Nada es imposible para una Potter - Sirius Black

Capítulo 3

Isabella's P. o. V.

Después de mis exámenes y de colocar mi nombre en el Cáliz de Fuego sin problemas, exceptuando por los muchos regaños que recibí de parte de mis padres, los padres de mi padre y, absolutamente, todos los profesores del colegio incluido Hagrid, me dirijo al Gran Comedor junto a los merodeadores. 

Se supone que hoy el Cáliz seleccionará a los campeones así que la tensión puede sentirse en el aire, respecto a mí; no tengo mucho que perder, en mi tiempo no saben si sigo viva, no hay rastros, aquí no me conocen mucho y, al fin y al cabo, mis padres ya no van a estar para cuando vuelva. Sostengo que no tengo nada que perder. 

Una vez que terminamos la cena el director llama nuestra atención con un bonito discurso/advertencia; como resumen puedo decir que debemos tener mucho cuidado y que la próxima prueba, sorpresa, será en unos quince días. 

Del Cáliz comienza a brotar un fuego azul del que, tiempo más tarde, "escupe" el primer papel - Del Instituto Durmstrang... ¡Odín Ragnarsson! - fuertes aplausos de la escuela nombrada llenan el Comedor acompañadas por unos mas bajos de los otros colegios, hasta que el Cáliz comienza a repetir la acción anterior seleccionando al segundo campeón - Del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería... ¡Isabella Potter! - la adrenalina corre por mis venas, que hermosa sensación. Aplausos por todos lados y algunas miradas de regaño mezcladas con apoyo. Y, por última vez, el Cáliz activa el fuego azul para sacar el tercer, y último, seleccionado - Y, finalmente, pero no menos importante, de la Academia Mágica Beauxbatons... ¡Paulette LeNoir! - la Academia aplaude elegantemente fuerte por un momento hasta que el profesor Dumbledore nos vuelve a advertir sobre el cuidado que deberíamos tener en el torneo. 

Al salir del Gran Comedor nos dirigimos en un muy extraño silencio de parte de los merodeadores hasta la sala común.

- ¿Por qué pusiste tu nombre? - me dice mi padre casi recriminándome una vez que llegamos a la Sala Común - Dime, ¿por qué? -

- Pues, ¿por qué, no? - 

- Porque tienes gente a tu alrededor que se preocupa por ti y no quiere que salgas lastimada - dice una voz ligeramente quebrada a mis espaldas. Me volteo y veo a mi madre con los ojos cristalizados - Sé que casi no te conozco y, te juro, que no entiendo por que me duele tanto pensar en que algo malo te suceda, pero así lo siento. Siento en mi interior que debo protegerte, eres mi amiga; eres mi familia... - mi cuerpo se afloja y comienzo a sentirme culpable - En serio odio que hayas metido ese... estúpido - de fondo se puede oír un "¡Evans!" con expresión de sorpresa de Sirius - papel en el Cáliz pero a pesar de todo eso... Te apoyo, ¿okay? Voy a ayudarte a salir del lío en el que acabas de meterte, Potter - la abrazo. Jamás creí que algo así fuera a pasar y, seamos realistas, si la profesora Trelawney lo hubiese visto en su "super bola de cristal" no le hubiese creído, en absoluto.

- ¡¿Oyeron eso?! ¡Ella es la futura madre de mis hijos! -

[...]

Sólo necesité quince días con mi madre para descubrir; una cantidad algo exagerada de hechizos y cuanto necesita nuevos amigos. Snape y yo somos los amigos mas cercanos que tiene, siempre y cuando no contemos a mi, acosador, padre... Es un poco aterrador que esté en todos los lugares a los que vamos... Se supone que es un castillo grande...

El frío del comienzo de Diciembre ya es algo intenso y, para mejorar las cosas, hoy es la primer prueba del torneo. A pesar de las claras desventajas del día ventoso de hoy me encuentro, realmente, ansiosa. Es increíble.