—Creo que es hora de irnos — me sugiere Lucía — estoy muy borracha y sé que si me pongo de pie, me caigo
—No seas exagerada — me río y no sé por qué — vamos anda
—Madre mía que borracha estamos
—Sí — soltamos dos carcajadas —por cierto ¿dónde está Carla? — pregunto después de un buen rato sin saber de ella
—Estará follando como conejo con el ken de su novio
—¿Has dicho ken? — me salen lagrimas en los ojos— tú lo que tienes es envidia, y yo también
—Los borrachos no dicen mentiras — me mira con decisión — anda vámonos
Nos ponemos de pie como podemos, caminamos dobladas a causa de los tacones y porque a estas horas apenas nos quedan equilibrio. Nos agarramos una a la otra aunque no sé si eso es la mejor decisión pero es la que tomamos.
—¿Por cierto tienes llaves de la casa de Carla? — pregunto al darme cuenta que no tengo
—Sí — suspiro aliviada — siempre me quedo a dormir en su casa cuando termino así de borracha
—¿Por tus padres? — la pregunta sobra porque se la respuesta
—No hagas ruido — susurra y termino riéndome, es muy graciosa — shh joder que es el reservado de mi hermano
—A estas horas ya se habrá ido
—Que no grites — me regaña — que estrés
Lo pasamos y es como si nuestras vidas dependiera de eso
—Ves como n....
—Bueno bueno — dice Marcos con humor —pero si tenemos a la pequeña Corberó y a la pequeña Bianchi borrachas
—Cállate — le critica Lucía — ¿Qué coño estás haciendo imbécil?
—Esa boquita — le guiña un ojo — Thiago me acompañas a traer las bebidas
—Te voy a matar — le amenaza mi amiga y corriendo me suelta y sale disparada.
Me quedo sorprendida al ver la velocidad y el equilibro que tiene. No podía ni levantarse y ahora ha hecho eso, sorprenderte
—Eres un pesado —me doy la vuelta cuando escucho su voz, el que faltaba —¿aún por aquí?
—Sí — me retoco el pelo porque tengo que tener un aspecto asqueroso —¿y tú?
—¿No me ves? — aggg le odio — ¿ o es que estás demasiado borracha para confundirme?
—¿Por qué no te vas...?
—¿y Lucía? — me corta buscándola
—No está— miento
—Tiene que estar escondida ahí — le chivata Marcos y le miro mal, ya no me cae tan bien —lo siento pequeña Corberó
Thiago me ignora y va hacia la zona que le ha señalado Marcos y descubre que mi querida amiga se estaba escondiendo
—Che ci fui qui a quest'ora? —escucho que le pregunta pero no entiendo ninguna palabra
Lucía le contesta pero no escucho nada de lo que dice, Thiago comienza a regañarla y no comprendo el motivo ¿ es por qué estamos muy borracha? Porque por lo demás, no entiendo nada.
—Eres un cabrón — le regaño a Marcos pero se cruza de hombros como si no le importara mi insulto —¿por qué has hecho eso?
—¿Hacer el qué?
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Todos los te quiero que me faltan por decir (Saga TE QUIERO II)
RomantikLa pequeña de las Corberó siempre supo que quería ser en la vida y nada ni nadie podría parar sus sueños incluido sus padres. Con tan solo 18 años abandonó todo para ir a París a estudiar lo que le hacía feliz, Bellas Artes pero todo tiene un precio...