~Capítulo 22~

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Miraba el pequeño frasco que tenía en mi mano pensando en lo que podría hacerme di lo bebiera, tal vez sería un veneno para que deje de sufrir pero Draco no lo permitiría, quería tomarla pero si no tenía un plan después de eso probablemente todo saldría mal, pero al verla no se me ocurría nada más que intentar buscar algo que me diera una idea de que era.

T/N: Rojo sangre... parece estar bien preparada -dije sintiendo ese extraño olor- una A grabada en su tapa

Una A... Draco debió ser más específico pues no podía ser una poción para animagos eso haría que me convirtiera en un animal de acordé a mi personalidad y de seguro no sería nada pequeño. La puerta se abrió y al instante escondí la poción bajo la roca, aunque pensé que podría ser Melany me sorprendió ver a Daphne.

T/N: ¿Cómo demonios entraste aquí?

Daphne: Porque tengo contactos T/N, no como tú que estás muriendo en este lugar -caminaba hacia mi-

T/N: Si los tuvieras estarías fuera de este lugar

Daphne: Algún día tendré los suficientes -se sentó a mi lado- ¿recuerdas lo que pasó entre nosotras?

T/N: ¿Como me secuestraste y me obligaste a amarte? -pregunté con ironía- lo recuerdo

Daphne: Ahora no te ves tan T/N como siempre

T/N: Sigo siendo yo

Daphne tomó mi mentón con fuerza haciendo que nuestras miradas conectaran, solo que ella aún me miraba con ese extraño sentimiento que no podía definir y yo la veía con el odio que por sus actos me había obligado a sentir

Daphne: No tienes esa mirada de sentirte la mejor

T/N: Este lugar mataría el espíritu de cualquiera

Daphne: Lo sé, por ti estoy aquí -dijo alejando su mano de mi mentón-

T/N: Yo no te pedí que me dieras amortentia o lo que sea que era esa poción

Daphne: Pero sé que sentiste lo mismo que yo, -susurró acercándose peligrosamente hacia mi- y que te morías de ganas de que hiciéramos de todo

T/N: -solté una carcajada- Lo siento Greengras pero ni en otra vida podría quererlo

Daphne: ¿Por qué amaste a Astoria y no puedes amarme?

T/N: No he amado a Astoria como ambas quieren que las ame, mi corazón le pertenece a cierta chica que ama leer y aunque tú quieras cambiarlo solo perderás tu tiempo

Daphne: Así lo veo -dijo para luego ponerse de pie- que lo disfrutes -susurró-

T/N: De qué... -dije pero fui interrumpida por dos hombres que entraron a mi celda ¿no habían guardias cerca?-

Daphne: Un regalo de parte de Rufus y mío, volverás a mi

T/N: Nunca fui tuy... -uno de los hombres me golpeó justo en el estómago- ya... -terminé de decir-

Daphne: No toquen su cara, la quiero así de hermosa -dijo mordiendo su labio-

T/N: Maldita Gree... -otro golpe-

Ambos hombre comenzaron a golpearme por todo el cuerpo, pero aunque sentía un gran dolor no podía dejar que me vieran débil, no frente a la rubia que creía poder doblegarme. Un golpe trsd otro hasta que sentí mis piernas fallar en sus intento de mantenerme de pie y caí al suelo para luego sentir sus golpes por todas partes, no se detuvieron hasta cuando ya me sentía más inconsciente que nunca

Daphne: Tu sangre sucia tendrá algo peor mi vida -susurró en mi oído-

T/N: Pú...dre...te...

¿La hija de Snape? (Hermione y Tú) Parte 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora