Natalia era una chica, que, al igual que Luis y Leyre, tenía 12 años y iba a su mismo instituto. Natalia se pasaba el día leyendo cuando podía, y tocaba el piano. En los patios, a veces estaba con sus amigos, pero nuchas más veces, leía. Y eso, ya le había causado algún que otro problema con Emma Gonzalez.....
Aquel día, a Natalia le habían comprado un nuevo libro. Era un libro muy interrsante. Trataba del amor entre una chica de clase media-baja de familia medio inglesa por parte de su padre, ya fallecido; y un chico de ojos grises, y un problema de cojera en una pierna... A cualquiera, creo yo, le habria gustado.
Estaba ella leyendo, como habitualmente, agachada sobre su libro,mientras todo el mundo a su arlededor se lo pasaba en grande jugando, o simplemente riéndose de algo que parecía muy interesante. Pero Natalia, ajena a esto, seguía leyendo y leyendo:
-Hola niña, ¿Qué haces ahí tirada en el suelo? ¿Estás haciéndote fotos o mandando whatsapps? Déjame ver tu móvil, aunque seguramente no sea tan bueno como el mío.... Sólo para saber si puedo hablar contigo alguna vez.- sobresaltó a Natalia una chica.
Natalia levantó la vista y la vio, Emma con todo su esplendor, ahí parada, esperando a ver su movil...
Pero, al levantarse Natalia, Emma lo vio. Estaba leyendo un video.
-¡Ay madre!- dijo mientras fingía que se desmallaba sobre sus amigas, mientras la gente ya se agrupaba a su alrededor.
- ¡Pobre chica! ¡Seguro que la han castigado a leerse ese tocho!- exclamó señalando el libro.- ¿Quién te ha castigado? Tal vez... ¿Tomás? Es adicto a los libros...
-No me ha castigado nadie- dijo firme Natalia.
Emma, con cara malvada dijo- ¿Habeis visto chicos? Asi era Tomás de pequeño. Pobre niña. Es un caso prohibido. Mejor, dejarla leer; y, jamás le quitéis el libro, puede que os ataque.
Todo el mundo comenzó a desternillarsr de risa, unos por lo bajito, otros a grandes carcajadas...
Pero todos se reían de ella.
Natalia se preguntó en ese momenti que por qué a ella, que había muchos más chicos leyendo. Pero no podía hacer nada. Se quedó leyendo en el sitio, como si no pasara nada...
Pero eso no fue lo único malo del día. Ocurrió en clase de lengua. Tomás era el profesor de lengua, pero no había podido ir; asi que el profesor de educación física le sustituía. Estaban haciendo un examen. Era bastante corto, y para Natalia, no le ocupó mas de 20 minutos del total de una hora. Tras revisarlo un par de veces, cogió su libro y se puso a leer:
-Cggre ecgr- "tosió" Emma.
El profesor levantó la cabeza
-¿Sí?- preguntó
-¿Puedo ir al baño?- dijo poniendo cara de buena.
-Está bien, pero no tardes.Mi mesa estaba casi en la otra punta de la puerta, y Emma casi al lado. Asi que, no me explico que hizo para pasar por mi lado, "tropezar" con mi silla, y "caerse" al suelo estrepitosamente.
-Aaay- gritó Emma- mi rodilla, creo que me la he roto.
El profesor vino corriendo y me preguntó que por qué le había puesto la zabcadilla. Yo le expliqué que no se la había puesto, que sólo se había tropezado con mi silla....-Y, ¿Qué hacías para no ver como venía Emma?- le preguntó, mientras revisaba su mesa.
-Yo....
-¡Ajam!- exclamó, cogiendo el libro que estaba leyendo.- ¡Estabas copiando!
-¿¡Queee!?- dijo sorprendida- ¡Si sólo estaba leyendo!
-Claro, y, ¿Quien le dijo, señorita, que podias leer?- preguntó- Está bien, todos a vuestros exámenes, menos vosotras dos. Tú, Natalia, castigada mañana a las 12 en el aula. Y ahora, acompañarás a Emma a la enfermería .Vaya fastidio- pensé.
Pero lo mejor vino al salir de clase. Iba con cara lastimera, pero en cuanto salió...
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LOS AMIGOS DEL DESTINO
Teen FictionUnos chicos: Luis, Leyre, Alicia, Raquel y Natslia se hacen amigos casualmente, o, ¿tal vez no fue casualidad?. Esta historia cuenta su historia, como se conocen, y sus amores y deshamores