¿La hija de Snape? (Hermione y Tú) Parte 2

~Capítulo 19~

Apenas se posicionó sobre mi cuerpo comenzó a besarme con intensidad, para mí mala suerte no podía tocarla y era algo desesperante pero a la vez excitante, se alejó por unos segundos para recuperar el aire por tan intenso beso y con una voz ronca susurró...

Her: Hora de jugar -dijo antes de apuntar a la puerta con su varita y lanzar ambos hechizos-

Por alguna razón ninguna palabra salía de mi boca y aún más cuando se alejó y me dejó confundida o fue así hasta cuándo su ropa comenzó a quedar en el suelo para que solo se quedara con su lencería de encaje color negro que combinaba muy bien con su piel.

Se acercó lentamente causando que mi cuerpo entero me pidiera tocarla ya, hasta que se sentó de espaldas sobre mi moviéndose lentamente casando que tragara en seco repitió está acción un par de veces hasta que de dio la vuelta y se sentó sobre mi mientras relamía sus labios. No podía dejar de mirar cada detalle de su cuerpo, la lencería que llevaba, su cabello suelto cayendo hasta llegar hacia sus pechos me estaba torturando. La ví sonreír para luego sentir su mano levantar mi mandíbula

Her: Mi mirada está aquí -sonreía pícaramente-

T/N: -mordí mi labio interior- Necesito más que mirarte

Her: Aún no -susurró-

Rozó nuestros labios un par de veces para luego al fin unirlos, disfrutaba de ese beso mientras sentía su lengua chocar con la mía y jugaba con sus labios a mi antojo, mordí su labio inferior causando que soltara un leve gemido e imitara mi acción.

Comencé a sentir sus manos recorrer mi cuerpo mientras los botones de mi camisa iban soltándose con su ayuda, cerré mis ojos disfrutando su contacto mientras ella poco a poco me dejaba en ropa interior, sentía mis bragas mojarse más de lo normal, el efecto fue más satisfactorio cuando sus labios recorrían mi cuerpo acompañados de su lengua, dejaba algunos chupones cerca de mis pechos lo cual me volvía loca.

Desabrochó mi sujetador y comenzó a jugar con mis pechos tanto como quería, con solo esas acciones me sentía más que mojada, pero no iba a parar por lo cual recorrió mi gordo con lengua para luego bajar hacia mi estómago y detenerse en el borde de mis bragas.

T/N: Deja de torturarme -dije entre jadeos-

Ella se limito a mirarme con una sonrisa para luego bajar lentamente mis bragas y seguir causando cierto grado de desesperación en mi, hasta que de un momento al otro y sin precio aviso sentí sus dedos entrar en mi no pude contener el gemido que me causó su acción, movía con destreza sus manos mientras me miraba fijamente y yo me limitaba a cerrar mis ojos y morder mis labios, se acercó rápidamente hacia mi y puso su mano en mi mejilla para unir nuestros labios con intensidad. Después de un par de minutos sentí mis piernas flaquear y llegué a mi punto máximo alejándome gimiendo sobre sus labios.

Comencé a recuperar mi aire jadeando con intensidad, la ví sonreír y volvió a besarme pero está vez con más suavidad aunque claramente ya sentía a mis labios palpitar levemente por sus anteriores mordidas.

T/N: Necesito que me sueltes -dije suavemente mientras levantaba mi rodilla haciendo fricción con su intimidad-

Her: Necesito soltarte -dijo con un jadeo- pero aún no quiero hacerlo -se movió sobre mi rodilla cerrando sus ojos-

T/N: Tal vez aún no necesite mis manos -susurré moviendo un poco mi cuerpo para acercarme a su cuello- pero quiero hacerte sentir el cielo

Her: -asintió- Ac-cio varita -dijo siguiendo con sus movimientos-

Al instante apunto su varita a mis manos y las cuerdas soltaron su agarre lo cual agradecí internamente, la levanté en mis brazos y la guíe hacia su escritorio botando todo lo que había sobre el y haciendo que tomara asiento, comencé a besarla con intensidad y tocar su cuerpo con la necesidad que me había causado al no hacerlo antes.