Solo vine por lo que me pertenece -susurro-.
Mira papá el fue el señor -dice Fleur-.
Métete a la casa Fleur -le ordene-.
Pero...-reprocho-.
Obedece a tu papá Fleur -alargo la última palabra-.
Está bien -se llevo el conejo muerto-.
Para que veniste? -le dije molesto-.
Para reclamar lo mío -me sonrie-.
T/n "es mía" -lo mire-.
Yo no vine por ella -me miro- yo vine por mi hija -se acerco a mi-.
Fleur no es tu hija -mire a mi hija acariciando al conejo- y T/n es mi esposa.
Te acuerdo que yo hace años me acosté con tu esposa -me dijo con una risa sinica-.
Por qué la violaste -le solté un golpe-.
-tomo su mandíbula- Yo no la viole...ustedes habían terminado Frey -se limpio la sangre-.
Tenía razón...habíamos terminado,pero fue hace años...ahora éramos una familia.
No quiero que te les aserques Damian -lo fulmine con la mirada-.
Solo vine a conocer a mi hija -me sonrie-.
Papá!!-grita Fleur- el pastel -dice gritando-.
No te acerques a Fleur -le di una última mirada-.
Entre a la casa...T/n no estaba había salido con Leigh y Kaia.
Podemos invitar al señor? -pregunta timida-.
No -dije serio-.
Por favor...tu me haz dicho que tengo que ser agradecida...el regalo un conejo muy bonito...yo le puedo regalar un pedazo de pastel -me dijo con el conejo en brazos-.
No le podía decir un "no".
Está bien -susurre-.
Te quiero papi -salio corriendo-.
A lo lejos pude escuchar como hablaban.
Damian si podría ser su padre.
Ya llegué -grita Fleur-.
Te gustan los conejos nena? -pregunta Damian-.
Mucho -dice emocionada-.
Pastelito -dice Poe-.
Es encerio?.
Mira papá el es otro señor que conocí ayer -me dijo feliz-.