descendre // Intenabo

10: leave

—Ah...fue un accidente— dice para salir de la habitación.

Aiden no se crée eso ni por un segundo, esperando para acercarse a Gustabo y ver cómo está.

Preocupado por él.

Lo ayuda a limpiar la sangre de su nariz.

Sintiendo molestia, sabe que ese no es de fiar y siempre lastima a Gustabo.

—¿Qué mierda Gustabo?— pregunta molesto.

—Fue un accidente— el rubio dice como mecanismo.

Pero Aiden sabe que es mentira, que ese Conway solo lastima a Gustabo, ha visto las marcas en su muñeca otras veces, se dió cuenta de la sangre en sus zapatos.

No hay excusa.

Y no entiende porque Gustabo continúa con él, cuando no lo trata bien.

Porque sigue regresando a ese tipo, que no hace más que lastimar más y más a Gustabo.

Lo toma de las manos.

—Puedes irte conmigo, podríamos irnos a cualquier lugar que desees, lo sabes, siempre te lo he dicho desde que te conozco— Aiden dice tranquilo.

Gustabo lo suelta para ir a la cama y sentarse en ella.

—No lo entiendes Aiden, tienes una idea errónea, este Conway jamás me haría daño, se que no lo hizo a propósito— dice el rubio triste.

—No puedes defenderlo, si te lastimo, va a seguir haciéndolo— Aiden no podía creer las palabras de Gustabo.

—No sabes lo que pasa, nunca lo sabrás realmente— Gustabo y sus palabras sin significado.

—¿Entonces, que hay de esos días dónde llegas a la comisaría ebrio, odiando a Conway e insultandolo por todo lo que te hizo?— Aiden reclama.

Porque es verdad, Gustabo ya destruido, se rompe y siempre hay un culpable, Jack Conway.

El rubio no dice nada.

Así que Aiden decide continuar.

—Estoy aquí porque los vecinos escucharon un disparo, me preocupe, vámonos, y ya, te olvidas de esta vida, de Conway y solo seremos tu y yo, por favor, solo pelea contra él, no dejes que te controlé— dice esperanzador.

Pero parece que Gustabo no entiende, mientras niega.

Se agacha hacia sus pies, y Aiden lo ve, un arma.

La toma también queriendo quitársela.

—¿Qué haces con esto?— pregunta preocupado.

—No, suéltala por favor, es mía, necesito protegerme— Gustabo pide.

—Es peligroso— Aiden habla intentando quitársela.

—Basta Aiden, no me importa tu opinión, tengo mis razones— el rubio cuenta.

Aiden lo siente, el cuestionamiento de porque Gustabo está con ese idiota si lo lastima, si hace que sienta miedo de existir en el mismo lugar que el.

Porque sigue atrás de alguien que solo lo hace sufrir.

Mientras ambos siguen forcejeando por el arma.

Cuando termina en un disparo.

Ambos se ven sorprendidos.

Sin poder creerlo, Aiden cae al suelo.

Mirando hacia Gustabo, sintiendo en su pecho caliente, le ha disparado.

—¿Aiden?— Gustabo pregunta sin poder creerlo.

Aiden ve borroso, mientras ve a alguien más acercarse por la puerta, no puede morir ahí, no.

—¿Qué hacemos?— escucha la voz de Gustabo preguntar.

—Nada, si lo has hecho tú, no hay manera de que salgas vivo por haber hecho esto a un policía— la voz del más alto se escucha.

Y todo se vuelve negro para Aiden.