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-¡Mierda Jihoon! Estoy nervioso...

-¿Por qué tu crush al que nunca has visto viene a confesarte sus sentimientos? No entiendo por qué estarías nervioso. -pasó perezosamente la página de una revista. – Te has cambiado cinco veces de camisa y te has peinado otras diez. Luces bien ¿sí? Deja de hacer el drama. Además, no eres tú el que debería estar preocupado de cómo luce, él ya sabe cómo eres.

- ¡Da igual! Y después de que me diga que le gusto ¿qué? Le digo que también me gusta y entonces... Entonces... ¿¡Qué hago entonces!? -suena el timbre de la entrada. – Ya está aquí, ay dios mío. Bien, bien, respira y abre la puerta. Vale, todo está bien. -tomó una gran bocanada de aire antes de abrir la puerta.

El chico que lo esperaba en la entrada tenía el cabello negro y era un poco alto. Estaba de espaldas a la pared por lo que se giró cuando Junkyu abrió la puerta, parecía sorprendido. Tenía los ojos oscuros y finos y la cara alargada. Junkyu pensó que no entendía la inseguridad de Yoshinori al mostrarse.

-Hola. -dijo Junkyu sonriendo. – Eres tú.

-No. -el moreno frunció el ceño. – Bueno, no exactamente. Soy yo, pero no soy quién esperas.

-¿Cómo? -todo era muy confuso.

-Yo soy Haruto, el amigo de Yoshi.

-Ah... ¿Y dónde está él?

-Escondido detrás de la puerta. -señaló hacia su izquierda. – Es un poco tímido.

-Ya... -Junkyu se asomó un poco, hasta que vislumbró una chaqueta negra.- ¿Yoshinori?

Entonces, la delgada bolita negra que se pegaba a la pared poco a poco empezó a salir de su escondite.

Espera, él era...

¿El chico de la tienda?

- H-hola. -tartamudeó, mientras bajaba la mirada después de estar completamente frente a él. – Ahora sí que soy yo. -Junkyu pudo vislumbrar una sonrisa de lado. – Sé que no será lo que esperabas, pero vine a una cosa, termine como termine y... -antes de que pudiera decir nada más, Junkyu se había acercado de un paso y había tomado su cara entre sus manos. Al principio fue un beso un poco rudo, pero solo les costó un segundo amoldarse el uno a otro, disfrutando de la sensación de poder tocarse. Sin separar sus frentes ni abrir los ojos, los dos se apartaron para tomar aire. – Me gustas.

-A mi también me gustas. -Junkyu posó su mirada en el rostro del chico frente a él. Tenía las facciones afiladas, y los labios finos, con el arco de cupido muy pronunciado. Entonces Yoshinori abrió los ojos y Junkyu sintió que se perdía en ellos. – Eres hermoso. -Yoshinori no dijo nada. – Por dentro y por fuera.

-Tenía miedo de no cumplir con tus expectativas, cuándo vi tu foto... Pensé que eras demasiado atractivo para ser real. -Junkyu río.

-Tú ya cumpliste con mis expectativas cuándo me enseñaste cómo eras, con una pared de por medio. -acarició suavemente sus mejillas con sus pulgares, a lo que Yoshinori respondió inclinando su cara sobre sus manos. – Habría besado a Haruto si no hubieras salido de tu escondite. -su broma los hizo reír. A los tres. – Oh, sigues aquí. -Haruto rodó los ojos.

-¡Claro que sigo aquí! Soy el mejor amigo. ¿Quién si no iba a grabar el beso? -levantó su celular al aire.

- ¿Lo has grabado? Voy a matarte como se lo enseñes a alguien. -Yoshinori lo señaló, claramente alterado. Entonces Junkyu lo abrazó por la espalda.

-Tranquilo, no pasa nada. -susurró en su oído, lo que lo hizo estremecerse.

-Sí, sí, hazle caso a tu novio, yo me marcho con el mío, antes de que alguien, probablemente yo, salga herido. -Haruto salió corriendo por las escaleras.

- ¡Él no es...! ¿Lo es? -Yoshinori giró la cabeza, mirando con ojos de cachorrito al menor. - ¿Lo somos?

-Sí, claro que lo somos. -Junkyu guió al peligris hacia su casa con una mano puesta en su espalda baja. Dentro, vieron a Jihoon sentado en la cocina, con una taza de café en las manos.– Jihoon, este es Yoshi, el chico del que te hablé. -esté inclinó su cabeza como saludo.

-Sí, ya sé. Vi tu foto. -sin decir nada más Junkyu y Yoshinori se dirigieron hacia su cuarto. - ¿Hoy tendré que dormir en el salón? -dos segundos sin respuesta y sintió como un zapato le golpeaba la cabeza. - ¡YAH! ESO DUELE.

-Cierra la boca maldito pervertido, solo le voy a enseñar la casa.

-Eso dije yo la primera vez que traje a Hyunsuk a casa. -otro zapato colisionó con su cabeza. - ¡CON LAS BOTAS NO!

Night Talks [Yoshikyu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora