Lo Difícil De Amar

Un Momento A Solas

Llegue a su casa, estaba sola lo sabía, Kanan me había dicho sobre eso hace unos momentos, lo sentía por Ruby y Hanamaru, ellas realmente se quieren, pero Si ella no lo permite es un poco triste, se que ella tampoco es del agrado de mis padres, bueno, eso es por la niñez, dijeron que ambas terminaron siendo una mala influencia en mi vida, pero no me importa, papá es un poco más tolerante hacia mis amigas, pero mamá no las soporta mucho que se diga, así que el saber que alguien como ella podría ser pareja de su hija amada, osea yo, bueno... Mamá se pondría muy loca o muy molesta, es lo que pienso. Jeje.

Toque la puerta, al principio nadie abrió, toque unas diez veces más, jeje, hasta que al fin abrió ella, estaba muy cansada, no sabía exactamente porque, pero debía suponer que era Por Ruby. No pregunté nada y decidí entrar, cosa que ella tampoco hizo algo por detenerme y así mismo, empecé a hablar.

—Hi, ¿como estas Día?

—estoy bien Mari, ¿que haces aquí?

—vine a verte, quería saber como estabas jeje.

—pues ya ves que estoy bien, ¿podrías volver otro día?

—¡Ah! ¿Porque? Yo quiero pasar tiempo con...

—¡no lo digas!

—con My girlfriend.

—¡Mari!

—¿what's? No es ninguna mentira, ¿o si?

—Aaaaah, no, no lo es.

—Shiny. ¿Porque estas triste?

—¿como si no lo sabes?

—¿sigues así porque Ruby no te dijo de la relación de ella y Hanamaru?

—¡Si! ¿Porque nunca me dijo nada?

—bueno, quizás no se sentía lista, así como tu para decirlo.

—¿como yo? ¿Porque como yo?

—pues, porque no le has dicho a Ruby que eres... My girlfriend, ¿no?

—bueno... No creo que deba decírselo a ella primero.

—ves, ella piensa igual que tu, ¿piensas decirle primero a tus padres?

—¿qué? ¡¿Estas loca?! Si, mis padres lo saben, van a querer hablar con los tuyos y tus padres me odian, sobre todo tu madre, ella es más. Recuerda que igual odia a Kanan, por como llegamos a influeciarte en la niñez.

—yes, pero eso no importa, para mí no importaría, ¿no eres feliz conmigo?

—¿Eh? ¿Yo? Bueno... Yo... –empezó a rascarse en su lunar. —bueno, no es que la pase mal a tu lado, y esas cosas. Bueno... Supongo que mi respuesta sería si. Jeje.

—siempre eh amado, esa sinceridad tuya, bueno, ¿quieres ir al cine?

—¿al cine? ¡¿Porque deberíamos ir al cine?!

—bueno... Para pasar un tiempo a solas, ¿tu no quieres?

—¿Mari? Yo... Bueno, yo quiero estar aquí cuando Ruby regrese, quiero saber porque me ocultó su relación.

—ya te dije que ella pensó igual que tu.

—¡ese no es el punto Mari! ¡Ella podría casarse y yo ni encuenta!