviendo a sentarse.

Felix salió de la cocina con un biberón de gatitos entre sus manos, se acercó a los dos amores de su vida y tomó al bebé del regazo de su novio, todo mientras veía al rubio con el ceño fruncido.

-Pero si sólo tienes diecinueve, casi veinte.

-La adolescencia y la pubertad entonces.-Chan se encogió de hombros dándole poca importancia al asunto.

El omega se sentó en el sofá dónde antes Chan y Minho habían estado jugando al caballito, acurrucó al cachorro entre sus brazos y le ofreció el biberón. El pequeño movió sus bracitos de forma desordenada, mostrando lo feliz que estaba por ser su hora de almuerzo.

El mayor sólo se quedó de pie observando con amor y adoración a las dos personas más importantes de su vida, admirándolas cómo si fueran parte de las ocho maravillas del mundo.

Pasaron unos minutos dónde el alfa se dedicó a observarlos (y tomar muchas fotos con su celular) hasta que vio cómo de la naricita de su cachorro escurrían mocos, rápidamente tomó un pañuelo y se lo pasó por la nariz, para que no se los llegara a comer por accidente .

-Sigo sin entender porque aún sigue resfriado, ya lleva dos semanas así.-Dijo Felix mientras con una mano acariciaba los cabellitos de su bebé.

-Recuerda lo que dijo Mingi,cariño.-Song Mingi es amigo de la pareja y pediatra de Minho.-Tardará en recuperarse porque sus defensas están bajas. Nada más hay que seguir los medicamentos al pie de la letra y verás cómo en poco tiempo volverá a tratar de agarrar a Soonie, Doongie y Dori.

-You're right, hun. Lo siento, es la primera vez que enferma y me preocupa mucho.

-Por lo menos hay un lado bueno.-El alfa besó suavemente los labios del omega.-Al menos no tiene vómitos.

Por primera vez en su vida, Christopher Bang se arrepentía de decir algo, porque ya estando en el supermercado, específicamente haciendo fila para pagar. Minho vómito en su cara cuándo lo alzó.

Quizás era mejor mantener la boca cerrada de vez en cuándo.

Familia Bang ||ChanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora