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- ¿Ah sí? ¡Pues vete a la mierda Thanat! - Metawin gritó fuertemente desde la barra de la cocina. - ¡Te quiero fuera de aquí! -

Lee Thanat bufó. - ¿Es una broma cierto? - cruzó los brazos sobre su pecho y levantó una ceja. - Está es mi casa Win ... tu te vas de aquí. -

Metawin apretó su mandíbula. - Yo ya vivía aquí antes... tu viniste a vivir conmigo. -

- Sí, pero yo termine de pagarlo. - Thanat sonrió. - Es mío, lo dicen los papeles... -

- ¡Hijo de las mil putas! - Metawin le lanzó un vaso que el mayor esquivó rápidamente. - ¡Cambiaste mi nombre por el tuyo! ¿Qué mierda te pasa idiota? -

- Deja de dramas Win. - Thanat tomó su chaqueta, colocándosela rápidamente. -Tengo que salir, vengo en dos horas y no quiero verte aquí ¿Vale? - Se acercó a darle un beso en la mejilla pero el menor quitó su rostro. - Bueno, intentar algo por los viejos tiempos fue mala idea. - una risa salió de su garganta. - Cuídate Hae. -

El mayor salió por la puerta, en un arranque de furia se levantó, Metawin Opas-iamkajorn siempre tiene la última puta palabra.

- Que te den por culo, estúpido. - Sacó su dedo medio y ahí notó cuatro pares de ojos viéndolo... tres asustados, uno divertido. - Señor Chivaaree, buenas tardes... Nanon, Ohm, hola pequeños. -

Los menores corrieron rápidamente hacia él, a veces les daba dulces de ilegal, tenían tres años era injusto que no los comieran, un par de veces los pequeños lo habían visto pintar en los pasillos y con gusto los había dejado ayudar, aunque su padre se quejara por la ropa después...

- Que espectáculo más interesante. - Bright sonrió de lado, apenas viéndolo. - Ohm, Nanon... vamos adentro. -

- Papi. - el pequeño Nanon hizo un puchero. - ¿Podemos jugar un ratiiiiiiiiito con P'Win? -

Ohm le secundo. - Por fis, por fis, por fiiiiisssssss. -

La mirada de Bright  se elevó hacia los ojos de Metawin. - ¿Estás alcoholizado? ¿Drogado o algo así? -

Metawin palideció. - ¡Claro que no! Yo no hago esas cosas... -

El mayor se encogió de hombros. - En los "artistas" es común. - Bright hizo comillas con sus dedos mientras utilizó un tono sarcástico. - No me gustaría que mis hijos estén contigo si estás así... -

- No estoy drogado, ni alcoholizado. - Win bufó. - Pero creo que hoy no es un buen día para una visita corazones... - tocó dulcemente su cabecitas. - Tengo... tengo que empacar. -

Los ojos de Bright se abrieron de impresión. - ¿Se mudaran? Qué bendición. -

Metawin apretó su mandíbula. - Me iré, solo yo... Thanat se quedará. - sus hombros cayeron. - Él se quedará en mi jodido departamento. -

Bright se quedó un momento en silencio, analizando si las palabras que el menor dijo tenían sentido. Lo recuerda bien, cuando el llegó a vivir al edificio él ya estaba ahí... un año después, Thanat se mudó con él. ¿Tiene lógica que él se vaya?

- ¿Por qué te vas tu? - Bright se aventuró a preguntar. - Tu ya vivías aquí... él debería irse ¿No? -

El menor asintió. - Debería... pero el muy hijo de - Bright señaló rápidamente a sus hijos. - su mami, cambió el título del apartamento. Es suyo legalmente y la idea de que la policía me saque no es muy bonita... - Win sonrió desganado.

- ¿Te irás? - Nanon hizo un puchero, su gemelo tenía lágrimas en sus ojos. - ¿Lejos, lejos? ¿Cómo papá? -

Un escalofrío recorrió su cuerpo, su mirada rápidamente se elevó hacía Bright que tenía una mirada sería, con un ligero toque de dolor.