Matrimonio arreglado.

Boda

-por el momento, no, aquí tiene sr. Richard. Le pagaba y tomaba la cajita.

-gracias, vuelva pronto Joven.

Salía del lugar guardando en su bolsillo la cajita, subía al auto conduciendo de regreso por la calle de Oxfd, giraba a la derecha a la calle Rosy se encontraban algunas mansiones, al llegar al Número 18, su enrejado era cubierto por enredaderas, que impedía ver los jardines que al entrar eran adornados por arbustos con flores blancas, y pinos a la distancia se veían las rosas de diferentes colores que adornaban el lugar. Al llegar a la entrada salía del auto subiendo por los 5 escalones, el lugar era de dos niveles, caminaba por el recibidor, a la sala donde se encontraba unos sillones al fondo el comedor, caminaba por un pasillo a mano izquierda, que daba al estudio, subió por las escaleras a las habitaciones camino por un pasillo varias puertas de habitaciones se encontraban. Abrió la última una cama de madera grande con sus dos mesas de noche, una mesa y dos sillones enfrente del balcón y un tocador de madera con un espejo ovalado que estaba decorado por rosas, camino al tocador sacando la cajita y depositandolo encima.

Al día siguiente Lily no acudió al instituto su padre le habían indicado que no asistiera, por los preparativos de la boda que faltaban, su madre entró a la habitación, con una jarra de té y postres, colocó la charola sobre la mesa y tomó asiento, Lily hizo lo mismo mientras preparaba su té.

-hija, tengo que explicarte algo, después de que te cases... Se ponía nerviosa.- estarás con el joven Hawk a solas en la misma habitación...

-si, como tú y papá. Miraba que le tomaba a su té y respiraba.

-si, hija pero no tan solo dormirán en la misma.. cama sino que... tendrás que... estar. Al intentar explicarle se empezaba a poner roja.

-Mamá, ¿estás bien? Le tomaba su mano.

-si hija, solo dame un momento. Trataba de ordenar sus palabras.

Lily solo la miraba como respiraba y se bajaba su rubor pero no el nerviosismo que tenía cuando volvió a hablar.

-esa noche él y tú se acercarán mucho... realizaba una pausa.

-pero... la interrumpe.

-deja que te explique qué pasará... La Sra. Morrison le comenzaba a explica cómo sería la intimidad que tendría con Erik, el dolor que podría sentir, Lily se sonrojaba con cada palabra de su madre, al terminar de decirle que pasaría la primera noche que estaría con su esposo. Lily se encontraba muy roja.

-hija, espero que no tengas dudas al respecto de lo que pasará.

-no tengo dudas. miraba su taza sentía.

-bien, hija te dejo todavía tengo que ver algunas cosas.

Lily solo asentía, escuchaba como se cerraba la puerta de la habitación, seguía tomando su té, miraba al horizonte, pronto dejaría la casa de sus padres y se iría a vivir con el joven Erik quien solo lo había visto en los ensayos en la iglesia, de compromiso, miraba el florero dónde se encontraba un ramo de rosas de Castilla.

-¿cómo se verá desnudo? Será como me dijo mi madre todo. O tal vez se vea diferente eso. ¿pesará mucho? No mi madre dijo que no me pesaría, pero si no es así. Movía un poco su cabeza para sacarse esas ideas.

-debo de dejar de pensar en eso, lo mejor será que me tranquilice. Escuchaba como los sirvientes, se apresuraban entraban y salían del lugar sus voces llegaban adentro.

-!Vamos apresúrense a terminar de poner esas carpas!

-¡Sí!

-¿ya colocaron los arreglos alrededor del salón?