High School DxD - El Dragón de los Muertos

Capítulo 1

Capítulo 1: El viaje

4 días después.

Issei: ¡AHHH! - vuelve a correr contra una pared, pero al poner un pie en esta solo logra saltar. - ¡MALDICIÓN! - golpeó el suelo, ya estaba cansado, 5 horas intentado poder trepar una pared de 3 metros.

Que patético.

Desde que Nevan lo acepto como su estudiante, todo no le resulto muy bien que digamos. El dragón de los muertos lo había obligado a solo dormir 2 horas y el resto del día era puro entrenamiento que consistía en aumentar su resistencia.

El pelirrojo no fue suave, lo obligó a correr 5 kilómetros en tan solo 1 hora pero siempre quedaba a mitad de camino, y cuanto mas tardaba, mas aumentaba la distancia. Y a la hora de comer no debía consumir la cantidad de comida normal, por que de lo contrario terminaría vomitando.

De nuevo intento trepar la pared, con la esperanza de superarlo, pero nuevamente volvió a fracasar.

???: Issei, ¿que haces? - escuchó una voz en su espalda, asustándolo y volteo para ver de quien se trababa.

Issei: ¿Ha... Hayuru-nee? ¿que haces aquí? - dice el castaño ya recuperándose del susto que le dio su hermana.

Hayuru: solo venía a verte y ver como estabas Issei. ¿que haces escalando esa pared?

Issei: so.. solo estoy... practicando. - respondió, volviendo a intentarlo pero otra vez fue un fracaso. - ¡¡AARGHHH!! - corrió contra la pared para esta vez comenzar a golpearla, solo para romperse la mano. - ¡Ay!

Hayuru: Issei basta, te lastimarás. - no podía ocultar su preocupación por su hermano menor.

Issei: estoy bien Hayuru-nee. - sujeta su mano la cual quedó roja y un poco hinchada.

Hayuru: - se acerca a Issei sujetando su mano lastimada. - ¿por que siempre buscas preocuparme? - el tono de su voz no mostraba molesta, solo preocupación y angústia.

Issei: .... - baja la mirada. - solo quiero protegerte, Hayuru-nee. - contestó con tristeza, no quería que ella se sintiera así.

Hayuru lo miró, Issei siempre hacia de todo con tal de poder ayudarla a ella y a los demás. No quería que su hermanito terminara lastimado en esto.

Hayuru: no necesito que me protejas Issei, yo puedo valerme por mi misma. - acaricia la mejilla de Issei. - se muy bien lo duros que fuimos todos el otro día. Pero lo hicimos por que nos preocupas Issei, nadie aquí te odia ni nada, solo tememos por tu seguridad.

Issei: pero yo...

Hayuru: no hace falta que hagas esto Issei, solo vive una vida normal, como antes. - lo abraza. - te prometo que cuando todo acabe, tu y yo iremos a nuestro lugar favorito, ¿esta bien? Y tal vez por unas pizzas y helados, como los viejos tiempo. - la Hyoudou primogénita le sonrió.

Issei: si... esta bien, Hayuru-nee. - susurró, ocultando su tristeza con una forzada sonrisa alegre.

Una rato después.

Luego de que Hayuru se fuera, Issei se tomó un pequeño descanso. Era difícil, pero tendría, no, iba a hacerlo aun si el cuerpo le volvía a doler.

Issei: - mira la pared, y se levantó. - Nevan-sensei me encargo esto... no hay tiempo para redimirse. - susurró tomando mas distancia de la pared en ese callejón.

Tomando posición, cerró los ojos respirando suavemente para calmar su ritmo cardiaco. Los abrió de golpe antes de correr a todo lo que sus piernas podían, al estar cerca de la pared posó su pie en esta y sin bajar la velocidad puso el otro pie, logrando dar 2 pasos en el muro de ladrillo y finalmente tocar la parte de arriba con su mano y mantenerse en esta.