Después del insistente pedido de su novia, Matheus se levanta del sillón para ir al Centro Comercial que quedaba a tan sólo unas calles del departamento.
-- ¡Quiero comer helado! -- dice risueña, la castaña de 1,65 a su novio 20 cm más alto, mientras se pasean por los pasillos del Centro Comercial.
El suspiro resignado, caminando junto a ella.-Eres una caprichosa.
-- También, el amor de tú vida--le responde, colocándose la capucha del suéter de su novio.
El sonrió divertido.
-Solo hasta que conozca a Scarlet Johanson y se enamore de mi... Ya lo sabes... -le pico.
--Y en ese momento yo me casare con Chris Hemsworth--le responde ella, acercándose a la heladería.
Matt se encogió de hombros y espero a que ella eligiese el helado.
--Ése, ese y ese--le dice al chico que le atendía señalando el de chocolate, mantecado y fresa respectivamente.
-Lo quiere en cono de galleta o copa?
--En copa, ¡Por favor!
El chico preparó el helado con expresión aburrida y lo decoró con fideos de chocolate de colores.
La chica agradeció, después de tenerlo en sus manos y se alejo hasta una mesa para degustarlo.
Matt fue tras ella una vez que pagó, con las manos en los bolsillos.
-- ¿Quieres un poco? --le pregunta, después de mirarlo sentarse frente a ella.
Él nego.
-Disfruta de tu helado, pequeña golosa.
Una sonrisa se dibujo en su rostro y un Te Amo escapó de su alma antes de seguir comiendo su helado triple.
Matt río divertido
-Seguro que si llego a aceptar tu invitación... Ya no me. Querrías tanto.
-- No digas esa estupidece, Te Amo por soportarme, aún y cuando soy un completo desastre--dice, hundiendo la cucharilla en el helado después de bajar la mirada.
Matt revolvió su cabello con cariño-Eres mi desastre favorito.
Ella sonríe al mirar su reflejo en la mesa--Te odio, idiota--se levanto de su asiento y acercó la copa de helado a Matt antes de darle un beso y sentarse en sus piernas.
Él se dejó hacer, abrazando la por la cintura y apoyó su cabeza en el hombro de la joven.
-- Matt ¿estás exi...?--se sonrojo la chica.
El chico se sonrojo.
-¿Que? No... Te has sentado sobre. Mi telefono móvil...
No seas pervertida
-- No puedo dejar de serlo--respondé, acomodandose a la otra pierno--¡mmm! Aquí estás, delicioso.
Matt dio un respingo.
-No hagas eso... -dijo avergonzado
-- ¿No te gusta?
-Sabes que si. Puedes notarlo, literalmente...Pero nos puede ver cualquiera...
--Tú sólo relajate y disfruta--dice, comenzando a mover su cadera con sensual discreción mientras comía su helado con normalidad.
Matt se mordió su puño intentando aparentar normalidad.
-Para, no seas así...
La chica acelera su movimiento, al sentir la excitación de su novio.
-Joder -gimio sin poder controlarse- para... Para...
Miro con picardia--Eso, ni pensarlo--con su mano libre y con normalidad, liberó el miembro de su novio, levanto su minifalda y lentamente lo fue introduciendo el ella...
Dando una probada a la poca porción de mantecado que quedaba. Todo ocultado por el amplio suéter del rubio.
-Es que quieres volverme loco... -mat oculto su rostro en su cuello y sujeto su cintura con fuerza.
Ella ahoga un gemido mordiendo sus labios y acelera la velocidad de sus movimientos.
-Nos van a prohibir la entrada... -mordió el cuello de la joven al borde del orgasmo.
-- Pero no podrán quitarnos el momento--acelera, mientras siente que está por acabar.
-No voy aguantar más... No pares, nena.
Mantiene el ritmo al escuchar Aquellas palabras le excitaban tanto como hacerlo mientras miraba a las personas pasar por los alrededores.
Matt besó su cuello casi con desesperación y dejó un bocado más en el cuello antes de descargarse. por completo.
La chica sigue movidose después de sentir a su novio vacíarse dentro de ella.
-Estas loca... -jadeo ruborizado. Una de sus manos se colo bajo ella, acariciando su sexo
Un gemido escapa de ella sin darle tiempo de ocularlo-- ¡Que delicioso helado!--exclama, mientras un grupo de personas pasa por su lado-- No quiero parar de comerlo.
Matt no pudo ocultar su sonrisa mientras sus caricias se volvían más rápidas y audaces.
-- Ummm! Delicioso chocolate--exclama probando una cucharada del último sabor de su copa.
-Más vale que te dejes ir pronto... No te queda más helado..
-- Ya falt... ¡Ash!--muerde sus labios y comienza a tener espasmos incontarios mientra múltiples orgasmos recorrían su cuerpo.
El la sujetó cin firmeza, disfrutando de su temblor.
-- ¡Gloria a los dioses por el chocolate!--dice, antes de sentir como la fuerza escapa de su cuerpo y sus piernas y manos quedan como fideos.
Matt se movió con suavidad, colocando. La ropa de ambos.
Ella suelta un suspiro, mientras se acomoda para que Matt suba su ropa interior.
El joven lo hizo con rapidez y eficientemente.
-Un día de estos nos van a detener.
--Vamos a casa--dice, antes de reincorporarse.
El Asintió, levantándose con cuidado.
Dejaron la copa y comenzaron a alejarse, ella volteaba de vez en cuando para mirarlo y sonreír.
-Mi pequeñs pervertida...
-- Mi juguete sexual.
-Para lo que he quedado...
Ella sonríe y le da un golpe en el hombro.
-Y encima me maltratas
-- Tú también puedes hacerlo
-Yo jamás te maltrataria
-- No aquí, idiota.-- sonríe con picardia.
-Estas loca... Debemos hacer algo con tus hormonas.
-- Sí, calmarmelas--dice tomándolo de la mano.
*Continuará*
