¿You Are? [Editando]

EPISODIO 8

La letra en cursiva demuestra el inicio y final de los recuerdos.

.

Wei Ying tomó tiernamente el mentón de Lan Zhan y lo fue acercando a su rostro poco a poco. Lan Zhan puso sus brazos alrededor de la cintura contraria mientras se deleitaba con la tierna expresión que en ese momento el menor poseía. Sus mejillas en un tono carmesí y esos hermosos e hipnotizantes ojos marrones... marrones.

La mirada de Lan Zhan inescrutable, pero había un atisbo de algo en sus ojos —¿Ocurre algo?

Lan Zhan alejó sus brazos de la cintura de Wei Ying y las acercó a su rostro, observando todo con lujo de detalle como si tratara de comprender algo. Wei Ying hizo una pequeña mueca deteniendo lo que sea que el mayor estuviera haciendo.

—Me haces cosquillas —soltó dejando escapar una pequeña risita, ocultando su rostro en el pecho del mayor.

—Wei Ying —llamó intentando que este le diera cara.

No respondió y se aferró aún más si eso era posible —¿Por qué de repente tienes curiosidad por mi rostro?

No dijo nada, toda la habitación se hundió en un silencio abrumador, lo único que se podía escuchar era la pequeña brisa que hacía revolotear algunas hojas y pequeñas gotas de lluvia que sonaban al chocar contra al suelo.

—¿A dónde vas? —Dijo Lan Zhan intentando detener al menor que se había soltado de él con brusquedad—Wei Ying —Llamó nuevamente levantándose de la cama.

Él seguía sin responder, tomó su ropa deslizándose en su túnica, abrió la puerta y para su sorpresa ahí estaba, justo a quien no deseaba ver en ese momento. Luo se encontraba fuera de la habitación con la mano en un puño a punto de tocar.

—Señora Lan —Dijo Wei Ying parpadeando aturdido, entró en pánico colocándose frente a ella.

Luo le propinó una fuerte cachetada haciendo que este cayera al suelo. Lan Zhan se dirigió rápidamente hacia ellos, la tomó de la muñeca y la empujó contra la pared que se encontraba detrás.

—Así que es aquí... aquí es donde siempre has estado, ¡Maldito fenómeno! —gritó dejando caer algunas lágrimas al intentar golpear nuevamente al menor pero cayendo al suelo en el intento.

—Lo siento —susurró mordiendo su labio inferior al intentar no soltar ningún sollozo.

—¡TE ACUESTAS CON MI ESPOSO! ¡MÍO! —Luo se incorporó mientras gritaba con desesperación, haciendo que Wei Ying se alterara más.

—¡Señor Wei! —gritó Xichen al ver la situación, se puso a la altura de Wei Ying en un intento por ayudarlo.

—Señor Xichen, no quiero seguir aquí, por favor, sáqueme de aquí, ¡se lo suplico! —gritó Wei Ying aún con la mirada baja, dejando caer algunas lágrimas mientras se aferraba a él.

—Señor Wei, tranquilo —alargó soltando un pequeño suspiro, su mirada se trasladó a su hermano, el cual se notaba, no creía que Wei Ying lo prefiriera antes que a él.

—Esto no se va a quedar así... ¡Todos ustedes me la van a pagar! —dijo Luo apuntándolos uno por uno.

Habían llamado la atención de varios discípulos, los cuales murmuraban a lo lejos. Luo amenazó con ir y contarle a todo el mundo que su esposo es un manga cortada, tiene un amante y se acuesta con él desde quien sabe cuando. Esto sin duda perjudicaría a Lan Zhan, todas las Sectas lo tienen como una persona pura, honorable y muchos de ellos desean que algún día sus hijos se conviertan en lo que se supone es el Segundo Jade. Perdería toda su credibilidad y su reputación.