Capítulo 7: Duro como la roca

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Cuando vieron la siguiente prueba quedaron algo sorprendidos, ya que solamente había una pared y un cartel con un puño  dibujado, El gordo  intuyó que debía golpear el muro  hasta llegar al otro lado, y estaba en lo correcto, usó el YELLOW BANDIYOLA OVERDRIVE sobre el muro pero a pesar de haber roto una cantidad significativa, no llegó a ningún lado, gracias a la ayuda de Tachaba pudo intentarlo varias veces mas, pero seguía sin llegar a ningún lugar.

-Bon, que hacemos? esto parece no tener fin, Tachaba y yo estamos exhaustos; dijo el gordo mientras tomaba aire.

-Yo tampoco se que hacer; dijo Bon preocupado.

-Ta...Cha...Ba; dijo Tachaba mientras moría de cansancio.

Bajo estas circunstancias los héroes se encontraban perdidos, El gordo decidió usar lo aprendido hasta ahora, usó el BANDI JUMP para saltar arriba del muro y ver que tan largo era, pero parecía no tener fin, respiró, pensó y usó la técnica de los ojos, vio como un aura blanca y débil estaba bajo el túnel, así que una vez mas usó el YELLOW BANDIYOLA OVERDRIVE, pero esta vez sobre el piso.
Para su sorpresa había un viejo minero con una nota a su lado que decía:

Hola, si vez esto es porque conseguiste pasar la prueba del muro, yo lo construí, toda mi vida fui obligado a construir este muro, no dejaban morirme así que si me vez, mátame por favor. A veces para encontrar el verdadero camino debes tomar otra ruta. Dile a Speck que lo extraño.

-Izo.

Gordo conmovido usó el bandiyola en el y lo liberó de su prisión, El gordo nunca había sentido pena por nadie, pero comió esa bondiola como ninguna otra y guardó esa carta.

No parecían estar muy lejos de la cima, pero sabían que cada prueba iba a ser peor que la anterior, así que decidieron seguir su viaje con valentía.

-Gordo, que es eso de ahí adelante? dijo Bon sorprendido.

Delante de ellos había una criatura extraña que repetía "Edward" parecía una ser una quimera, una fusión entre un perro y una humana, al lado de ella había un cartel que decía "aliméntame" Gordo no tenía nada para comer, pero Tachaba llevaba unas mandarinas que les dejó el Ganso en su bolso. 

-TACHABA; dijo Tachaba mientras se acercaba a la quimera ofreciéndole mandarinas.

El perro se quedó mirando y con una suave voz triste dijo:

-Es bueno ver como personas tan buenas llegaron aquí arriba, nadie me había alimentado antes, Sigan su camino, yo tomaré el mío, puedo ver que todavía hay gente que lucha por su verdadera justicia, ni la mala ni la buena, la que ellos creen es la correcta. Mi padre hace mucho tiempo creyó que convertirme en esto fue lo correcto, por eso no estoy enojada con el.

La quimera se perdió en el horizonte hasta que no pudo verse mas, los amigos algo confundidos se preguntaban de que era esta prueba, a pesar de no haber entrenamiento físico se sentían totalmente lleno de determinación por dentro.


El gordo bondiola: ConfrontamientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora