hola hasta que me conozcas

Cap 12

Claro que todo era un mar de emociones, deku disfrutaba asu hermoso bebé rubio mientras cuidaba de sus otros dos bebes que tendrían bebés, shoto aún no sabía dónde meter tanta felicidad, era simplemente bendecido por el cielo.

-cuando regresemos mamá y papá deberían estar felices, no?- pregunto yuki hacia deku a lo cual este le sonrió y asintió

-te aseguro que cuando vuelvan ya lo sabremos, seremos los más felices- aseguró el omega mayor acariciando y revolviendo los cabellos del chico mitad mitad

Yoshio había comenzado con pequeños mareos y náuseas aunque nada para alertar a los adultos, en cambio su pareja estaba en contante miedo cuidándolo y consintiéndolo al maximo.

Ahora el próximo reto para deku sería presentar a su hermoso kibou, era hora de compartir su felicidad con amigos, familia y el mundo, no todos los días el héroe número uno regresa por su hijo.

-Mami, kibou es un buen Niño?- pregunto el pequeño dejando sus juguetes de lado y mirando al mayor el cual lo miró confundido

-claro que si mi hermoso bebé, eres el mejor Niño que pude haber imaginado- expreso deku con una sonrisa sacando una pequeña sonrisa del menor

-mamá, kibou quiere estar a tu lado siempre- expreso el menor emocionado- junto a ti y junto a papá- gritaba emocionado mientras corría por la habitación

-puedes estar a nuestro lado para toda la vida- expreso deku dando un gran abrazo al menor el cual este acepto más que emocionado- pero hay que ir a dormir, tu siesta de la tarde se está atrasando, para cuando despiertes papi abra llegado y ambos podrán jugar un poco más, si?- pregunto deku a lo cual el menor asintió emocionado y se lanzó sobre su cama

Deku besó la frente de su pequeño delicadamente evitando rozar la cicatriz y contó un cuento, mientras el menor cerraba sus ojitos y dormía plácidamente.

Deku salió de la habitación y cerró delicadamente notando que ahí se encontraban ambos jóvenes, yoshio sentado sobre el sofá mirando la televisión y yuki hablando constantemente a su estómago, era gracioso.

-por Dios yuki, son muy pequeño, como frijoles, los frijoles no escuchan, deja a yoshio descansar un rato- expreso el mayor entre risas causando carcajadas del omega menor y haciendo sonrojar a su hijo

-aún estás planeando la fiesta para presentar a kibou?- pregunto yuki levantándose del su lugar y dirigiéndose hacia su madre

-si, será mañana, tengo todo listo, el del buffet estará aquí desde temprano, abra muchas meses afuera y ya tengo un bonito conjunto que puede usar todoroki y kibou, lo peinaré yo mismo y abra algunos niños para que puedan jugar en su habitación, creo que está bien- expreso deku emocionado imaginando cómo sería el día siguiente

-yoshio y yo aprovecharemos eso e iremos a la casa de bakugou, yuki insiste en contarles ahora por si volvemos no haya ningún problema- expreso yuki algo temeroso sacando una carcajada de su madre el cual asintió

Izuku se adentró en la cocina a preparar la cena mientras los otros dos jóvenes ayudaban a acomodar un poco más la casa y ver la televisión, después de unas cuantas horas shoto llegó a la casa, dio un corto beso en la frente de ambos jóvenes y luego se dirigió hacia su amado prometido y beso sus labios en un beso de bienvenida.

-creo que alguien te espera en la habitación- expreso izuku señalando el cuarto del menor

Shoto sonrió de medio lado y con discreción se dirigió hacia el cuarto del menor, se encontraba algo oscuro y silencioso, podía escuchar sus leves ronquidos. Shoto se dirigió hacia la cama en forma de carro y se agachó hacia la altura del menor, primero pegó su nariz al cuello de este oliendo las pequeñas fermonas que desprendía, eran cálidas, tiernas, de un pequeño, aquellas fermonas agradaban al alfa interno de todoroki el cual pedía tomar al pequeño entre sus brazos y alzarlo por los aires de manera juguetona, como si de dos perros se tratase. Shoto pegó su mejilla con la del menor y comenzó a frotarla tiernamente haciendo que el pequeño rubio se removiera cálido ante el tacto de su padre, shoto comenzó a liberar fermonas y el pequeño comenzó a abrir lentamente sus ojos tomando el rostro de su padre entre sus manitas. Shoto lo miró atento hasta que el pequeño pudo enfocar su vista y sonrió emocionado al ver a su papá frente a él.

-papi!!- gritó emocionado

-hola pequeño, como dormiste?- pregunto shoto sin sacar su rostro de las manos del menor

-bien, mami dijo que si dormía tú jugarías conmigo- expreso el menor emocionado a los cual shoto río

-claro que si jugaremos, primero comeremos algo delicioso que preparo mamá y después podemos ir al parque- expreso shoto tomando a su hijo entre sus brazos

Shoto tomó a kibou como si de una princesa se tratase y este acepto gustoso sosteniéndose del cuello de su padre, ambos se dirigieron hacia el comedor donde izuku ya los esperaba sonrientes para comer, comer como una familia.