Capítulo 4

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Yoongi estaba terminando de atender a un cliente en la caja, cuando en eso escucha que la puerta principal se abre. Él no necesitaba voltear para saber quien era, con la pura voz pudo saber que su momento de tranquilidad se habia terminado.

-¡Sugaaaa amigo! Que bueno es verte de nuevo -dijo Jin acercandoce a él con una gran sonrisa.

-Quiciera decir lo mismo, pero no, ¿no deberias estar en la escuela?

-Sí, pero preferí no ir, hoy habia examen y no estudié.

-No me sorprende -susurró Yoongi, vió su alrededor y confirmo que solo estaba él -. No es que me importe, pero ¿no dijiste que venias con amigos?

-Sí, les dije que los vería aquí, no deben de tardar. Por mientras traeme un café americano ¿quieres?

De mala gana Yoongi fue a prepararlo, como solo era café podía hacerlo él sin necesidad de molestar al chef. En eso se oye que más gente llega y por el grito agudo de Jin supo que eran sus amigos. Prefirió no darles importancia y seguir preparando el café sin voltear a verlos, ya que estaba de espaldas. Cuando terminó de prepararlo fue a la mesa a entregarle el café y se quedó helado por lo que vio o mejor dicho a quién vio.

-Ey Suga, te presento a mis amigos. El alto es Namjoon y el otro bajito es Hoseok.

Yoongi solo se dedicaba a verlos con sorpresa.

-Mucho gusto Yoongi, puedes decirme Hobi si quieres -Hoseok estaba tartamudeando, sentía que sus mejillas estaban notoriamente rojas y que el corazón poco a poco adquiría un ritmo más rápido; y no entendía el motivo de sus reacciones. Tal vez la inexpresión de Yoongi le causaba cierta angustia, o quizás porque vio su reacción al verlo y no era la que esperaba: rígida, como tabla.

-El gusto es mío -dijo sabiendo que era mentira, pero no se le ocurrió otra cosa que decir.

-Puedes sentarte, no mordemos -dijo Namjoon sonriendo de forma amigable al ver que Yoongi se quedaba de pie. -. Sé que estás trabajando, pero quizás te puedas sentar por unos minutos? -Yoongi reacciona y se sienta al lado de Jin y Namjoon.

-Bueno, dijiste que querias hablarme, espero sea importante -dijo Yoongi a Jin.

-Claro, Suga, ¿cómo has estado?

-Ya sabes que estoy ocupado por el trabajo y deja de decirme Suga.- Yoongi no duró ni 5 minutos sentado. No entendia bien el motivo del porqué se estaba molestando. Sin duda no fue que Jin le llamara Suga, de nuevo, ni que le presentara a un amigo suyo que no le importa, pero quizás, solo quizás, él sospechaba que ver a Hoseok de manera inesperada pudiera ser el detonante de su malestar. Snetía rabia, despeción y un poco traicionado. Al ver que entraba otro cliente lo usó de excusa para irse de la mesa. Mientras que Hoseok estaba un poco impactado, se hablan y él responde, algo grosero, pero lo hace. ¿Será que son amigos? ¿Será que Jin le pueda ayudar a poder hablar más con Yoongi?

-Jin, ¿lo conoces?- le susurra Hoseok más que interesado.

-¿A Suga? Sí, es uno de mis mejores amigos. Lo conozco desde hace unos dos años cuando se mudó aquí después de lo de padre, cuando aún iba a la escuela -le contestó igual susurrando.

-¿Qué le pasó?

-Su padre falleció por un accidente. Ni él ni su madre pudieron quedarse en su ciudad natal, era muy doloroso para ellos.

-Pobre... -dijo Hoseok viendo de reojo a Yoongi con tristeza.

-Sí, no la ha tenido fácil, sumado a que su madre cayó enferma. No sabemos si por lo mismo o por algo que ya llevaba antes. Solo sé que, por lo que me dijo Yoongi, se activó unos meces después del accidente, cuando ya estaban aquí.

Hoseok se quedó en shook, no podía ni imaginar lo mal que debe de estar pasando Yoongi en ese momento. Su padre, su madre, esta solo y... su mejor amiga.

-¿Y sabes algo de su mejor amiga?

-¿Diana? Pfff, eran inseparables. Me contó que la conoció cuando estaba buscando empleo. No me dio muchos detalles, pero me dijo que era muy linda y amable.

-Espera, ¿dijiste que lo conociste cuando iba a la escuela? ¿Ya no va?

-No, desde hace tiempo la dejó de lado para poder comprar unos medicamentos que ayudaban al control del dolor de su mamá, no son baratas. Aparte que como su madre se cansa más rápido por lo mismo de la enfermedad, se propuso a él mismo pagar las cuentas necesarias y eso. Dice que no tiene tiempo para estudiar, que cuando esté más estable la retomará.

Dios, pobrecito. Pensó Hoseok. Imaginar las cosas horribles por las que debió pasar, las decisiones difíciles que tuvo que tomar y las veces en las que necesitó el hombro de alguien con quién descansar; le hizo sentir lástima, admiración y valentía. Debo ayudarlo, y sin dudarlo, se paró de su asiento y fue a donde estaba Yoongi.

-Hola.- dijo tartamudeando y en un hilo de voz.

Yoongi volteó a verlo sin expresión alguna y levantó ligeramente la cabeza en señal de saludo.

-Te queria preguntar si... ¿me puedes dar tu número de celular? Es que... vi que no me has mandado mensaje y creí que tal vez es porque te lo di mal el mío.

Yoongi estaba sorprendido de que Hoseok no entendiera la indirecta de que no quiere hablar con él, pero al verlo tan nervioso que hasta se sonrojó no pudo evitar sentir ternura que no demostró. Dio un pequeño suspiro, agarró una de sus plumas que tenía en el delantal junto con un papel y le dio el dichoso número que tanto quería sin decir nada. Hoseok al verlo le brillaron los ojos y lo tomó con timidez. Sí se lo había dado, estaba muy feliz.

-Solo no me escribas muy noche porque no contestaré -dijo Yoongi y se fue a la cocina, dejando a Hoseok con las palabras en la boca.

-Claro -dijo para sí mismo murmurando, sabiendo que Yoongi no le escuchó.

Hoseok se quedó viendo el papelito con su nombre y su número "Min Yoongi", de solo leerlo sentía un montón de mariposas en su estómago, combinado que traía hambre, y también se veía en sus temblorosas manos. Con cuidado guardó su papelito en el bolsillo del pantalón y volvió a la mesa con Jin y Namjoon que por alguna razón discutian, de nuevo, y aunque Hoseok estaba ahí no los oía. Solo pensaba y veía como trabajaba Yoongi. En pocos minutos tuvieron que irse de ahí para volver a sus clases, no sin antes despedirse de Yoongi el cual solo sacurdió su mano en señal de despedida.

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Dos mundosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora