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Marcos se quedó prendido de la pequeña Mariana. Mariana con 17 años, hermana del mejor amigo de Marcos, él sabía que su deseo por la pequeña solo sería un problema puesto que al ser mayor que ella por 5 años y tratarla como una hermana menor no le veía futuro a demás que le había jurado a Esteban su mejor amigo proteger a su pequeña hermana.

Mariana una pequeña e inocente señorita que, empezada a florecer, ella estaba siempre en todo, le fascinaba pasar tiempo con su hermano mayor y su mejor amigo, ella era consiente que Marcos era un joven guapo y carismático además que siempre la trataba como una princesa. Además, ella siempre estuvo secretamente enamora y fascinada por cómo era él con ella, pero sabía que él no la veía como una mujer sino como la hermana pequeña.

A solo dos meses de cumplir los 18 años, Mariana tenía la ilusión de dar su primer beso, pero ella quería específicamente que su primer beso fuera con Marcos. Con un plan en mente para que esto fuera así, espero con ansias a la fiesta que organizó su madre para festejarla. Se propuso que esa noche le pediría el favor a Marcos esperando que él por cariño aceptara.

Marcos recibió la mejor noticia de su vida, al está estudiando la carrera de abogacía, había solicitado hacer sus pasantía y servicio en Barcelona España donde fue aceptado, así que tenía que viajar y justamente viajaría un día después de la fiesta de la pequeña Marina. Era consiente que estar alejado de ella podría apagar lo que sentía por ella que para él era prohibido por el pacto que había hecho con su mejor amigo, así que sería la mejor opción irse para poder seguir adelante.

Dos días antes de la fiesta de cumpleaños de Mariana su hermano organizo una salida con amigos, y ella fue, entre platicas y juegos, Esteban se pasó de tragos, y Marcos fue el encargado de llevarlo a su casa junto con Mariana. A unas cuadras de llegar a su casa Mariana tomo la decisión de hablar con Marcos sobre el beso tan deseado.

Cuando llegaron a la casa Marcos ayudo a bajar a esteban y subirlo a su cuarto, cuando Esteban estaba ya en su cama Marcos bajo las escaleras y se encontró con una Mariana muy nerviosa, el tomo su mejilla mientras sonreía y le preguntaba que le pasaba, Mariana se armó de valor y le dijo – ¿Puedes darme un beso? — Marcos sonrío, y se acercó a ella besando su frente, Cuando Marcos se retiraba sus labios Mariana tomo la decisión de poner sus manos en su cuello y acercarlo a ella para por fin besarlo, Marcos tomo esto de imprevisto, pero al estar con sus labios pegados a los de Mariana perdió la fuerza de voluntad y termino por intensificar el beso, perdiéndose en el deseo y la pasión con su pequeña, después de uno minutos y por la falta de aire, se separaron levente. Mariana sonrojada miro a Marcos, este por su parte estaba conflictuado pero lo que Mariana le pedio a continuación fue lo que más profundo llego a su ser, --- Quédate esta noche conmigo—

Mientras dos personas se entregaban en cuerpo y alma a la pasión y amor del momento, un aturdido Esteban se levantaba de su cama un poco desorientado. Escucho un quejido a lo lejos sin prestarle importancia se levantó y se encamino al baño para devolver todo lo que había tomado, un poco más relajado se lavó la cara y los dientes, cuando otro sonido lo tomo por sorpresa un ronco jadeo, poco a poco recobro la consciencia, y salió de su cuarto para saber qué era lo que se escuchaba, y fue cuando se acercó al cuarto de su pequeña hermana, abriendo la puesta encontrando en la cama a un agitado Marcos sobre una sonrojada Mariana, Esteban se quedó paralizado al ver aquella escena, Marcos se percató de la sombra en la puerta y asustado brinco de la cama para tomar sus pantalones y ponérselos aprisa, pero no alcanzo a abrocharlos cuando un fuerte golpe en la mejilla lo tiro contra la pared, Esteban estaba hecho una furia y le grito--¡HIJO DE PERRA!—mientras se ponía encima de el para golpearlo más, Mariana se levantó envolviéndose en la sabana mientras le rogaba entre la impresión y las lágrimas que dejara de golpearlo, cuando Esteban se cansó de golpear a Marcos se levantó pateándolo en las piernas --¡LARGATE IMBECIL!

