Rio

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Dejalo

Ahi estaba de nuevo, esa chica en la terraza de ese alto edificio, columpiando los pies en el borde del mismo, y con la mirada totalmente fijada en la nublada ciudad.

Su cabello se movía con el viento, y no parecía asustada de estar ahi, al contrario, parecia estar disfrutando ese momento que podría costarle la vida, tal y como si de un juego se tratara.

Yo solo iba a esa terraza a ver el paisaje, pero siempre que iba ella estaba ahi desde mucho antes, tarareando una canción mientras observaba la ciudad. Esa chica ni se volteaba cuando yo entraba por completo a la terraza, de hecho, no fui capaz de ver su rostro, nunca se volteaba, pareciera que ella fuera la única ahi, aún conmigo presente.

Espero que hoy no sea la excepción, poco a poco me estoy acercando hacía la terraza del mismo edificio, esperando que ella se encuentre ahi. Por mucho que nunca pude ver su rostro, algo me dice que ella no está bien, por mucho que no la conozco, presiento que trama algo, y pienso averiguarlo.

Abrí la puerta de la terraza, y voltee mi vista hacía donde la chica se sentaba normalmente, pero, este día es distinto, se encuentra de pie, en el borde del edificio, mirando hacía abajo sumida en sus pensamientos, ¿acaso eso era lo que había planeado todo este tiempo  ¿Su suicidio?.

Me quede ahí, totalmente estatico, pensando que debería hacer, si ayudarla o no, pero antes de que fuera capaz de reaccionar, escuche como ella daba un profundo respiro, probablemente para calmarse, pensaba que para ese entonces todavía no sabía que yo estaba ahi, pero estaba equivocado.
-Pensaba que justo hoy podría saltar- dijo ella mirandome por sobre su hombro, dejandome ver un poco de su rostro, y dejandome escuchar su voz más claramente por primera vez en meses.
-No lo hagas- le dije preocupado
-Dame una razón para no hacerlo- dijo ella dandose la vuelta, mirandome a los ojos, en su mirada no parecía haber vida, era como si simplemente era un envase completamente vacío.
-...- no le pude responder, pues ninguna palabra salio de mi boca, había un nudo en mi garganta que me impedia hablar, probablemente por la tension del momento.

-Vaya, ¿El gato te comio la lengua- dijo con una mirada burlona. Nunca fui bueno con las palabras, suelo ser muy directo, pero esta vez no puedo serlo, pues mis palabras pueden costar la vida de una persona, me sorprendía como la chica me miraba, una mirada totalmente burlona, como si esto fuera un juego, aún cuando su vida está en riesgo ella todavía me ve como si fuera una broma. Respire profundamente, y sentí que ya estaba más listo para hablar, tal vez podria hacer que recapacitara.
-¿Acaso tu vida es un juego para tí?- le dije
-¿Un juego?- respondio mientras inclinaba la cabeza como extrañada
-¿Acaso no siempre fue un juego?- me respondio
-No, No lo es- dije
-Entonces que es- dijo con un tono de voz más serio.

-Esta chica de verdad....no está bien en lo más minimo- se cruzo por mi mente ese pensamiento, los nervios que tenía se volvian cada vez peores con cada palabra que salía de su boca, ¿Que tanto le tuvo que pasar para que piense asi?. No soy el más apto para hacer esto, pero aún asi, me gustaría ayudarla.
-No sé que tanto hayas pasado, o que tanto hayas sufrido, pues no te conozco en lo más minimo, pero aún asi, te quiero ayudar, sé ve en tus ojos que alguien te arrebato la esperanza, pues no hay brillo alguno en ellos, pero por muy lastimada, desesperada, desesperanzada que estes, no te puedes rendir asi no más, sé que es dificil no rendirse, y que cuando sale de la boca de alguien el "no te rindas" suena como si fuera fácil, pero sé que no lo es, para nada,  entiendo eso, pero aún asi, sigue tratando almenos trata de seguir un camino en el que te sientas feliz, no es fácil hallarlo pero es posible, tienes que vivir para encontrar felicidad, no importa que tanto te cueste o que tanto te tardes, tarde o temprano serás feliz- le dije desesperado para intentar hacer que detenga esa horrible decisión que tomó.

