El Mundo

¿Así se siente un corazón roto, no?

-Desde Niño, me ha encantado defender la justicia, veía algo que estaba incorrecto y yo de primero, salía a defender a quien sea, fuera era el mejor de la clase, siempre salía en el cuadro de honor me encantaba ver mi foto y mi nombre en la pared. Nací en Barquisimeto, Venezuela, mi mamá era secretaria de un colegio y mi papá Abogado. Soy el menor de la familia, me acuerdo siempre ir a la casa de mi abuela, ella me gritaba:

- ¡Richard a comer! - que bellos tiempos, un día, en Venezuela casi secuestran a mi papá, estaba muy asustado, tanto así, que decidió mandarnos a mi mama y a mi fuera de Venezuela, a un país llamado Chile, por nuestro bien.

Yo estaba por terminar el colegio, pero me sacaron antes de tiempo, los profesores estaban muy tristes, según ellos se iban uno de sus mejores alumnos. En la escuela no era muy sociable, así que, supuse que nadie me iba a extrañar, y yo pues menos, salvo una chica, de nombre Natalia, que siempre hablaba conmigo en los recreos, me encantaban sus ojos marrones, y su risa medio rara, siempre me contaba su día, que desayunaba, la pelea que tenía con sus padres y esas cosas, la verdad no me interesaba, pero no tenía más con quien hablar, con el tiempo le agarre cariño y supongo que ella a mí también. Cuando le conté la noticia de que me iba del país se puso pálida, súper blanca.

Le temblaba la voz, solo me abrazo y me dijo:

-"Jamás te olvidare"

No sabía que decir, solo la abrace. A la semana siguiente, ya retirado del colegio, mi mamá se puso a vender todo, sus joyas, su ropa, el carro, la nevera y esas cosas. La verdad yo no sentía nada en ese momento, ni felicidad, ni tristeza, solo estaba un poco agobiado, ¡mi mamá gritaba mucho!

Pasaron los días y, casi se acercaba el día del vuelo

Mi mama lloraba, decía:

-Quien me va a cuidar las plantas -

Pero otro día despertaba feliz y decía

-al fin nos largamos de este país -

Y luego dicen que los bipolares y hormonales somos nosotros. Yo me la pasaba jugando play, era mi único escape, jugar mis videojuegos con mis canciones raras, ya saben, antisocial club y pum. Llegó el día del vuelo, yo arrastraba las maletas, mi mamá preparando todo, Cuando estaba en el avión, sentí un dolor en el pecho, algo que no puedo explicar, pero sentí un vacío.

Creo que en ese momento caí en cuenta que me iba del país, caí en cuenta que tal vez ya no vería más a mi papá, a mi familia, a mis compañeras del colegio, que todo lo que conocía, ya no estaría Los recuerdos me invadieron, y me puse a llorar

Mi mamá, me abrazo y me dijo

-todo saldrá bien -

Me puse a llorar como niño pequeño, he perdido mi imagen de cero sentimientos, en medio del llanto me quede dormido, hasta llegar a nuestro destino, estaba aterrado, tenía miedo de hablar con los Chilenos, mi mamá estaba tranquila, tomaba muy bien la situación, le dijo al taxi que nos llevara a la avenida Alcalara, donde vive una amiga de mi mama, ella nos recibió con los brazos abiertos, lo cual agradezco con toda el alma, nos dio colchones, sabanas y almohadas para pasar la noche, me instalé, puse mi teléfono a cargar, y me acosté, mi mamá estaba súper histérica, se movía para allá, para acá, siempre con su tacita de café, mi madre y su amiga hablaron y hablaron toda la noche, yo las escuchaba como de lejos, hasta que poco a poco me dormí.

Al día siguiente, mi mamá tenía que averiguar para inscribirme en el colegio, yo estaba súper emocionado, con mi experiencia de niño excelente, sería súper fácil sacar buenas notas, lo sé, amigos soy todo un nerd, no estaba interesado en conocer o hacer amigos, solo venía a estudiar. Después de eso, mi mamá me llevó a comprar el uniforme, un momento incómodo ella todavía cree que soy un niño mamá tengo 16 años ¡YA SOY GRANDE!

Bueno en fin, en una semana empezaba el colegio

El primer día, ay amigos

Estaba nervioso, había una chica hermosa, que me producía ansiedad, me daba vergüenza que ella me viera, ay Jesús, que Vergüenza. Por mucho tiempo la esquivé, me preguntaba algo y yo me hacía el loco, las siguientes semanas me hice amigo de unos chicos bien cool, Hablaban de cosas referentes a memes, a youtubers, o cualquier novedad de internet. Allí todos podíamos usar nuestros teléfonos y no sentir que nos lo podían robar. Mi mama consiguió una vivienda

Arrendada con el dinero que traíamos de Venezuela, sin embargo, no teníamos tantas cosas, solo lo necesario, la experiencia, me enseñó que a veces compramos más de lo necesario, gastamos el dinero en cosas innecesarias. Al regresar del colegio me ponía hacer los deberes, con la música a todo volumen. Mi mama iba a entrevistas de trabajo, yo le preguntaba

-¿estás bien?

Y ella siempre con una sonrisa me respondía:

-Sí, sí estoy bien, tú concéntrate en tus estudios. Nunca prestaba atención en lo que hacía mi mamá, siempre estaba concentrado en mí, en mis problemas de adolescencia, ya saben, las notas, los exámenes, los trabajos, publicar indirectas en Facebook, poner letras de canciones en mis estados de WhatsApp, ver mi serie en Netflix's, ya saben lo que hacemos nosotros.

Aunque sí extrañaba a mi papá. Mi papá tuvo una infancia muy difícil, salió a trabajar a temprana edad para mantener a sus hermanos, admiro mucho a papá, y lloro en las noches, pero ya en la mañana es como si nada hubiera pasado, a veces hacemos video llamada me pone feliz contarle mi día, me escucha con mucho interés y siempre termina diciéndome.

-Apoya a tu mamá, que está pasando por un momento difícil -Eso me deja pensativo, ¿por qué apoyarla? Si me dice que está bien, No veo el momento difícil, me da la comida a mí, me lleva y trae del colegio.

El que está pasando por un momento difícil ¡SOY YO! o bueno... al menos eso pensaba.

Un día, salí temprano del colegio y fui a mi casa, al llegar, escuché por accidente la conversación de mi mamá y la señora que nos arrendaba, escuché que debíamos 4 meses. Yo quedé sorprendido, mi mamá se puso a llorar, yo llegué silenciosamente, en la mesa del comedor había unos papeles, ¡eran deudas! mi mamá estaba endeudada y al lado había dulces y chocolates mi mamá me vio y secándose las lágrimas y me dijo:

-¿Qué haces aquí? Llegaste temprano

-nos dijeron que podemos salir a esta hora, y... ¿esos dulces?

-no son nada, me los regalaron

-no, no, no, nadie te regala esa cantidad de dulces, ¿dime qué pasa? ¿En qué trabajas? ¿No tenías un empleo?

-ok escucha, trabajé, 2 meses en un restaurante, pero no me pagaron, la única opción era vender dulces en los buses, para poder darte de comer Ahí mi mamá se puso a llorar, yo la abracé

-Mama, yo te ayudo a vender, yo te amo

Ahí entendí lo que mi papá se refería, en ese momento sentí otro dolor en el pecho, por ver a mi mamá así, ¿así es un corazón roto no? Me sorprende lo fuerte que es, tanto tiempo ocultándome su depresión, solo para que yo estuviera bien.

Ahí aprendí una cosas:

Que no solo yo tengo problemas.