Insula Avalonia: Ordo Draconis

Capítulo 12

Pasó una semana y Kayley hablo con Kursh, le pidió que la acompañara a Avalon. - Disculpa, pero necesito regresar a Avalon. ¿Me acompañarías?- En otra situación te habría dicho que no , pero ya he visto suficientes cosas extrañas. ¿Qué pretendes buscar? - El pasado ... Viajaron a Islandia en un avión privado y luego tomaron un navío pequeñoNavegaron en él durante 12 días , y cuando la isla se hizo visible. Kayley y Kursh observaron el castillo, pero algo era diferente para ella. Se acercaron más , el castillo estaba casi en ruinas.Conforme se aproximaban a la costa el castillo quedaba oculto tras el denso bosque que se extendía más allá de la playa, la niebla era más densa de lo usual. Nuevamente la isla se encontraba oculta , pero esta vez Kayley estaba segura de que la barrera los iba a dejar pasar. Le dijo que normalmente les tomaría unos tres días llegar , pero ella conocía un pasaje submarino Ella y kursh se colocaron sus equipos de buceo. Revisaron los tanques y el sistema avanzado , el radar no detectaba la isla.No podían desviarse de la trayectoria. Kayley se acercó a la barrera y la tocó.Su manó la atravesó sin problema. Le hizo una seña a Kursh de que tomara su mano. Ambos pasaron sin problema. Pero Kayley abrazo a Kursh. Así se sumergieron. Primero se aseguraron de que no hubieran tiburones, luego nadaron durante media hora y salieron a la superficie. Era lo que quedaba del puerto que se había construido hace varios años y ahora lo veía casi sumergido. Se encontraban en las minas de Hel El reino subterráneo había sido abandonado.Kayley creía que toda la isla se encontraba deshabitada , había un derrumbe, a lo lejos ella pudo ver su trono, pero el hielo no la dejaba ver mucho, entonces se acercó.Kayley se puso una mano en la cara en señal de preocupación. Kurh observó y la abrazó, retirándola del lugar. Habían muchas personas congeladas. Kursh le preguntó si quería continuar , ella accedió. pudieron subir a la superficie por medio de una escalera ya congelada. Kayley vio nieve. Ella y Kursh observaron el cielo luego hacia el horizonte y en efecto esa parte de la isla se había congelado parcialmente. Algo raro había ocurrido. Decidieron subir a la única torre que quedaba. La isla daba la impresión de haber sido devastada por una tormenta helada. Lejos ella veía el bosque , el lago y la caverna en la que pasó una noche.Los lobos aullaban. Estaba oscureciendo. Kayley pensaba en el mundo que había visto durante su estado de coma. Vio la relación, pero no sabía cómo ni porque había ocurrido. Ahora solo tenía que ir en busca de respuestas. Ella y Kursh pasaron la noche en una habitación de la torre.Durante los primeros días navegando hacia la isla se habían mantenido distantes, pero pronto empezaron a estar más cerca. Sin embargo no tuvieron intimidad. A la mañana siguiente fueron al lago. Kayley se desnudó frente a Kursh y empezó a nadar. Él la miró pero luego se acostó en el suelo, colocó sus brazos en su cabeza y empezó a observar el cielo. La barrera de Avalon era rara de ver. Las nubes y la niebla se veían distintas. Tal esfera giraba en la dirección contraría. Era un campo de fuerza mágico. Kayley se divertía mucho en el lago y lo invitó a entrar, pero Kursh se negó. Kayley se quedó quieta y observó el gran árbol. Las manzanas estaban ahí.Recordó cuando tuvo que subirse a él para escapar de unos osos. Le había contado unas historias a Kursh durante el viaje. Pero ya no habían osos en esa parte de la isla. Kayley se acostó a secarse con el sol. Luego se puso su ropa y empezó a caminar hacia el bosque mágico, pero delante de ella habían cenizas , no lo había notado desde la torre. Los lobos empezaron a aullar. Kayley se acercó a Kusrh y le dijo que era hora de volver al castillo. Era la segunda noche. A esa hora Avalon se sentía macabro. La niebla brillaba. Volvieron a dormir en la torre, pero a la mañana siguiente. Kayley decidió ir a la antigua habitación de su maestro, para buscar información en los textos. Dejó que Kursh durmiera y fue sola. El pasaje hacia allá estaba lleno de telarañas. La sorprendió ver arañas grandes, pero eran inofensivas. Incluso si eran del tamaño de un gato pequeño. Pero gritó cuando una se le subió encima. Kursh se fue corriendo hacia los gritos y Kayley le dijo que había una araña gigante, indicándole que se alejara. Kursh se mantuvo lejos, pero encendió una antorcha. La araña salió corriendo, pero antes de eso dejó a Kayley colgada en la pared. Kursh sacó una navaja y empezó a soltarla. Ella le agradeció y cerraron la puerta.Debía encontrar una manera de evitar el pasaje y las arañas. También asumió que el laboratorio de su maestro había sufrido algún percance. Esperaba que los libros estuvieran intactos. Se puso a pensar y decidió que rompería la muralla lateral. Al derribarla con ayuda de kursh vio que estaba llena de huevos de araña.Y varias salieron hacia el bosque. Eso iba a ser malo, lo presentía. El laboratorio estaba plagado de telas Ahora Kayley tenía mucho miedo. Una araña del tamaño de un lobo la observaba y al fondo varios frascos se habían roto. Habían muchas arañas muertas y una pequeña grieta en el suelo, ahí estaba la herrería. Por suerte no tenía pensado ir a forjar algo. Aunque vio que los frascos de vidrio habían caído allí. De todas formas la biblioteca , aunque cubierta de tela daba la impresión de estar bien. Los libros se encontraban tras un cristal. La araña era demasiado grande para salir por la pared.Pero tenía que matarla, sin embargo sus hijas ya habían emprendido rumbo al bosque. Esas cosas habían sobrevivido siendo caníbales.La araña reina la observaba, tendrían que buscar armas. Incluso si el castillo estaba en ruinas era amplio y tendrían que recorrer varios pasillos.