Atracción De Doble Filó

Tempestad

Las gotas resbalaban por la ventana, el clima había cambiado radicalmente y a pesar de ello las clases no se cancelaron puesto que si los dejaban ir ahora, las calles estarían resbalosas y peligrosas.

— Señorita Stilinski, me hace favor de leer el siguiente párrafo –pidió el profesor causando que la pelirroja despegará la mirada de la ventana.

— Claro, he mm, "En la mitología nórdica, los dioses están divididos en dos categorías: los Aesir y los Vanir. Los primeros eran los grandes dioses, vivían en Asgard, estaban ligados al mundo celestial y eran los dioses de la guerra, el coraje, los elementos naturales…", eso es mentira, los grandes dioses eran una familia que gobernaba a todos a los que llaman dioses y sus dones son obsequios de esa familia.

El profesor junto a toda la clase la miraron con una ceja alzada.

— Señorita Stilinski solo dediques a leer, omita comentar algo si no sabe nada del tema y mucho menos si no a puesto atención, le recuerdo que es nueva y no ha visto lo que nosotros con anterioridad... Joven Brown continúe con la lectura por favor.

La pelirroja solo asintió sintiendo la molestia en sus ojos.

— ¿Estás bien?

Escucho a su lado, miro de reojo a la persona que le hablaba.

— Si, gracias –susurro asintió.

El chico a su lado asintió de igual forma sin realmente creerle pero prefirió poner atención.

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El vestidor estaba por completo solo, al menos eso pensó Evan, comenzó a quitarse la camisa, había odiado con todo su corazón la clase de educación física, hasta se había saltado una clase para que el vestidor quedará solo y que nadie lo viera.

Se bajó los shorts y tomo la toalla que estaba dentro de su casillero.

— Tienes un lindo trasero.

El dolor que inundó su cabeza a causa del golpe que se dió cuando intento cubrirse se le pasaría rápido pero la sangre que estaba subiendo a sus mejillas dudaba que se fuera fácil.

— Lo siento, no fue mi intención asustarte, soy Gabe.

Evan asintió dejando care un poco la toalla para tapar aunque sea un poco su cuerpo.

— Evan, he mm, ¿No deberías estar en clases?

El chico frente a él rio por lo bajo asintiendo.

— Al igual que tú, tengo entendido que los de segundo estarán aquí en unos minutos, algunos tienen casilleros en esta área.

Evan asintió deseando que se fuera lo antes posible.

— Bueno, ¿Nos bañamos?

Evan boqueó sin conseguir que alguna palabra saliera.

Gabe le hizo una señal para que lo siguiera, Evan por inercia solo lo siguió, no era como que algo fuera a pasar.

(...)

Si alguien le hubiera dicha a Evan que terminaría viendo como sus hermanos amenazaban con matar a alguien solo por atreverse a siquiera tocarlo de forma indecorosa se hubiera reído para luego verlo con seriedad.