Fue un verano maravilloso, el mejor de todos los que he tenido, lástima que no pudiese encontrar el amor, pero estoy segura de que este será un buen año, ya lo creo
¿Mi nombre?, tal vez no parezca importante o resulte muy de telenovela: María Angélica, sí, muy telenovelesco, no sé en qué estaba pensando mi madre cuando me puso ese nombre; ¿Mi edad? Puedo decir que he llegado sin pena ni gloria a los 12 años, toda una adolescente han de decir, pues sí soy totalmente normal como cualquier otra chica de esta edad, además que estoy en que pronto iré a la secundaria; este año escolar que comienza es mi último año de primaria, cosa que me ilusiona y me asusta al mismo tiempo, todo esto es nuevo para mí, el simple hecho de estar dejando atrás mi niñez y entrar a la etapa intermedia, en la que no era ya una niña pero tampoco una mujer adulta al 100%, yo pienso que es normal.
Primer día de clases, último año, toda una experiencia y estoy segura de que me esperan millones de aventuras y retos este ciclo, pues es crucial para mi futuro venidero. El instituto José Hernández, colegio donde he estudiado desde que tengo memoria, se ha encargado de educarme y prepararme muy bien para el siguiente reto de mi joven vida y este caso no será la excepción.
Apenas llegaba a la escuela y ya me enfrentaba a la adrenalina y emoción de días como estos: chicos que corrían y se enfundaban en abrazos de felicidad, debido a la emoción que representaba el hecho de volver a reencontrarse después de un largo mes de vacaciones, pasillos y patio abarrotados de estudiantes, ya fuera de generaciones anteriores o de nuevo ingreso. Era un regalo poder vivir y presenciar momentos como éste, aunque también había nostalgia para nosotros, los de último año, los que nos graduábamos, pues se trataba de nuestro último primer día, nuestro último recorrido por este maravilloso lugar que pareciese salido de una de esas series juveniles extranjeras que me encantaba ver.
Había recorrido aquellos pasillos miles de veces y era melancólico el hecho de mirar y saber que había toda una historia escrita, llena de aventuras, amistades, etc. que se quedaban escritos y guardados en los muros de este lugar, soñaba con que este año no solamente se quedara escrito el recuerdo de miles de vivencias, recuerdos, amistades, travesuras, sino también que este colegio guardara la historia de mi amor, si es que llegaba a haber algo y sobre todo que encontrara al chico ideal.
-María por aquí -
Cuál es mi sorpresa que, al voltear todo mi grupo de amigos, conformado por: Citlali, Marisol, Brisa, Wendy, Mónica, Lupita, Ángel, Diego, Santiago, Hugo y Memo, me estuvieran esperando, bueno no era sorpresa ni novedad, era ya un ritual entre nosotros esperarnos el primer día de clases y ponernos al día antes del inicio.
-Chicos, me da tanto gusto volver a verlos- corrí inmediatamente a fundirme con ellos en un enorme abrazo de grupo - ¿Cómo están? ¿Tuvieron un buen verano? -
-Tenemos tantas cosas que contarte, las vacaciones fueron geniales, cada lugar que visitamos fue maravilloso, es otro mundo lo que hay más allá de la ciudad y de nuestras vidas rutinarias - comentó Mónica emocionada -Cada uno trae una historia muy buena que contar y de seguro tú también-
Iba a responderle a mi amiga, pero la campana fue más rápida que yo, ya se anunciaba el inicio de las clases y eso solo significaba una cosa: era hora de ir hacia el patio a formarse para escuchar la bienvenida y asistir a la asignación de grupos.
Esta ceremonia no tenía nada de interesante, solamente era la señorita Patricia, la directora, recitando el discurso de todos los años, deseándonos buena suerte, dando recomendaciones para el curso a los de nuevo ingreso y anunciar a la generación que se graduaría este año, en este caso la nuestra. Venía ahora lo interesante y estresante para cualquier estudiante: la separación por grupos. Era algo a lo que todos temíamos año tras año, pero afortunadamente o por azares del destino siempre terminábamos en el mismo grupo y esta ocasión no fue la excepción porque una vez más logramos vencer al azar, habíamos quedado todos en el mismo salón nuevamente, felices por conquistar al instituto en nuestro último año y vivir muchas nuevas aventuras como lo habíamos empezado 5 años atrás: juntos.
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Entre 2 amores
FanfictionMaría Angélica Lacroix, es una hermosa y dulce joven de 12 años de edad, la mayoría dirá una chica normal con una vida normal. Ella desde pequeña ha tenido grandes metas y sueños, y uno de ellos es poder conocer al que ella denomina su príncipe de c...