27/06/21

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Narrado por Toni:

Desperté con el ruido de el maldito despertador indicando que ya era hora de prepararse para ir al instituto. Hoy era el último día de clase y aunque no quisiera me vi obligada a ir.
Miré en mi armario y coji un pantalón negro corto y una camiseta de tirantes del equipo de baloncesto, porque si mal no recordaba tenía entreno a la tarde y tener que cambiarse después de un caluroso día de instituto era un sacrificio.
Cogí una manzana y cerré la puerta, puede que las ganas de que las clases terminaran hicieran que mi brazo tirará demasiado de la puerta ya que el portazo no pareció pasar desapercibido por los vecinos.

Cuando llegué a la estación justo el autobús partía rumbo hacia el instituto.
-No me jodas -dije en un suspiro.
-yo también lo he perdido.
-Martha llevo como que una semana sin verte, el monstruo de Shelby te ha convertido en monja? - pregunté mientras reía.

Para quien no lo sepa Martha es mi mejor amiga, pero resulta que Shelby y sus dotes de monja vudú le ha echado una maldición porque de un día para otro son inseparables.

-Jajaja qué graciosa- Dijo con cara de pocos amigos- Si le dieras una oportunidad para cono....
La interrumpí de inmediato
-Ni hablar es una zorra y si tanto le gusta Dios que se vaya ya con el de una vez, si eso pasará el mundo sería mucho más tranquilo- Dije en respuesta a lo que sabía que Martha me diría y continúe hablando- OH dios mío ruego porque te lleves a esa alma en desgracia a tu mundo y nos quites ese peso de encima.
Me lleve un codazo por parte de Martha y tomamos rumbo a el instituto.

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Una vez allí me despedí de Martha y fui a clase de química. La verdad como era el último día no hicimos nada pero entre el calor, el olor a sudor que desprendían aquellos niños que parecían no ducharse en años, el ruido del profesor gritando y las bolitas de papel hicieron que la clase pareciera la más eterna del mundo.

Me encontraba en la última fila y pude ver a lo lejos a Regan (mi ex), lo admito, no me porte bien y me arrepiento pero pedir perdón no basta porque su coche... Mejor no hablemos de lo que pasó con el coche. Ya he pasado página y estoy intentando contener los ataques de ira porque no me apetece romper otra ventana de otro coche de otra novia. Regan y yo habíamos comenzado a salir a principios de curso, ella era nueva y la verdad me agradaba y me gustaba realmente, sentía cosas que no podía expresar y es que era tan maravilloso hasta que la cagué, y lo admito, la cagué mucho. Estuve meses intentando superar eso porque era difícil , por lo menos no decidió presentar cargos por lo de su coche porque la verdad no tenía ni el dinero ni las ganas para pagar una multa.

En cuanto salí de clase de química me encontré con Dot, otra de mis amigas y fui hacia mi taquilla. A que no adivináis quien era mi "vecina de taquilla" Shelby.
Su taquilla por dentro estaba llena de cruces y estampillas religiosas, combinado con purpurina rosa y fotos de Andrew (su novio).

Mientras pensaba en el asco que daba su taquilla su presencia paro justo en frente mia.
-hola toni-dijo con esa sonrisa que no se iba ni con lejia.
-hola, ¿Quieres algo? Tengo prisa-dije de mala gana.
-solo quería informar que mi grupo de la iglesia veraniega ya está en pie, todavía estás a tiempo, Martha se ha apuntado.
-No gracias Santa ya estoy ocupada- y salí pitando.
Todo esto de odiar a Shelby tiene una explicación, ella es SUPER Cristiana y no es que fuera malo pero le repugnan los homosexuales y como bollera que soy no quiero verle la cara. Además ella tiene que ver con mi ruptura con Regan.
Era una tarde de invierno cuando vi a su querido novio demasiado cerca de Regan, la ira me invadió y le pegue, terminó en el hospital y esa misma noche Regan quería hablar. Dijo que no era necesario haber hecho eso, que podría haber hablado con el en vez de meterle a puñetazos y que si era capaz de hacer eso con el quién le diría que no lo haría con ella. Esas palabras me quemaron por dentro, yo no sería capaz de hacerle daño nunca y la ira volvió, su coche estaba delante y cogí una piedra y pues ya puedes imaginar lo que pasó. Luego me arrepentí al instante pero ya era tarde y volver atrás no era una opción, así que lo que me quedaba era afrontar el futuro.

au- The WildsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora