MAHR

Capítulo 186.2

Capítulo 186 - Extra 2.2 - Shen Huai X Lu Yang (hace 40 años)

Shen Huai terminó su trabajo a conciencia, pero al final no pudo evitarlo. Encontró la casa de la familia Shen según su memoria. Sin embargo, cuando vio la bulliciosa calle frente a él, toda su persona fue como si hubiera sido alcanzado por un rayo.

Toda su tranquila autosuficiencia se derrumbó en este momento. Preguntó frenéticamente sobre toda la información de la familia Shen, pero el resultado final fue que no había ninguna familia llamada Shen viviendo aquí.

Sintiéndose perdido, Shen Huai regresó al hotel.

Ahora ha entendido que no se trataba de un simple viaje en el tiempo, sino que ha llegado a otro espacio-tiempo paralelo, en el que no había familia Shen y no habrá Shen Huai en el futuro.

Shen Huai se sentó en la silla, puso su mano en su cabello y dobló la espalda recta.

Cuando Lu Yang abrió la puerta, vio esta escena.

Vio que Shen Huai le dolía, lo que confundió un poco a Lu Yang, porque no sabía lo que sucedió.

Cuando Shen Huai escuchó el ruido, levantó la cabeza y vio a Lu Yang, también se sorprendió un poco. Luego preguntó en voz baja: “El vino de la última vez…. ¿Todavía queda algo?

Lu Yang se dio cuenta de que estaba hablando del vino tinto de arándano. Dudó un momento antes de volver a su habitación y comprar el vino y dos copas.

Acababa de llenarlo y estaba pensando en cómo consolar a Shen Huai, cuando Shen Huai ya bebió la copa de vino de un bocado.

Lu Yang: "Oye, más despacio ..."

Shen Huai decidió ahogar sus penas con vino y bebió una copa tras otra y pronto se emborrachó.

Lu Yang suspiró y no tuvo más remedio que levantarlo y ponerlo en la cama. Se quitó el abrigo, los zapatos y los calcetines y lo cubrió con una colcha.

Al ver al Shen Huai durmiendo, Lu Yang frunció los labios y se quitó las gafas para ponerlas en la mesita de noche.

Los ojos de Shen Huai eran muy hermosos. Incluso si estuvieran cerradas, las pestañas largas y densas eran como un pequeño abanico que se acomodaba en sus párpados, ocasionalmente temblando levemente, como mariposas batiendo sus alas.

Como si hubiera sido hechizado, Lu Yang inclinó la cabeza y besó sus ojos.

Inesperadamente, en este momento cuando sus labios estaban a punto de tocar a Shen Huai, Shen Huai de repente abrió los ojos.

Lu Yang se retiró apresuradamente, pero inesperadamente un brazo le rodeó el cuello y le tiró la cabeza hacia abajo.

Sus labios tocaron algo suave y sus ojos estaban frente a los ojos vidriosos de Shen Huai.

El cerebro de Lu Yang explotó con una explosión.

Agarró el cuello de Shen Huawei con la palma de la mano y lo levantó para profundizar el beso.

La temperatura en la habitación era cada vez más alta, y al final solo se podían ver hermosas siluetas.

-

Shen Huai se despertó con una resaca desgarradora y vio a Lu Yang durmiendo junto a él. Se congeló y los recuerdos de la noche anterior se vertieron en su cerebro como agua.

Shen Huai presionó su frente y cerró los ojos con pesar.

No esperaba que algún día tuviera sexo ebrio.