Aún viendola ella bajo la cabeza, mirando hacía el piso, tomo aire nuevamente y me miro de nuevo, aún con la mirada perdida.
-¿Me dices tu nombre?-  dijo ella forzando una sonrisa
-Rio...me llamo Rio- le respondí inmediatamente
-Rio...que bonito nombre- dijo ella mirando hacía el nublado cielo
-¿Cual es el tuyo?- pregunté
-Oh, me llamo ______-
-______, me gusta, es lindo- le dije
-Gracias- dijo ella con una sonrisa en sus labios, una sonrisa distinta a la de antes, esa sonrisa parecía sincera, y cálida, totalmente distinta a la forazada sonrisa de antes. Sentí un relajo, pensando que ella había recapacitado, que se iba a detener y dejarlo ahi.
-Rio...- llamo ella con la voz quebradiza
-Dime- le respondí rapidamente
-Gracias...- dijo ella cabizbaja
-¿Porque me agradeces?- dije nervioso
-Por haberte tomado el tiempo de hablar con alguien como yo- levanto la vista
-No me necesitas agradecer por algo así, sé ve en tus ojos y en tí en general que necesitas hablar con alguien, si necesitas algo más estaré hay desde hoy, asi que porfavor baja de ahi, dejalo- dije
-Dejarlo...- dijo ella con la voz quebradiza mientras el viento soplaba fuertemente en la terraza, parecía que una tormenta se acercaba, tenía que apresurarme si quería que ella viviera.
-Porfavor, solo baja, dejalo, te ayudare, te escuchare pero porfavor detente- le dije
-Rio...dejalo, dejame, tus palabras me han hecho pensar, pero...no sé si pueda cambiar esto ahora-
-Claro que puedes cambiarlo!- le extendi la mano en señal de que ella bajara. Ella la observo por unos segundos, hasta que sonrió. Escuché como comenzaba a sollozar, bajo la mirada, y apreto sus puños con fuerza, levanto su mirada nuevamente, con los ojos llenos de lágrimas, aún sonriendo.
-Rio, gracias....de verdad gracias- dijo ella con lagrimas y con esa sonrisa en su rostro. Ella empezo a caminar hacía atras, cada vez más cerca del borde del edificio.
-______....no...no lo hagas...- dije en shock bajando mi mano extendida
-Lo siento, Rio...adiós...- me miro, sonrió, y se dejo caer, mi instinto me hizo correr, ella no merece morir, hay personas malas en este mundo, si, pero ella uno es así, su sufrimiento la cegó, haciendola desear su propia muerte, una chica como ella no merece eso.

La chica colgaba nuevamente del edificio, está vez, sujetada de mi mano, la sujete tan fuerte como pude, evité su muerte, ahora, solo me quedaba subirla de nuevo...
-Rio...¿C-Como? ¿P-Porque?- dijo ella aún en lagrimas, con una expresión de miedo en su rostro.
-Aunqus no lo creas, solia hacer trabajos militares, mis reflejos son más rápidos y mi fuerza es más que la de un hombre promedio, pero no es momento para hablar sobre mi, sujetate fuerte _____- dije rápidamente, inhalé, y comenzé a hacer fuerza, haciendo que ella poco a poco comenzará a subir al lugar donde saltó. Cuando fui capaz de ponerla en el piso nuevamente, ella se abalanzó sobre mi, sollozando, diciendo lo mucho que lo sentía, aferrandose a mi camisa lo más fuerte que podía.
-No te preocupes, _______, desde ahora, no volverás a estar sola, y no volveras a sentirte asi- dije abrazandola, aún no eramos nada, ni amigos, pero sentía que nos habiamos logrado acercar mucho más que antes, esa chica que ahora se encontraba en mi pecho, aferrandose a mi, aún llorando, ya no se sentira sola nunca más, pues no planeo permitirseló.

-No te preocupes, _______, desde ahora, no volverás a estar sola, y no volveras a sentirte asi- dije abrazandola, aún no eramos nada, ni amigos, pero sentía que nos habiamos logrado acercar mucho más que antes, esa chica que ahora se encontraba en...

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Okay esto me quedo medio raro, pero aún asi espero que les haya gustado, hace tiempo no actualizaba y sé que está historia no es la mejor pero quería traerles algo, y más aún no había historias de Rio en este libro asi que aqui esta la primera 🏃‍♂️

This FeelingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora