POR QUE ME DEJASTE IR

Capítulo VIII

—¿Estás contenta verdad? - decía León en un tono irónico no pude evitar fruncir en ceño -

—No debería porque estarlo – comenté con enojo -

—No me vuelas a hablar con ese tono Machu - espetó -

—Tú no eres nadie para mandarme –habló con algo de miedo -

—Creo que no has entendido Machu y te lo advierto, Si me vuelves a hablar asi, Te puedes arrepentir –comenta -

—No me volverías a pegar ¿o si León...?- susurré con ira -

—Si así quieres jugar - Sin percatarme me atrae a el desde la cintura con fuerza -

—Eres tan idiota que no te has dado cuenta que esta no es mi habitación –susurra en mi oido -

Escuche atenta cada palabra suya, Observo al mi alrededor percatando, Que era cierto.

No digo nada solo me quedo callada, Dejando que siguiera diciendo mis verdades.

—¿Acaso es una de las tantas habitaciones de tus amantes? – Dice subiendo el tono de voz –

—¡¡Yo no tengo ningún amante!! – chilló –

—Entonces... Lo menos que merezco es verte desnuda ¿No lo crees? – dice mientras se acerba a mi cuello con intenciones de besarlo pero me alejo para hacer lo que me ha pedido, León me mira con satisfaccion. -

Con cero ganas empiezo a quitarme la blusa del asqueroso uniforme, Quedando al descubierto mi bra.

Mis ojos se empiezan a humedecer por la humillación que me está haciendo aún así es mi culpa, Le estoy permitido que me trate así.

Con las pocas fuerzas que me quedan lo miro, León parecía no importarle que en cualquier momento alguien podría entrar y verme.

—Por que te detienes sigue – habla un sonriente León -

Siguiendo sus órdenes bajo mis manos hasta quedar a la altura de mi cintura, Al sentir la falda.

Empiezo a desabotonar la falda.

Sin ver el proceso al hacerlo ya “millones” de veces y al solo tener uno, Esta se desprende de mi fácilmente, Dejando ver mi short, Que estaba debajo de mi falda.

—Que esperas – dice con impaciencia -

Ya sin ganas de hacer ya nada, Lagrimas salen una tras una, Tan rápido que ni siquiera soy capaz de sentirlas...

Con la respiracion acelerada gracias a los nervios, Empiezo a quitarme el shorts para bajarlos hasta el piso.

Miró como este ya cae al suelo junto con mi dignidad.

—Y...yo no v...Voy a qui...qui...tar...me el bra...ssier –dije con demasiado nervios haciendo que se escuchara como un tartamudeo –

León se acerca sin intenciones de hacer el trabajo por decirlo de alguna manera.

En cambio se acerca para estar cerca de mio, pero León se pone atrás mío.

Siento como agarra mi cabello con fuerza para jalarlo para atrás.

—¡Me estás lastimando!! – me queje estando de rodillas y mi cabeza estando hacia atrás –

— Entonces obedece – dijo con una voz tranquila para ponerse en cuclillas –

—No puedo – me queje con la voz rota sintiendo aún más fuerte su empuje –

— Si tú no puedes lo haré yo, Entonces – dice para levantarse obligandome a qué yo también lo hiciera –

Por instinto me tapo el bra con mis brazos, Para que no pudiera hacer nada.

Siento como el quita su agarre pero el dolor seguía hay.

—Si no quieres que te siga lastimando, Has caso – susurró tocando mi mejilla húmeda –

No dije nada pero tampoco obedecí.

—Si es lo que quieres Machu – Con fuerza quita mis brazos con facilidad, Dejándome en bandeja de plata –

—León, Esto no es necesario – susurro  quitándome de uno de sus agarres  –

—Claro que lo es  hermosa... – Sin seguir luchando conmigo me desabrocha el sujetador –

Maldita sea, Porque tuvimos que pelear, Sentí como este bajaba hasta ya no sentirlo.

A lo cual reacciono rápido y me cubro con mis brazos.

El me mira sin inmutarse, Estaba pensando, No me dio tiempo en reaccionar.

Al poco tiempo estaba tirada sobre el piso  con las manos extendidas siendo sujetadas por una mano.

Trato de gritar pero las palabras no salen de mi boca.

Siento como empieza a besar de mi cuello pero pronto se separa de mi al

escucho como la puerta se abre pero el sigue con lo “suyo”.

—León ¡¡Por favor!! – le ruego al sentir una mano en mi entrepierna –

Claudio levanta a León  para darle un golpe el la nariz, León herido cayó de rodillas, mientras maldecía a Claudio.

Gracias a la distracción, Agarro rápido mi camisa para cubrirme.

—¿Estás bien? – pregunta el chico argentino a lo cual asiento –

—Alejate de ese tipo Machu! – dijo autoritario –

—Es mejor que te vallas – dice en un tono nuevo, Nunca lo había escuchado hablar tan  frío y serio –

León le hizo caso y se fue, No sin antes darme una mirada de amenaza.

—Cambiate ahí está el baño, Te espero – Se despide con una sonrisa –

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Algunas cosas no son coherentes (no tienen sentido) por lo cual luego actualizaré después.

Espero les guste!!