El Fantasma de la opera ♡Goldfred♡

♡4♡

Pasaron días y en la vida del azabache siempre escuchaba lo mismo por parte de su padre

-y Fred acaso ya llego esa carta-hablo un hombre de traje negro y cabello del mismo color-

-he...no aun no

-tranquilo Fred seguro no tarda en llegar

-mamá...

-yo creo que deberías dejar esas payasadas de la opera y te dedicadas a otra cosa ya pasaron 4 días

-yo...

-Fred mejor arregla te si tu también Freddy vamos a ir a caminar un rato

-si mamá-respondió el azabache si muchos ánimos-

-vamos Fred-respondió un castaño de ojos azules-

El azabache se sentía mal eso era obvio creía que nunca podría estar en la opera y que no podría cantar como a el le hubiera gustado, tal vez alguien escucho lo que quería ya que al volver a su casa su padre les esperaba con una carta en la mano

-y eso-pregunto una mujer de cabello castaño-

-es para Fred aquí dice que es del teatro

-enserio-los ojos del azabache se iluminaron como si de dos estrellas se trataran-

-toma-hablo dándole la carta-

El azabache no podía con su emoción iba a estar estudiando y practicando en la opera era un sueño hecho realidad para el, fue así que al dia siguiente se levanto muy temprano y se apresuro a cambiarse de ropa se puso una camisa de vestir negra pantalones del mismo color y un corset plateado

-Freddy me ayudas

-no entiendo por que quieres ir con tanta insistencia a la opera-hablo mientras peinaba el cabello del azabache-

-por que es lo que siempre he querido recuerdo que hace años iba a la opera de pequeño con nuestra abuela

-si lo recuerdo pero la verdad a mi no me llama mucho la atención así que es por eso que nunca fui jeje

-si lo se

-listo

-bien ya me voy adiós Freddy

-adiós Fred

El azabache llego temprano aun no había nadie a excepción de la chica que lo dejo entrar el silencio era algo muy inquietante pero no le importo, el sonido de sus suelas golpeando el suelo y del viento moviendo el enorme candelero del lugar, el azabache solo miraba todo hasta que decidió subir al escenario se imagino estar cantando frente a muchas personas hasta que una voz rompió sus pensamientos

-hay alguien ahí-dijo mirando por la parte de atrás del escenario-

A lo legos una figura de una persona miraba al azabache de pies a cabeza sin que este se diera cuenta