Un angustiado y lastimado Marcos se levantó del suelo, mientras en su mete se acumulaba una desesperación pues no quería perder a su mejor amigo no a su pequeña. Esteban estaba furioso mientras miraba a ambos con una cara de coraje y decepción, pues nunca pensó que su amigo fuera capaz de romper el pacto que habían hecho en su frustración le grito

-JURASTE NO TOCARLA, Y PROTEGERLA-, - DIJISTE QUE LA VEÍAS COMO UNA HERMANA-, - CONFIÉ EN TÍ...--

-Perdóname-

-LARGO-, -EN TU VIDA VUELVAS A HABLARME TRAIDOR-

Mariana solo lloraba mientras veía como marcos terminaba por tomar sus cosas y se iba sin mirarla, cuando se quedó sola con su hermano le grito – YO LO QUIERO-

Esteban –El solo quiere jugar contigo, juro no tocarte y mintió-, -te prohíbo volver a ver a ese traidor- sale del cuarto.

Mariana entre lágrimas corrió al baño, pues le dolía ver como por su culpa su hermano y su mejor amigo peleaban, ella no quería eso, ella quería que su hermano aceptara sus sentimientos y tenía la esperanza de que Marcos le correspondiera, después de bañarse y arreglar su curto se acostó en su cama llorando y poco a poco el cansancio la venció.

Marcos salió corriendo mientras lagrimas caían por sus ojos, quería a esa pequeña pero la amistad que tenía con su amigo era más fuerte y por una pequeña debilidad termino perdiendo lo que más quería a su amigo casi hermano y a su pequeña, tomo la decisión de alejarse era mejor eso a ver sufrir a su pequeña.

Llego el día del cumpleaños de Mariana para su desgracia no tenía ánimos de festejar, desde esa trágica noche no volvió a ver ni saber nada de Marcos y su hermano la trataba con indiferencia y coraje, sus padres estaban un poco incomodos y después de que preguntaron por Marcos y su hijo les dijo que ya no eran amigos decidieron no volver a preguntar pues vieron la cara de molestia de su hijo, esa noche en la fiesta Mariana esperaba ver a Marcos, pero el no llego.

Al siguiente día, una Mariana muy triste salió de su casa para buscar a Marcos, quería hablar con él y decirle lo que ella sentía por él, camino hasta la casa de Marcos, cuando llego, toco el timbre esperando a que le abrieran, espero por un rato pero nadie atendió, decidió irse y cuando giro para marcharse vio que se acercaba el carro de los papas de Marcos, cuando la mamá de marcos la vio corrió a abrazarla, Mariana no entendía que pasaba, hasta que la señora le tendió una carta y le dijo –El no quiso despedirse por temor a no querer irse-, Mariana tomo la carta, mientras leía sus lágrimas salían de sus ojos marcos se había ido y ella no sabía si volvería....

CARTA

Mariana lamento despedirme de ti de esta forma perdón por lo que paso, yo no quería que algo así sucediera lamento a verme aprovechado de la situación, siempre te he visto como una hermana y te quiero como tal, perdón por no poder controlarme, pero Juro que de ahora en adelante no me veras más, dile a Esteban que me perdone por todo lo que hice y la promesa que rompí, Cuídate y lamento no haber ido a tu fiesta, pero me aceptaron para hacer mi pasantía en España y me iré para cumplir mis metas. Perdón por lo que paso y espero que seas Feliz.

Adiós. 

Historia cortaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora