No siempre los finales son ver estrellas, arcoiris , no siempre hay un felices para siempre, solemos tomar decisiones que nos cuestan el corazón, estar con personas que creemos merecer cuando en realidad nuestro corazón nos pertenece a otra persona...
En el mes de noviembre todo empezaba bien, ya tenia amigas. Una tarde que salí a comprar bolis al lado de mi casa, vi a un chico bajar del 2 piso, era Moreno, cabello negro corto, de baja estatura y algo simpático. No sé por que de cierta forma me llamó la atención.
Luego, al pasar el día nicoll me lo presentó vamos a ver que ellos eran amigos desde hace tiempo pero el no vivía ahí, solo venia de visita ya que ahí vivía su tía. Nos empezamos a conocer y en cierta forma me llegó a gustar y nos hicimos novios, claro mi mamá no lo sabía porque era demasiado pequeña para tener novio y debi hacerle caso. El mes de noviembre
Todo iba bien, llegó el mes de diciembre. Justo un 4 de diciembre me invitaron a una fiesta, era un extraño piscinazo, y bueno yo estaba con nicoll la única amiga que tenia de por ahí.
Entonces lo vi a él, sentado en el una silla verde frete a la piscina. Cuando lo vi sentí como una flecha atravesaba mi corazón. Pelinegro, cabello largo liso, ojos con grandes pestañas y tenia hermosos lunares en su rostro. No podía dejar de mirarlo y dirán... Hey tienes novio, pero era imposible no mirarlo.
La señora que vendía bolis resultó ser su abuela.
- Jennifer - me llamó de manera dulce la señora.
- Dígame señora Rosa - dije dandole una sonrisa.
- Este es mi nieto Stiven, llegó ayer de Bogotá - me dijo tocandole el hombro a Stiven.
- hola, soy Jennifer, me mude hace poco - le dije con una sonrisa.
- hola - me dijo en tono frío pero con una leve sonrisa.
El revisaba su celular cuando en ese instante vi su fondo de pantalla y era uno de mis animes favoritos así que le dije :
- waw tienes a kaneki de fondo, genial, yo también tengo ese mismo fondo de pantalla - dije dándole una sonrisa
Fondo :
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- ¿enserio? - me pregunto con un leve destello en sus ojos
- si, iré por mi cel, no te vayas - dije un poco en tusiasmada, fui corriendo a mi casa a buscar el celular.
Al salir me senté junto a él y empezamos hablar de tokyo ghoul, en ese momento nos preguntamos muchas cosas y al parecer soy un año mayor que el. Nos intercambiamos numero para hablar por chat. Lo malo es que el no escribe sino que tu le tienes que decir el hola.
Al dia siguiente en la noche nos sentamos hablar en un borde que hay al frente de mi casa, me sentía muy contenta porque teníamos muchas cosas en común, teníamos los mismos gustos musicales, ambos amábamos los videos juegos y nos gustaba el mismo estilo de ropa. Al rato empezaron a llegar chicas que ni se de donde salieron , solo se que llegaron y empezaron hablar con Stiven y también se presentaron conmigo. En ese momento alguien más tuvo un flechazo.....
