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Ddeonu y Kinnie jugaban alegremente en el patio de la escuela, un poco alejados de todos. Les gustaba estar en un lugar donde solo ellos pudieran ocuparlos, sin nadie más.

Reían a la par por las ocurrencias del otro. Era un buen ambiente el que había entre ellos dos, uno realmente cómodo en el que adoraban estar.

Los docentes sonreían cada que los veían al ser demasiado adorables, agradecían que aquellos dos niños se hubieran convertido en grandes amigos porque se habían ayudado bastante. Sunoo ya no era tan tímido a la hora de participar en clase ya que Ni-ki siempre lo alentaba para que participara. Y Ni-ki ahora sonreía más ya que Sunoo lo hacía realmente feliz.

Ddeonu recostó su cabeza en el hombro de Kinnie, acurrucándose más al cuerpo ajeno. Ambos niños sintieron un calor en su pecho tan acogedor, y fue ahí cuando se dieron cuenta de que debían estar siempre al lado del otro, para seguir generando aquella que solo el otro podría brindarle.

𝐂𝐎𝐋𝐎𝐑 𝐌𝐘 𝐖𝐎𝐑𝐋𝐃 ⋕ 𝘀𝘂𝗻𝗸𝗶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora