El Fantasma de la opera ♡Goldfred♡

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El azabache ensayaba solo bueno no tan solo era acompañado por aquel fantasma entre ellos dos ensayaban la canción que el rubio les había dado ellos eran los únicos que escuchaban aquellos hermosos ensayos cuando terminaron y la canción ya era perfecta el azabache dio a conocer a los encargados de la música y los coros la canción gracias a la elección del azabache la opera realizo la publicidad la cual acabo con cada una de la entradas debido a lo que pretendía el azabache el cual había decidido hacer un homenaje para el "fantasma", entonces llego un día antes del debut del azabache el azabache arreglaba lo que usaría para ese día tan importante su familia había asegurado ir a verlo no solo ellos si no que también el rubio y alguien más el cual era el peli morado de peculiares ojos  

-Gold

-si

-es mañana

-lo se

-crees que estoy listo

-lo estas además yo cantare contigo 

-estas seguro de que quieres que todos te oigan

-hace años que no canto para un publico sabes no estoy tan oxidado 

-estoy nervioso

-no te preocupes todo saldrá bien 

-Gold

-si

-cuando termine todo me dirás lo que quieres y yo lo cumpliré

-claro que le lo diré 

-bien ya casi tengo que irme podemos ensayar una ultima vez

-claro

Mientras que ellos cantaban el rubio escuchaba detrás de la puerta por alguna razón solo podía escuchar al azabache mientras esto pasaba un peli morado de grandes anteojos chocaba contra el

-ha lo siento Golden

-Bonnie que haces aquí

-bueno nos tienen trabajando como locos hay que recodar el escenario poner las luces 

-bueno te dejo trabajar

-gracias y si quieres entrar solo toca no tienes por que escuchar detrás de la puerta

-je je si claro lo hare

-ok adiós 

-adiós Bonnie

Esta es la historia de un joven un joven de ojos claros y hermosos el cual tenia un sueño, sueño que se cumpliría pero a cambio de un trato dar a cambio de recibir pero cual seria el precio por aquel sueño? aquel joven de azabache cabello solo conocía algo su sueño se haría realidad gracias al fantasma y después de que ese sueño se volviera realidad no solo el azabache se daría cuenta del precio si no que todos los presentes en aquella opera en la noche en la que el joven de cabello azabache cantaría