Explicaciones

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Después de una larga noche en la que nos entregamos Alexander y yo, y pude comprender que no había sentido este tipo de conexión con mi difunto esposo, esto era algo nuevo y totalmente desconcertante, me acomode en la cama u estire mi brazo buscando a Álex, pero solo encontré un lugar vacío a mi lado, decidí que era hora de levantarme, no tenía idea de qué hora era, mi celular debía de estar en mi bolso en la sala o en algún lugar tirado, volví a asaltar el clóset de Álex en busca de ropa, cuando por fin estuve un poco decente, baje en su búsqueda, pero me quedé parada al escuchar la voz de Alexander hablando con otra mujer, decidí que lo mejor era regresar a la habitación y esperar a que Alexander terminará, decidí darme una ducha me haría bien estar ocupada y no tener que estar pensado y quién era la mujer y que hacía platicando con Alexander, mientras me duchaba Alexander tocó a la puerta.

-Mayte, hay alguien a quien me gustaría que conocieras, en cuanto termines podrías bajar?

- Claro en un momento bajo. Así que tendría que darme prisa en ducharme y para bastar solo tenía la ropa de Álex que me quedaba enorme, eso tendría que bastar, era eso o bajar desnuda.

Encontré un pantalón de deporte y nuevamente una playera blanca y seguía saqueando sus boxers, me mire en el espejo y suspiré, quién estuviera abajo me vería Totalmente desalineado pero al menos estaba limpia eso debía de contar.

Al entrar en la cocina encontré a Álex sentado frente a una chica que era muy parecida a él, así que mis pensamientos fueron de que era su hermana.

- Mayte te presento a mi Hermana Marsalli.  Es una hermosa mujer, alta, rubia ojos azules igual a los de Alexander.

- Mucho gusto Marsalli, es un gusto conocerte.
- Igualmente Mayte, mi hermano ma ha dicho que eres Mexicana, nunca había conocido a una chica latina, eres muy hermosa. Siento inmediatamente que me están cambiando los colores, no soy muy receptiva a los cumplidos y que este venga de una chica que parece modelo, guau esto es muy importante.
- Muchas gracias. Me siento un poco tímida en este momento, afortunadamente Alexander toma la conversación.
- Marsalli vino a Inverness por unos asuntos de su esposo, así que me pasó a visitar, le platique qué tenía compañía y que desayunara con nosotros para que te conociera.
-Ho es genial, a decir verdad de alguna forma ya te había conocido, tu Hermano me prestó un abrigo y unas botas tuyas, espero no te moleste.
-Como crees me alegro que te hayan servido, y que bueno qu Alexander te los haya dado, es obvio que no estás acostumbrada a estos climas, de hecho tengo más cosas que te podían servir.
- Muchas gracias Marsalli, de hecho este clima ha sido muy nuevo para mí, y al parecer mi ropa no es suficiente para este lugar, pero tiene su encanto, voltie a ver a Alexander dándole una sonrisa cómplice.
Marsalli siguió mi mirada y se dio cuenta de nuestro intercambio de sonrisas, así que empezó el interrogatorio.
- Y dime Mayte porque estás en las Tierras Altas?
Ok está mujer iba directo al grano.
-Estoy acompañando a mi amiga Scarlett, ella es fotógrafa y vino a un trabajo a las Tierras Altas, así que me invitó a acompañarla y aquí estoy.
- Me alegro que estés conociéndo este lugar, aunque el clima es bastante peculiar el paisaje es hermoso.
- Así es, vale mucho la pena aunque casi siempre este al borde de la hipotermia.
- Como es que conociste a mi Hermano, no es muy social que digamos, así que no creo que se haya ofrecido a hacer de guía turístico. Lo vio con una mirada interrogativa.
- Pues fue un poco gruñón de hecho, yo solamente estaba disfrutando de la brisa en mi rostro.
-  Disfrutando en medio de la carretera.
- En mi defensa no sabía que fuera tan transitada esa calle.
- Luego de eso accidentalmente quede varada aquí en su casa, decidí hacer un poco de senderismo y termine en su puerta atrapada por la lluvia. Marsalli solo nos miraba a ambos, a decir verdad era muy pronto toda esta situacion, pero no me arrepentía absolutamente de nada.
- Bueno, yo me tengo que ir. Marsalli se levantó de la mesa y se encaminó a la sala, me levanté junto con Alexander para acompañarla, ella se volvió y me abrazó, lo cual fue un tanto sorprendente, le devolví el abrazo.
- Fue un inmenso gusto conocerte Mayte, me gustaría que nos volvieramos a ver.
- Claro que sí Marsalli me encantaría a mi también.
Le dio un abrazo a su hermano acompañado de una mirada bastante significativa, el lo único que hizo solo fue abrazarla.
La vimos salir y subir a su todo terreno.
Sentí el a Alexander rodeándome la cintura, me volví para verlo a los ojos.
-  Espero que no haya sido demasiado, pero mi hermana llegó sin avisar y no me dio tiempo de arreglar nada, así que lo mejor fue decirle la verdad.
- No te preocupes, tu hermana parece genial, y es encantador que este preocupada por ti, es obvio que quisiera explicaciones, soy extranjera y solo nos conocemos de días, aunque se sienta que te conozco de toda la vida.
- Lo se Mo Ghaol yo también lo siento. Nos abrazamos y nos besamos, estar con Alexander se sentía como si siempre hubiera estado con él, no se sentía que fueran días, sino que pareciera que habíamos estados juntos toda una vida, estando en sus brazos era como estar en una burbuja en la que no pasaba nada y en la que solo existimos los dos, pero la realidad era que yo tenía un equipaje que saldría a la luz en 7 meses. 

Una Nueva oportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora